Un lustro, sí. Fue en octubre de 2009 cuando
iniciamos la aventura. Aunque en agosto habíamos hecho un amago con dos esbozos
de comentarios. A modo de prueba. Y con un sugerente “Puedo prometer y prometo”
arrancamos con fundamento el día 2 del mes y año antes señalados. Toda la
historia queda condensada en ese apartado de ‘Archivo del blog’ que hallarás
aquí mismo, en la columna de la derecha. Solo te basta en desviar algo la vista
y mover el ratón hacia arriba o abajo, según convenga.
Haremos en
unos días la entrada 1500. Casi todas, artículos de opinión. Ello supone una
media de unas trescientas cada año. Y aquellos amigos de edad parecida a la
mía, que han considerado que ya era tarde para adentrarse por los vericuetos de
la Internet
(como Elfidio Alonso o Isaac Valencia), aún me preguntan: ¿Ya no escribes?
Claro, habituados a los comentarios periodísticos que se vieron reflejados en
El Día (Desde La Corona),
La Opinión
(De reojo) y Diario de Avisos (El Asomadero), y sujetos aún a la compra diaria
del periódico en formato papel, creen que pueden haberme relegado a la página
de notas necrológicas. Y vuelvo a explicarles lo que ya he repetido hasta la
saciedad acerca del porqué abandoné las colaboraciones con los medios de
comunicación impresos. Bueno, y también algunos audiovisuales.
El escribir
supone una necesidad vital. Antes, cuando era fumador casi empedernido, me
levantaba pensando en echar la primera caladita, y me iba a la cama con el
deber cumplido: mandándote el último. Superado, afortunadamente, ese negro
pasado, y sin mayores complicaciones, agobios o traumas, surgieron bastantes
alternativas. Aunque, a decir verdad, esta de plasmar boberías por escrito
siempre ha estado presente desde que don Andrés Carballo Real, el recordado
maestro de La Longuera,
me introdujera en el vasto campo del saber. Con algún cogotazo añadido cuando
estimó conveniente y que bien me encargué de ocultar a los progenitores no
fuera que la ración se incrementase.
Las nuevas
tecnologías, a la que tanto miedo teníamos décadas atrás cuando hicieron acto
de presencia en las secretarías de los colegios aquellos voluminosos aparatos
que pretendían sustituir las viejas máquinas de escribir, archivadores, fichas
y otros documentos varios, han supuesto un considerable avance. En todos los
sentidos. Independientemente de que los aprovechados de turno hayan podido
desviar sus innegables virtudes hacia campos menos recomendados. Pero de todo
hay en cualquier faceta de la existencia.
Y si te
cuento la verdad, desde años antes me habían señalado la posibilidad de abrir
un blog. O, incluso, de confeccionar una pequeña página web. Pero fue la
jubilación el detonante que me indicó el momento oportuno para arrancar con la
aventura. Que luego se va abriendo y ofreciéndote nuevas posibilidades, nuevas
alternativas. Aunque manteniendo claro, desde un principio, una línea que no
difiere en gran manera de aquella que durante toda mi etapa docente, política y
de compromiso social ha regido un modus vivendi.
Entiendo que
poco aportaría a los lectores que se han ido sumando al proyecto, subiéndose al
carro, si prestara atención a todos los que se empeñan en que dé cabida a otras
facetas, que incluya en Pepillo y Juanillo opiniones y pareceres de otros. No,
lo siento, no estoy por la labor. Y no es egoísmo –podría entender al que así
lo pensara– sino que este es un vehículo de desahogo personal. Ya lo expresé
más arriba: una necesidad vital. Quedo debidamente reconfortado con que los
incondicionales de turno, que los hay, se alonguen cada día a husmear a través
de esta ventana que dejo abierta de par en par. Para recopilar y publicar envíos
ajenos, incluso de organismos públicos, existen múltiples canales. Jesús quiere
seguir siendo Jesús. Así de simple. Y de complejo, a la vez.
Ayer por la
mañana me encontré con un exalumno. Charlamos unos minutos y me confesó estar
desilusionado. Como lector de este blog me reprochó que escribo con segundas. Y
yo, como maestro de antaño, le corregí afirmando que hasta con terceras y
cuartas. Pero me alegré de haber sido capaz de inculcar no ya el interés por la
lectura, sino por los problemas sociales. Y como él estuvo involucrado en una
formación política de la que ha salido más quemado que la pipa de un indio, me
llamó la atención de que no se ha dejado seducir por determinados cantos de
sirena. Como otros que no contentos con los compañeros de viaje de no ha tanto
han fichado en el equipo que no iba a admitir renegados. Deben ser estos
últimos los que no quieren ver lo que este de la conversa.
En fin, si
cuento con la complicidad de ustedes, seguiré mientras pueda. No, mientras me
dejen no, porque si a alguien se le ocurriera poner cortapisas o puertas al
campo, con las mismas le voy a dar en las narices. Bueno estoy yo. A buenas
horas.
Como no me
amarga un dulce y a ciertas edades uno necesita cariñitos, pueden felicitarme,
dejando un comentario aquí, en Facebook o en Twitter, por estos cinco años de
ardua tarea. También lo pueden hacer aquellos que en algún momento han creído
verse reflejados en cualquiera de los párrafos plasmados. Sería una buena
fórmula para cobrarme la publicidad que les he brindado.
Hasta mañana.
MUCHAS FELICIDADES POR TU ARDUA TAREA PERIODÍSTICA
ResponderEliminarGracias a ti, Santiago.
ResponderEliminar¡Enhorabuena! No es fácil permanecer en la brega un lustro.
ResponderEliminarA por el otro y a seguir compartiendo reflexiones con nosotros y enriquecernos.
Un abrazo
Muchas gracias, tocayo y maestro.
ResponderEliminarEnhorabuena Jesús. Gracias por "entretenernos" con tus comentarios y fotos. Sigue así 100 años mas y que todos los veamos. Un abrazo
ResponderEliminar¿No serán muchos, Manolo? Más vale ir poco a poco. Muchas gracias.
ResponderEliminarCuarto intento: felicidades desde Asturias. Regreso el próximo lunes. Un saludo
ResponderEliminarEstimado amigo Ángel: Es que ya no es a la tercera va la vencida, sino a la cuarta. Feliz regreso. Y no se apure que los nombramientos para este curso están cerrados.
ResponderEliminarFelicidades, hermanito. Tarde es, pero ya sabes que otras esperas me tienen ocupada.
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