Compañeros,
compañeras, amigos, amigas, afiliados, afiliadas, militantes, militantas,
conocidos, conocidas, camarados, camaradas, colegos, colegas, partidarios,
partidarias, adictos, adictas, prosélitos, prosélitas, satélites, satélitas y
resto de presentes y presentas, así como aquellos ausentes y ausentas que por
motivo justificado no han podido acudir a este precioso y abarrotado recinto
que tan gentilmente nos acoge:
Henos hoy
aquí reunidos (y reunidas), inmersos (e inmersas) en la difícil y ardua tarea
de mostrar nuestra incuestionable dedicación al bien ciudadano (y ciudadana,
nunca es tarde si la susodicha, o susodicho, está buena, o bueno) mediante esta
entrega diaria, para presentar la candidatura que nos deberá conducir a un
triunfo electoral sin paliativos en la noche del próximo 24 de mayo. Porque
somos los mejores, nos lo merecemos y seguiremos siendo fieles depositarios (depositarias)
de la confianza de todos los vecinos (y vecinas) mayores de 18 años. Un
respetito.
Aunque en el
pueblo la convocatoria nos trastoca cada cuatro años las Fiestas de Mayo,
nuestros-as interventores-as y apoderados-as pondrán la nota festiva en ese
cuarto domingo vistiendo el traje típico (como debe ser) hasta que se haya
escrutado la última urna. Les suministraremos un bocadillo con chorizo de perro
y una pelota de gofio amasado. Elementos culinarios eminentemente autóctonos y
que serán repartidos en una piva debidamente engalanada con hojas (lo de ojos
va a ser que no) de palmera, o palmero (canaria, canario, por supuesto).
Durante la
campaña tendremos sumo cuidado con la cartelería de la Feria de Ganado (de ambos
sexos), no sea que algún despistado se empeñe en votar por animales diferentes.
Cada candidato y candidata se compromete desde ya a dejarse ver en cuanto acto
se haya programado, porque es mucho más rentable la presencia en el Concurso de
Vinos que cualquier mitin al uso. Eso sí, las catas para los profesionales, no
sea que un vaivén alcohólico nos tumbe esta esmerada línea de actuación. El
manual de instrucciones será libro de cabecera durante esos días
trascendentales y su memorización y posterior puesta en práctica norma de
obligado acatamiento. ¿Queda claro? [Sonrisas, o carcajadas, al grito unánime
de “Sí, maestro”]
No es
cuestión de estar pregonando a los cuatro vientos la declaración de interés
turístico nacional porque ha surgido un movimiento contestatario de rechazo al
gasto desmedido en la quema de fuegos artificiales. Cierto es que cada cual es
libre de volatilizar los euros que desee y aplaudir a rabiar cuando bajan en
cachitos incandescentes si la brisa no los manda a tomar viento fresco. El
pueblo no es tonto(a) y se ha percatado de que todos queremos subirnos al carro
del éxito. Sostengamos que son las calles las únicas protagonistas del evento y
mantengámonos a prudencial margen y a una distancia tal que la pólvora no nos
alcance. No parece prudente quemarnos a las primeras de cambio.
Muchísimo
tacto en cualquier manifestación que se haga a partir de ya, y perdonen que me
repita en la insistencia, en todo foro que se nos brinde la oportunidad. Cada
renuncio en el que nos pesquen, puede suponer una importante sangría de votos.
Aunque no es conveniente el silencio o la callada por respuesta, no caigamos en
la tentación de convertirnos en prisionero(a) de nuestras(os) palabras(os).
Seamos, ante todo, ejemplares. Si vamos dando un paseo y vemos a un-a paisano-a
sachando papas, no dudemos en echarle una mano. Mejor, las dos. Es preferible
un dolor de riñones pasajero, que un desplante de toda una familia. Puede que
junto al voto caiga una cesta de autodates.
Cuidadito en
el baile de magos. No aparentemos lo que no somos. O semos, que vista la deriva nacionalista, más tirando a naufragio,
lo mismo agenciamos algún(a) despistado(a). Los precedentes de anteriores citas
nos deben poner sobre aviso. A más de uno le ha funcionado el vaso de plástico
toda la noche y a la mañana siguiente apareció publicada la piltrafa en cientos
de muros. Y ya que menciono las fotos, que les valga de consejo el arrimarse al
sol que más calienta. Como es obligatoria la asistencia a festivales, verbenas,
concursos, romerías y demás, y los contrarios procurarán hacer lo mismo o más,
sitúense como mucho a dos metros de los profesionales de las poses. Que en ese
aspecto nos ganan por goleada. Si vislumbran un parapente, corran para El
Quinto (que ahí estará Manolo). Si observan un caballo dispuesto para echarse a
correr, háganlo ustedes también (que ahí estará Manolo, o Domingo). Si ven al
de protocolo con un papel en la mano, a seguirlo que va en busca de Adolfo (y
ahí también estará Manolo, y los demás). Podría estar varios cuartos de hora
incrementando el número de ejemplos, pero ya me entienden. Escribo etcéteras y
sepan que la lista se alarga hasta casi el infinito. Además, nosotros somos más
guapos. [Aplausos prolongados; atentos a la señal]
Creo haber
dejado esbozado el trayecto. Toca ahora hacer camino. ¡Ah!, que nuestro ateísmo
convicto y confeso no nos impida acudir a los actos religiosos. Siempre habrá
una excusa para el disimulo: contemplación del arte sacro, saludar a un amigo,
escuchar el grupo folclórico que canta en la ceremonia, mirar el artesonado por
si podemos incluir algún desconchado en el programa…
Y sin más,
paso a dar público conocimiento de los (las) componentes (componentas) de una
lista ganadora. En el número 1, como no podía ser de otra manera, un servidor
de ustedes, elegido por aclamación en la asamblea celebrada el pasado 29 de
febrero…
Hasta mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario