Ayer por la mañana, mientras ejercitaba la pata con un paseo
por la autovía entre El Castillo y La Vera (una de las tantas avenidas del
colesterol), me encontré con un viejo amigo de aquellos que dedicamos un tiempo
de nuestra vida a la cosa pública. Y menos mal que la conversa fue corta, que
si no lloramos a moco perdido. Porque coincidimos en la pobreza de toda índole
en la que se halla sumergida la política actual. Tanto que para sobrevivir, la
mayoría de cargos necesita estacones (artilugios ─antes de madera, ahora metálicos─ con los
que se sostienen los rolos de la platanera para que el viento o el propio peso
de la piña no los derribe) a modo de asesores; sin muchas luces en eso de orientar,
pero siempre dispuestos al generoso estipendio de fin de mes.
A la altura de La Cooperativa, el rabo de gato está que da gusto
verlo. Recuerda que tiempo atrás te conté cómo unos operarios del Cabildo, en
un día de fuerte brisa, esparcían semillas a mansalva. El fruto de aquella
acción se puede contemplar ahora en toda su magnificencia. Hay una huerta por
los alrededores del IES María Pérez Trujillo que llama la atención. Frondosa.
Estamos bonitos.
¿Cuánto tiempo lleva la estación de guaguas portuense
cerrada? Más de cinco minutos, seguro. ¿Sabes de algún concejal que haya renunciado
a su sueldo hasta que se solvente la anómala situación? Yo, tampoco. Pues
todavía siguen en la discusión acerca de la propiedad de las parcelas para
poder acometer la obra. Me causan estupor las declaraciones del edil Marrero: “No
me temblará el pulso…”. Cállate, que estás más guapo. Tanto liberado, tanto
viaje, tanto amor a la ciudad que me vio nacer y las guaguas en la calle. ¿Y tú
no dices nada, Carlos Alonso? ¿Y tus contactos en Madrid, Lope? Estamos
bonitos.
Oye, que el accidente del avión en Colombia haya sido
provocado por la falta de combustible, da unos retortijones de mucho cuidado. ¿La
insensatez humana puede alcanzar tales extremos? Ni que se tratara de un coche
que lo aparcas un rato mientras te acercas a buscar una lata en la estación más
próxima. ¿Qué demonios pasó por la cabeza de los responsables de esa tripulación?
¿O de la torre de control en el supuesto de no haber concedido la prioridad
requerida? ¿Estamos locos? En todo caso, estamos bonitos.
Se le ve ya la vena del cogote al popular Antona. Chiquito
pero currito. “Si el PSOE se me levanta de un consejo, no vuelve a sentarse”.
No, si lo del palo y tentetieso de tu partido es práctica cotidiana. Si lo
sabremos los realejeros. Una fotito, una sonrisita, pero a la hora de la verdad
al enemigo ni agua (Fonteide). Están bonitos ustedes para predicar con el
ejemplo. Fachadas, por no quitarle el da.
“Vallehermoso se vuelca en la visibilización de los derechos
de las personas con discapacidad”. De ahí la foto que ilustra este artículo.
Que es el número 1996. Primera matización: La palabra ‘visibilización’ no
existe. Otro éxito de los gabinetes de prensa. Y el verbo visibilizar significa
(ya lo comenté hace unos días): Hacer visible artificialmente lo que no puede
verse a simple vista. Jodido (y perdón por la expresividad) lo llevan los
discapacitados si deben recurrir a rayos x o a microscopios cada vez que deseen
dar a conocer sus derechos. Unos alegan que son las modas (¿modismos?). Otros
sostenemos que son idiotismos. O como decía Cantinflas: Falta de ignorancia.
Estamos bonitos.
La fiscal en el juicio del caso de Las Teresitas, que
celebra sus últimas sesiones, ha calificado de auténtico saqueo de las arcas
públicas la operación por la que Zerolo fue premiado y remitido al Senado para
hacer allí lo que le saliera de la ‘polla’. Demando nuevamente la comprensión
del que a este blog se alongue, pero salió de su boca, no de la mía. Sí, son
nuestros representantes. Estamos bonitos.
Cuatro de cada diez contratos son fraudulentos. Así de
tajante se mostró Patricia en su comparecencia para dar a conocer el resultado
del Plan contra la explotación laboral. Es decir, los empresarios, a pesar de
que estaban avisados de que se iba a llevar a cabo esa inspección, fueron
pescados in fraganti. No nos ha contado la vicepresidenta la segunda parte de la
película. ¿Se han abierto los correspondientes expedientes sancionadores o íbamos
de mentiritas? Estamos bonitos.
Los incendios internos se multiplican en Ciudadanos. Más
tensiones en Podemos (de ello saben mucho en Canarias, donde los círculos se
han cuadriculado). La operación Sultana en el PSOE corre paralela a las giras automovilísticas
de Sánchez. Lo dicho. Estamos bonitos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario