jueves, 30 de septiembre de 2010

Desvergüenza

Saben ustedes a la perfección que uno se movió en el campo docente hasta el otro día. Y en los muchos años que transitamos aulas, pasillos y despachos, tuvimos la oportunidad de ‘vivir’ bastantes huelgas y paros. Pudimos comprobar, y sufrir, la falta de información sindical al respecto. Si teníamos suerte, lo mismo nos sorprendía algún liberado con el clásico panfleto que colocaba disimuladamente en el tablón de anuncios ubicado al efecto. Luego, tal y como llegó –a la escondida–, desaparecía. A veces –pocas– disfrutamos de  tremenda fortuna, por qué no decirlo, y en el tiempo de recreo asistía alguien a marcar las directrices. Y daba pena vernos salir de la sala de profesores con una cara de no haberte enterado de nada y más confuso de lo que podías estar antes de ser ‘debidamente informado’.
En las primeras que participamos ocurría el curioso dato de tener que estar presente en el centro. Luego vinieron los servicios mínimos. Que los sindicatos siempre consideraban abusivos. Ya daban por hecho de que los alumnos no acudirían y entendían que los sufridos profes iban a perder un día sin hacer nada. Como si eso no fuera lo que pretende la protesta. Pues ahora, con esta de ayer, a la que se ha ido por los reiterados vaivenes gubernamentales, las fuerzas sindicales han rizado el rizo.
Ha pasado el 29-S y todos –absolutamente todos– han ganado. Y esgrimen argumentos; incluso el mismo vale para los dos bandos. Cuando he alcanzado un estadio de la existencia en el que la mayoría de hechos se me importan una higa (esta huelga, por ejemplo; ya lo dije ayer), entiendo que el desprestigio de tanto dirigente sindical, que no da un palo al agua y vive a costa de los que cotizamos a la hacienda pública, se halla en el extremo más bajo de cualquier escala que se quiera utilizar de ‘baremo medidor’. Con una desvergüenza que raya el esperpento. Lo que era abusivo hasta anteayer, se trastocó en grave riesgo ayer mismo. Si los niños van al colegio lo estarán (en peligro), porque los servicios mínimos no garantizan ni la seguridad ni la atención. Además, la educación no es un servicio esencial. Sí, lo señalan los propios sindicatos. Lumbreras, si no es esencial, ¿para qué protestar si falta un maestro en tal o cual centro? Que se queden en casa con los abuelos. Y al que no tenga, que lo cuiden los liberados sindicales. De tal suerte pueden ir haciendo prácticas.
Ustedes, representantes del sector educativo de UGT, CCOO y resto de la tropa, que califican de auténtico “disparate” y ejercicio de “falta de rigor” estos servicios mínimos, se quejan al mismo tiempo por estimarlos abusivos –todos– y entender que se pretende dar la sensación de normalidad. ¿En qué quedamos? Aclárense.
Lo de los posibles piquetes en el servicio de transporte escolar es de libro. Máxime cuando se denuncia la campaña mediática empresarial para que los empleados no secunden la huelga. Lo verdaderamente triste es que en esas comparecencias ante los medios de comunicación, en las que se sueltan tanta cantidad de sandeces, donde se defiende una postura y la contraria sin el más mínimo rubor, no haya un periodista, uno solo, que sea capaz de alzar la voz para siquiera decirles que lo que es blanco no puede ser negro.
Una huelga general no es una jornada para llevar a los niños a los colegios, ha sentenciado el ilustrado de turno. Ni el Día de San Isidro, ni el Miércoles de Ceniza, ni el Jueves Santo, ni el día en que conmemoramos el nacimiento del Cid Campeador. ¿En qué quedamos entonces? Porque, a renglón seguido –ya que estamos en temas educativos–, se quejan, asimismo, de la mucha atención hacia la etapa infantil –no obligatoria–, con lo que uno se queda a dos velas. Sean consecuentes. “Los liberados sindicales también sufrirán descuento de su sueldo al ejercer su derecho a huelga”, aclaró un tal Arteaga, que no debe ser mi amigo Manolo. Menos mal, pues ya cobran, y bien, por no trabajar el resto de días, 364, según ustedes, unos 200, según yo (hasta 366, si es bisiesto, sagradas e intocables vacaciones).
Con tales antecedentes, el hablar del éxito de la huelga en el sector educativo se denomina ‘cinismo’, y hacerlo en el sector del comercio, porque cerraron las tiendas, se llama ‘miedo’. Me encantó que los porcentajes de participación sean establecidos por un simple sondeo, método con el que se alcanza el 99% de fiabilidad. Cuando puedan, pásenme la ficha técnica.
Un periódico, menos mal, se ha hecho eco de la ‘historia’ de Fundescan, triste acontecimiento en el que, supuestamente, hay de por medio un delito de apropiación indebida de los fondos de esa fundación y del que más de un sindicalista liberado, que ayer ondeó la banderita y se colocó detrás de la pancarta, deberá responder ante la querella criminal admitida a trámite. De este hecho parece que UGT no quiere hablar. No sabe, no contesta.
El pretender justificar la incapacidad negociadora a costa del esfuerzo de los trabajadores me parece, cuando menos, una desvergüenza. Y en una negociación no vale escudarse en que la culpa siempre es del otro. También le cabrea a un servidor que le hayan congelado la pensión, porque yo sí había cumplido con mi periodo de cotización. Les soy sincero, señores sindicalistas, la ineptitud de los políticos parece haberse contagiado en otros gremios. Hasta mañana, que ya es octubre, e iremos todos a trabajar menos los liberados sindicales que vuelven a disfrutar de un bien merecido descanso tras una jornada agotadora. A lo peor se trillaron un montón.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Yo no voy

No, yo no voy a incidir en lo que pienso acerca de la falta de docentes en un considerable número de centros (colegios e IES) de  Canarias. Y me apena el comprobar que madres y padres hacen guerras por su cuenta, sin percatarse de que eso ni siquiera alcanza la categoría de grano molesto para la Consejería. Pero me pregunto con insistencia dónde demonios están las Ampas, qué hacen, para qué las quieren. Aunque debemos reconocer que algunas cumplen a duras penas con los cometidos estatutarios. Lo malo es que se quedan ahí y deben apuntar más arriba. Porque existen federaciones que fueron fundadas en años de muchas más necesidades para aunar esfuerzos y reivindicar mejoras en el sistema educativo. Parece que vamos marcha atrás y sin frenos, por no decir de culo. Los responsables, es un decir, de la educación en estos peñascos están ‘privados’ porque las reclamaciones lleguen a cuentagotas. Las comunidades educativas deben percatarse de que estos intentos solitarios a nada conducen. Teníamos meridianamente claro hace unas décadas que la unión hacía la fuerza, y bajo esa premisa nacieron Godínez, Fitapa, Benahoare, Fimapa, Galdós… Les recuerdo lo que suele ocurrir en el fútbol. Mejor, pregúntenselo a Arconada o Antonio Álvarez.
No, yo no voy a votar por Belén Esteban, ni por Hugo Chávez, ni siquiera por Santiago Pérez. Tampoco voy a estar presente en manifestación alguna ni pienso sumarme a la huelga. Hoy iré, como cada día, a buscar a mi nieta. En noviembre de 2002 yo fui uno de los muchos miles que acudimos a Santa Cruz para protestar por el tendido eléctrico. Y la verdad es que hice acto de presencia sin demasiada información previa. Por mi culpa, por supuesto. Por no leer convenientemente todo lo que se había publicado. Y salí de allí ‘manifestando’ lo de “a mí no me trincan más”. En ello estoy. Me parece inoportuna esta huelga general, que nació como un intento sindical de justificarse ante la sociedad. Y se les fue de las manos. La comodidad y el apoltronamiento de los dirigentes (cruceros incluidos) pretenden lavarse con la algarabía del obrero. Ilusos los que crean atisbar soluciones a esta crisis desde España. Si la exigencia de Méndez y Toxo es echar un pulso, el éxito está garantizado, pues un día de vacaciones añadido es una exquisita golosina para la cultura latina. Lo triste es que al día siguiente seguiremos dependiendo de demasiados factores externos que ni siquiera nuestra singular Rita podrá solventar. Hay crisis: cierto. Hay paro: cierto. Hay ineptos en la dirigencia política y sindical: cierto. Hay gandules, vagos y aprovechados: muy cierto.
No, yo no voy a quedarme quieto. Porque no me da la realísima gana. Y mientras haya entretenimientos, esperanzas, ánimo y condiciones físicas adecuadas, seguiré traquinando sin importarme el que estemos a 29 de septiembre. Como se acaba de publicar la normativa que regula el proceso de renovación de los consejos escolares (aunque hay secretarios o secretarias que se lo piensan pasar por cierto sitio, porque –dicen– hay que cumplir muchos plazos, rellenar papeles, hacer reuniones, actos públicos de sorteos, votaciones…), y estoy empeñado en fundar una AAA (asociación de abuelos de alumnos), lo mismo presento mi candidatura. Ahora bien, las sesiones se harán en horario de tarde, como está estipulado y escrito. Nada de subterfugios ni componendas para que se efectúen en la mañana. Las cosas claras y el chocolate espeso. Sindicalistas, que son unos sindicalistas. Solo les falta solicitar el que le lleven el sueldo a casa. Promoveré la implantación de algunas asociaciones más. No quiero abuelos ociosos. A los huesos hay que darle movimiento. Sin aspavientos, pero jamás quietos. Cuando existan dos o tres AAA, crearemos una Federación, la FAAT o FAAN, según mentemos Tenerife o Nivaria. Y más adelante –no importa que el nieto haya finalizado sus estudios, puesto que nuestros cargos pasarán a ser vitalicios– alcanzaremos la tan ansiada Confederación, que nos dará derecho a celebrar las reuniones en La Graciosa…
No, yo no voy. Si tú has ido, me parecerá bien. ¿Y por qué no entiendes tú el que yo no me haya inmovilizado? Ese es el problema: si opinas como yo, amigos para siempre; si no… ¡Ay, demócratas!
Fíjense en el cartel. ¿Dónde ubicarían al Cándido y al Ignacio? Eso mismo, con la mandarria.

martes, 28 de septiembre de 2010

En defensa de Vicente Quintero

A Vicente se le podrá achacar que quiso ser alcalde de su pueblo y no tuvo la oportunidad. A Vicente se le podrá achacar que pudo haberse retirado antes. A Vicente se le podrá achacar que tiene sus prontos. ¿Y qué? ¿Quién no? Él sabe perfectamente que yo también le he reprochado ciertas cosas. Pero olvidamos –qué ingratos somos– la impresionante labor que desarrolló cuando tuvo a su cargo un sinfín de responsabilidades de gestión en la tarea municipal. De las que debemos destacar, con gran diferencia, el empuje cultural habido en Los Realejos. Avance  tan importante que aún vive de las rentas quien lo sustituyó en esa faceta. Sólo en una (educación y cultura), porque el resto tuvo que ser distribuido entre tres o cuatro concejales más. Eso lo obviamos cuando ha anunciado que deja la política activa. Y ponemos, como siempre, a funcionar el ventilador por si alguna porquería expande.
Vicente ha cobrado su sueldo como maestro durante todos estos años en el ayuntamiento, tanto cuando formó parte del equipo de gobierno como cuando ha estado en la oposición. La ley así lo contempla y como portavoz del grupo socialista a dicho precepto se acogió. Todo lo demás que se nos antoje rumiar, puede ser válido, asimismo, para cualquier otro concejal, incluyendo al alcalde. Los pensamientos son libres, faltaría más. Y en base a ello podemos opinar cuanto nos venga en gana. Y si le añadimos cuatro pizcas de chancha, mejor que mejor. Hay que condimentar los fregados para que estén en su salsa.
El alcalde de mi pueblo (digámoslo así) ha dicho que para esta próxima campaña electoral (mayo de 2011) defenderá la gestión de sus ocho años de mandato. Pero olvida que tanto en 2003 como en 2007 no alcanzó mayoría suficiente para el gobierno en solitario y hubo de recurrir a los pactos. Primero con el PP y en el siguiente con el PSOE. Porque no pretenderá Oswaldo (digámoslo así) –ni que los realejeros fuéramos ignorantes u olvidadizos–, apropiarse de todos los logros habidos (de los fracasos nadie habla).
En el transcurso de una entrevista al señor Amaro (digámoslo así), el entrevistador aprovechó para poner a caer de un burro al concejal Quintero Yanes. Durante unos minutos mi alcalde guardó el más ignominioso silencio, mientras un edil de su corporación, y la mía, era vilipendiado de la manera más grotesca. Recomiendo vayan a cualquier manual o enciclopedia y repasen algunas cuestiones de este importante género periodístico, por ejemplo, qué es una entrevista, origen, tipos, requisitos que debe cumplir el entrevistador, etc.
En estos días pasados he sido protagonista en alguna entrevista por la presentación de la nueva publicación (Potajito de cuentos). No me pasa por la cabeza (si enmarco el particular en personas circunscritas dentro de los cánones que determinan la normalidad o mente equilibrada) el que al interrogador se le hubiesen cruzado los cables y hubiera puesto a caldo de gallina a mis buenos amigos en eso de la escritura Álvaro, Esteban, Carmely… Porque si la situación descrita hubiese tenido lugar, Jesús se habría levantado y marchado tranquilamente para casa.
Podría entender, aunque nunca justificar, esa dialéctica en el fragor de la campaña electoral, si se cree que con ello se pueden arañar unos votos (digámoslo así). Pero el silencio de Oswaldo fue, sencillamente, lamentable. Ignoro si debe algo o si con su aquiescencia pretende desmarcarse de sus ‘adversarios’ políticos, pero a la representación institucional de una alcaldía hay que demandarle mucha más prestancia, solvencia y dignidad.
Me alegro infinitamente de que haya superado las jaquecas y esté dispuesto a echarle otros cuatro años. Pero le aconsejo humildemente que vaya al otorrino, porque a ‘mi alcalde’ (digámoslo así) le “exijo” que defienda el prestigio de ‘mi ayuntamiento’. Y parece no oír bien. No quisiera pensar, Oswaldo, que si la descalificación hubiese estado dirigida hacia un concejal de su grupo, usted hubiera permanecido impávido. No me lo creo. ¿O no es factible por ocultos intereses?
Coalición Canaria en Los Realejos está dando palos de ciego. Lo reconocen hasta los propios correligionarios limítrofes. Ojalá que jamás le paguen en otro medio con la misma moneda. No atisbo, sin embargo, tal posibilidad, pues al frente de la inmensa mayoría hay profesionales como la copa de un pino.
En la ilustración se intuye que eran aún amigos y todo marchaba sobre ruedas. Pero Amaro denuncia que en estos dos mandatos ha habido infidelidades, populares y socialistas. Pero no aporta más datos. Dígalas, hombre, dígalas. Hágalas públicas. Seguro que el PP, el PSOE, un servidor y muchos más realejeros se lo agradeceremos.
¡Ah!, Vicente, también te ‘acusan’ de falta de oratoria. Algunos ni se miran al espejo ni ven las dieciocho mil repeticiones de las supuestas entrevistas. Por lo tanto, amén del otorrino, oculista al canto, porque el de medicina general (digámoslo así) ya lo tenemos. Hasta mañana.

lunes, 27 de septiembre de 2010

Exámenes (7)

Se manifestaba en El Defensor (La Orotava, 20-julio-1907, año II, número 200, página 3) la imposibilidad de poder concurrir a los exámenes celebrados en la escuela pública de niños, regentada por D. Pablo Marrero Brito, pero un estimado amigo de la vecina población, presente al acto, ha quedado en enviarnos una revista de la brillante fiesta escolar que nos ocupa, á la que asistieron, además de las Autoridades y otras personas de significación amantes de la cultura de su pueblo, distinguidas señoras y señoritas que daban con su presencia mayor realce al simpático acto. Reiteramos al Sr. Marrero nuestro mayor agradecimiento por su gran interés en que fuéramos á presenciar los exámenes, y especialmente por las atenciones de que fue objeto uno de nuestros compañeros en la noche de ayer, por parte de dicho Profesor, en el local de su escuela.
Para el Director de Diario del Norte (Puerto de la Cruz, 10-julio-1908, año I, número 154, página 1), Esteban Hernández Baños, que regentaba una de las escuelas de Puerto de la Cruz, la información de los exámenes celebrados y la abstención en la emisión de juicios sobre el resultado, al tratarse de la suya. Aunque dicho diario había publicado la semana anterior la celebración de los mismos: El jueves en la de niños de la calle de San Felipe, el viernes en la de niñas y el sábado en la de varones establecida en el soberbio local del ex-convento de Monjas (Diario del Norte, Puerto de la Cruz, 4-julio-1908, año I, número 149, página 2). Con la consabida coletillla: A estos actos de verdadera importancia, deben concurrir los padres y madres de familia para enterarse personalmente de los trabajos de los alumnos. O el recordatorio del día anterior: Mañana á las 12, como ya anunciamos, comenzarán los exámenes en las escuelas públicas de esta localidad (Diario del Norte, Puerto de la Cruz, 8-julio-1908, año I, número 152, página 2). Sí hacía constar, no obstante, la composición de la junta examinadora –D. Melchor Luz y Lima, Alcalde; D. Benigno Mascareño, Cura-Párroco; D. Agustín Estrada y Madan y D. Cándido Hernández, vocales de la Junta local– y el nombre de los niños premiados. Con la transcripción literal de la citada relación, mi reconocimiento, porque algún que otro galardonado es antecesor de más de un conocido portuense: “Primeros premios: Julio Molina, Gabriel Padrón, Zenón Pérez y Manuel López. Segundos premios: Francisco Hernández y Manuel González. Terceros premios: Miguel Peraza y Tomás Bethencourt. Cuartos premios: Pedro Martín, Enrique González, Jerónimo Álvarez, Antonio Pérez, Amaro Molina y Manuel Real. En catón y cartilla, merecieron premio: José Mª. del Pino, Manuel Perdigón, Clemente Jil [sic], Agustín Jil [sic], Juan Hernández, Eusebio Perdigón y Ángel Gómez. También fueron premiados: Luis González, Cornelio Álvarez, Carlos del Pino, Carlos Peraza, Vicente Izquierdo, Pedro Real, Pedro Rodríguez, Israel Real, José Jiménez y Gregorio Alayón. No concurrieron al examen: Pedro Perera, José Pérez, Domingo Perdigón, Gonzalo González, Nicolás López, Camilo Padilla, Domingo Perera, Felipe Hernández y José Bethencourt”.
El acta de la sesión de la Junta local, celebrada el 8 de agosto de 1908, acordó otorgar “Diploma de Honor” al alumno Manuel Díaz Pacheco, por su aprovechamiento, asistencia y ejemplar conducta en el año que lleva concurriendo á la Escuela del Este, en cuyo breve tiempo se ha colocado en el segundo lugar de la misma; é igual distinción á José Pérez Trujillo y Manuel Padrón García, alumnos de la misma Escuela (A.M.P.C., Actas de la Junta local de 1ª. enseñanza (1901-1924). Legajo I (1), número 76, exped. 9).
Indicaba, además, el acta citada, que fueron distinguidos también los niños Julio Molina y Zenón Pérez Noda, de la escuela del Oeste, y las niñas María Pérez Trujillo, Luisa Miranda, Claudina y María Bazo y Carmen Ramón, por su aprovechamiento, asistencia y buena conducta.
La base 4ª de la circular (Junta Provincial) que regía el desarrollo de los exámenes permitía la concesión de “Menciones honoríficas” a los padres que mostraran especiales desvelos e interés por la instrucción de sus hijos. En consecuencia, se otorgan a Dª. Juana Pacheco, Viuda de Díaz; a D. Salvador Pérez Bautista, a D. Francisco Acosta García y a D. Celestino González Pérez.
De manera anecdótica dejemos constancia del siguiente suelto: Causa invencible, cual es la de que no hayan venido hoy á la imprenta dos cajistas, nos obligan á publicar una sola hoja del DIARIO, teniendo que aplazar para mañana la reseña de los exámenes de la señora Dª Nieves Galván y de D. Pablo Marrero, así como la de las soberbias fiestas de ayer, cuyas cuartillas están en las cajas en espera de quien las saque. Pedimos perdón por esta falta á los suscriptores. (Diario del Norte, Puerto de la Cruz, 13-julio-1908, año I, número 156, página 1)
Días más tarde de la reseñada información periodística, la correspondiente a la escuela de niñas (Diario del Norte, Puerto de la Cruz, 14-julio-1908, año I, número 157, página 1), que dirige la ilustrada profesora Dª. Nieves Galván de Morales. La supervisión del examen estuvo a cargo de la misma comisión anterior, salvo la presidencia del Sr. Cruzat, alcalde accidental portuense. Amén de otras personas, cuyos nombres no se citan. Por el brillante estado general de la enseñanza y disciplina escolar en el Establecimiento que dirige, no obstante la brevedad de tiempo transcurrido desde su toma de posesión, la Junta local de Instrucción acuerda, en sesión celebrada el 8 de agosto de 1908, concederle “Premio de Distinción”, en consonancia con los dispuesto en la Circular de la Junta provincial de 15 de julio próximo pasado. [A.M.P.C.,  Actas de la Junta local de 1ª enseñanza (1901-1924). Legajo I (1), número 76, expediente 9]. Al margen de la página correspondiente se indica la composición al completo de la Junta, con expresa mención de los que “dejaron de concurrir”. Presidió al alcalde, Sr. D. Melchor Luz y Lima. Asistieron, el Párroco, D. Benigno Mascareño y Pérez; el Sr. concejal, D. Cándido Hernández y Rodríguez; el Inspector municipal de Sanidad, D Juan González Martel y Hernández. No concurrieron: El concejal, D. Vicente Cartaya y Cairós; los padres de familia, D. Narciso Reverón Oramas y D. Lorenzo Luz y Lima; las madres de familia, Dª. Lía Tavío y Martín y Dª. Magdalena Fernández Massieu y el farmacéutico, D. Agustín Estrada y Madan.
Notable resultado, que no podía ser menos por las excelentes aptitudes que distinguen a la maestra, a la que, en consecuencia, se le transmite la más cordial enhorabuena.
Las labores presentadas por las alumnas fueron sobresalientes, llamando la atención por la belleza del dibujo y perfección del trabajo. Y la relación de alumnas premiadas, amplísima: Primeros premios: María Pérez, María Bazo, Luisa Miranda, Juana Rodríguez, Claudina Bazo, Adelina Ojeda, Manuela Miranda, Isabel Pérez, Virginia Carballo, Micaela Perera, Josefa Jordán, Carmen Ramón (12).
Segundo premios: Gloria Expósito, Inocencia Padilla, Beatriz Bazo, Eulalia Barrera, Jerónima Díaz, Isabel Pérez y Perdigón, Antonia Ravelo, María Isabel Carrillo, Francisca Jiménez, Francisca Hernández, Hermógenes Pérez y María Yanes (12).
Terceros premios: Carmen Ojeda, Dolores Reverón, Isabel Padilla, Felisa Padrón, Rosenda Ríos, Araceli Miranda, Antonia Reverón, Mercedes Hernández, Beatriz Carrillo, Flora Hernández y Ángela Ojeda (11).
Cuartos premios: Juana Pérez, Gabriela del Pino, Margarita Rodríguez, Magdalena Hernández, Rosa Hernández, Concepción Ravelo, Paula Expósito, Josefina Pérez, Rafaela Ríos, Dominga Carrillo, Ana Santiago, Carmen Carballo, Rosario Ramón, Inocente Pérez, Nazaria Ojeda, Josefa Martín, Carmen Ojeda y Carmen Álvarez (18).
En catón y cartilla: Concepción Molina, Concepción Díaz, Julieta Miranda, Araminta Perera, Elvira Ramón, Rosa Jordán, Pilar Molina, Aurora Molina, Aurelia Carballo, María Luisa Pérez, María Quintero, Bibiana Reverón, Carmen Ortiz, Ascensión Pérez, Otilia Montesinos, Josefina Marrero y Bernarda Martel (17).
También fueron premiadas Nieves González, Narcisa Galindo y Lucía Bethencourt (3).
No asistieron al examen: Dolores Carballo, Carmen Álvarez, Enriqueta García, Clotilde Álvarez, Juana Álvarez, Concepción Rodríguez, Elena López, Dolores Quintero, Rosa Marrero, Dolores Pérez, Candelaria Barreto, Carmen Gil, Rosario González, Margarita Marrero, Rosa Marrero,  Carmen Acuña, Eladia Acuña, Julia Carrillo, Marina Perera, Mérida Miranda, Claudina Jordán, Dolores Hernández, Marina Padrón, Adoración Pérez, Rosa Pérez, Dolores del Pino, Ana Acosta, Soledad Acosta, Elena Hernández, Rosalía García y María García (31).
Por último, la más breve alusión a los exámenes celebrados en la escuela de D. Pablo Marrero, inteligente y reputado maestro. Aparte de los anteriormente nombrados miembros de la comisión examinadora, la presencia del Profesor de Religión del Instituto Provincial y de la Escuela Normal de Maestras, D. José Tarife; las jóvenes maestras, señoritas Lucía Acosta y Filomena Marrero (que fallecerá muy joven, al igual que Clara Marrero, ambas familiares del maestro que se cita, Pablo Marrero); el estudiante de Comercio, Sebastián Castro (y que se anunciará, años después, como Profesor y Contador mercantil, en sus oficinas de Agustín de Bethencourt, número 3, y que realizaba sus trabajos, preferentemente para las sociedades explotadoras de aguas subterráneas, como se indicaba en el periódico Excelsior [Puerto de la Cruz, 7-mayo-1912, año I, número 16, página 1] y que formará parte años después de la Corporación Municipal de Puerto de la Cruz) y el diácono D. Basilio González.
Los alumnos contestaron brillantemente a las preguntas del maestro auxiliar de la escuela, D. Juan Salas, y otros componentes de la junta, dando a conocer el producto de una sólida instrucción.
(continuaremos)

domingo, 26 de septiembre de 2010

Y algunas más



Como lo prometido es deuda, y Segundo tampoco falla, aquí está otra tanda. A todos, sin excepción, mi más sincero agradecimiento. A los que están plasmados en estas instantáneas y a los que estaban detrás de la cámara.

La constancia gráfica




¡Ya está, por fin! Mira que uno es torpe. Tenía la solución en la columna izquierda y uno 'emperrado' en seguir haciendo desastres. Con una presentación tengo la ventaja de que te vas a estar un rato más observando cómo pasan las fotos y preguntándote: ¿saldré yo? A perdonar el desaguisado de hoy.

Mi amiga Elena Morales, responsable de prensa de Ediciones Idea, que nunca falla, me remitió las diez instantáneas que dan fe del acto celebrado en la Sala Francisco Álvarez Abrante, en La Perdoma, La Orotava, el pasado viernes, 24 de septiembre.

Estoy a la espera de las que me envíe Segundo. Que también serán insertadas. Faltaría más.

Una vez más, gracias

Ustedes lo hicieron posible una vez más. La sala Francisco Álvarez Abrante, con una muy notable asistencia de público, fue el escenario de la presentación de una nueva criatura literaria: Potajito de cuentos. Daba comienzo así el desarrollo de un amplísimo programa de actividades enmarcadas en las Fiestas de La Perdoma 2010. Una entusiasta comisión, bajo la dirección de Luis Melo, ha pretendido poner especial énfasis en la faceta cultural. Uno no solo se alegra de que así sea, sino que agradece infinitamente el que le hayan brindado la oportunidad de ser el punto de arranque. Gracias amigo por todas las facilidades recibidas y por ese ‘detalle’. Ten la completa seguridad de que los que fuimos parte activa del pistoletazo de salida lo guardaremos en lugar preferente.
Salvador García fue el encargado de la ceremonia de acogimiento civil, permítaseme el símil con la que se lleva a cabo en el ayuntamiento de Ingenio. Nos trasladó al ‘cuentisueño’, ese fiel de la balanza entre lo racional y lo irracional, entre lo deseado y lo experimentado, del que escribiera Mario Benedetti. Salvador incidió en una característica que previamente Elena Morales, responsable de prensa de Ediciones Idea, había destacado: la extracción de voces y términos, locuciones y canarismos, para introducirnos en la acción del cuento. Algo que, efectivamente, ha llamado la atención, pero que este ‘hombre del campo’ encuadra en lo cotidiano de su existencia.
Para reforzar su convencimiento, Salvador abunda: En efecto, Jesús Hernández García se alonga a este género después de novelear y estar de palique. Combatiendo la calufa o el pelete, según se tercie, con un pepito y una par de buches para no enyugarse después de un buen enyesque. Le gusta el boncho, aunque al cabo le entre la chaflija y quiera volver al chozo para saciar siquiera con una tacita de hierbahuerto y no amanecer jareado. Todavía usa un creyón para subrayar lo llamativo y frunce el ceño cuando se encuentra con alguien desempercutido. Se enroña, claro que sí, cuando algún locutor o político suelta un barbarismo en las ondas. Y como ya colecciona un fleje de entradas en su blog, sigue golifiando por esa red inacabable ahora que tiene tiempo y ve la vida privado.
En la sala se hallaban Pepe, el mecánico; Ángel, el maestro y Benito, el jardinero. ¿Y qué?, me dirás tú. Pues los tres son protagonistas de sendos cuentos. Pepe era el único que ya lo conocía de un tiempo atrás. Narración que bien pudo ser presentada, como lo fue Juan (el agricultor), a uno de los concursos de cuentos navideños que se convocan en el Valle. Porque algo de navideño tiene. Me apena que Pepe se haya quedado disgustado, pues cuando fue a adquirir tres libros (el suyo y el de sus hijos, según me señaló después), una vez concluido el acto (sus palabras fueron: no me iba a levantar a la mitad), se quedó con tres palmos de narices al comprobar que ya había hecho mutis por el foro el encargado de la venta de ejemplares. Y como le ocurrió a más personas, a uno solo le queda manifestar que hay cosas que no entiende. Después de firmar unos cincuenta ejemplares, amén de los “ya me lo firmarás otro día”, es triste que alguien se vaya para casa con la desilusión de no haber visto cumplido el objetivo por el que acudió a La Perdoma. Lo arreglaremos, Pepe, lo arreglaremos. De Ángel y Benito, de Benito y Ángel, algo se terciará en el futuro.
Se agradeció, obviamente, la generosidad del ayuntamiento villero, que contó con la presencia de su alcalde, primer teniente de alcalde y varios concejales (así como una amplísima representación del grupo socialista del ayuntamiento realejero), al poner a disposición la sala y el equipo de sonido para la posterior actuación de la escuela de la Agrupación Folclórica de Higa. A los responsables de esta última se le transmitió la voluntad para colaborar en todo aquello que consideren conveniente. Y a Marianella Aguirre, la ilustradora, la que da vida a los cuentos, la promesa de encontrarnos inmersos en nuevas aventuras.
Ahora corresponde ‘descansar’ para poner en orden los proyectos que puedan irse haciendo realidad a partir de 2011. Algunos de los cuales está simplemente a falta de pequeños detalles. Y recapacitar acerca de esas posibles publicaciones y la manera cómo deben ser enfocadas. Para perfilar, en la medida de nuestras humildes posibilidades, algunos deslices. Como el que Pepe, Antonio, Basilio… se hayan quedado sin el libro. Sí, ya lo sé, estará en la librería, pero ellos fueron a buscarlo en el acto de la presentación. Y querían tenerlo desde el viernes en la noche en casa.
Hoy le he “robado” la fotografía a ‘valletaoro.com’. Cuando me remitan otras, y así será, intentaremos ubicar alguna más.
A los que estuvieron presentes, muchas gracias nuevamente. ¿Y a los que no? Como decía alguien: el que fue, fue, y el que no fue, no fue. No le demos más vueltas.

sábado, 25 de septiembre de 2010

Exámenes (6)

La marcha de una comisión de la Junta local de instrucción lagunera a los pagos de Tejina, Valle de Guerra y La Punta, para asistir a los exámenes generales en las escuelas públicas, así como el haberse celebrado en la escuela de niñas de Guamasa, dirigida por Dª. Rosalía Rodríguez, son motivo de información, en la sección de “Noticias”, de Noticiero Canario (La Laguna, 13 y 15-julio-1904, año I, números 88 y 90, página 2).
“Un buen colegio” es el titular elegido por El Regional (La Orotava, 7-enero-1905, año I, número 2, página 2) para dar a conocer el resultado satisfactorio de los exámenes acaecidos en el centro de las hermanas Torréns. Gran adelanto mostrado por las alumnas, mucho más notorio que en el anterior, lo que demuestra que los esfuerzos de las profesoras no es agua que se arroja en tierra de cascajos. Los desvelos por la enseñanza y la predilección por la educación de la niñez y juventud, poco a poco se van coronando; lento pero con paso firme y seguro.
Es de suma importancia, señala el artículo, el estudio de asignaturas esenciales e indispensables para la cultura de la mujer, para ocupar puesto distinguido en la Sociedad, pero más práctico –pese á las feministas “enragé”– es inculcar ideas y conocimientos prácticos, deberes para el hogar, para cuando éste las llame a engalanarlo con su hermosa presencia. Esto es lo que hacen las hermanas Torréns con sus discípulas; hacerlas mujeres, seres útiles, no bibliotecas ambulantes de á perra la entrega ó loros parleros, que dicen de carretilla lo que se les enseña.
Exaltación al método inductivo como altamente beneficioso para la mujer, a la que se le debe enseñar con el ejemplo, con hechos que no admitan dudas, de resultados inmediatos.
Igualmente, de los exámenes en un colegio particular de niñas, “La Santísima Trinidad”, dirigido por Dª. Teresa de Vega, en Las Palmas, trata la pequeña crónica que El Progreso de Canarias (Las Palmas, 25-julio-1905, año I, número 28, páginas 7 y 8) titula “La enseñanza de la mujer”.
Chicas compenetradas con las materias sometidas a su inteligencia, clases debidamente atendidas, instrucción sólida, dominio de las asignaturas, competencia de las profesoras... Doña Teresa de Vega une á sus vastos conocimientos las facultades propias de una mujer nacida exclusivamente para educar, y acostumbrada á devolver mujeres útiles á la sociedad de las angelicales criaturas sometidas á su educación.
¡Qué diferencia con las escuelas públicas! No solamente por la supuesta diferencia de formas y contenidos. Que las había, seguro. También en el tratamiento informativo. Que se acrecentaban, que se sesgaban, seguro.
Nueva convocatoria de exámenes en las escuelas públicas de la Villa de la Orotava, que publica en la sección de “Información”, el orotavense El Defensor (La Orotava, 4-julio-1906, año I, número 90, página 2) y que agradece al alcalde, Sr. Ponte, la atención tenida al invitar al periódico a concurrir a dichos actos. El calendario fue el siguiente:
Niños de La Concepción: día 11, a las 11.
Niñas de San Juan: día 12, a las 11.
Niños de San Juan: día 13,  a las 11.
Niñas de La Concepción: día 14, a las 11.
Niños de La Perdoma: día 16, a las 11.
Adultos de La Concepción: día 13, a las 8 de la noche.
Adultos de San Juan: día 14, a las 8 de la noche.
Y presididos por la Junta local, verificación de exámenes generales en las escuelas públicas de Valle de Guerra y Tejina el día 12 de julio de 1906 (Noticiero Canario, La Laguna, 12-julio-1906, número 676, página 2).
Como altamente satisfactorios son –fueron– los celebrados en el colegio que en la calle Tabares de Cala, 35, dirige el ilustrado profesor D. José Rojas Rodríguez, y que Noticiero Canario (La Laguna, 23-diciembre-1906, número 694, páginas 1 y 2) reproduce del colega El Tiempo.
Parabienes al Sr. Rojas por el esmero e ilustración de sus discípulos, y que merece especiales plácemes por ser un maestro verdaderamente católico de los que practican, de los que enseñan con el ejemplo, rara avis en este malhadado tiempo de laicismo.
Un comentario de “F. Raimundo” nos da conocimiento de los exámenes celebrados en Puerto de la Cruz, acto al que fui atentamente invitado por mi amigo D. Pablo Marrero, ilustrado profesor de Instrucción primaria.
Con este encabezado, difícilmente es creíble la intención de “manifestar con entera franqueza las impresiones recogidas sobre el terreno”. En el tribunal examinador, Clara Marrero, Directora de la Normal de maestras de La Laguna y sobrina del referido maestro.
Todo cuanto pudiera decir de lo bien que se portaron los diminutos alumnos, resultaría pálido ante la realidad. La Religión, Geografía, Historia de España, Aritmética, Astronomía, lectura, escritura y análisis de la misma, constituyeron la base del programa. Se leyeron poesías dedicadas a la bandera española. Loable el fomento del ahorro mediante la existencia de una alcancía en la clase, cuya recaudación es repartida cada cierto tiempo entre las familias necesitadas de la población. También una colección de plantas y árboles bajo el inmediato cuidado de los alumnos...
Recuerdo del párroco, D. Benigno Mascareño, al antecesor (maestro), D. Benjamín J. Miranda; reparto de premios (libros) y entrega de medalla conmemorativa a los alumnos distinguidos.
Luego, como epílogo de la fiesta, todos los Sres. asistentes fueron expléndidamente [sic] obsequiados con pastas y licores por el amigo D. Pablo...
(continuaremos)

viernes, 24 de septiembre de 2010

Potajito de cuentos

Dice la canción de Néstor Álamo: esta noche me voy, me voy p´al Pino… Siento no poder invitarlos a una excursión tan larga. Pero les propongo un ejercicio más sencillo: irnos a La Perdoma, al antiguo cine, hoy Sala Francisco Álvarez Abrante, donde va a tener lugar un nacimiento, un parto literario. Se presenta “Potajito de cuentos”, cuya autoría corresponde a un servidor y que ha sido publicado por Ediciones Idea en su colección Iuvens TID.
Esta noche, a las 20,30 horas, Salvador García, cuyos comentarios seguimos diariamente en ‘García en blog’ –y que nacen como fruto del propósito de contar cosas y comunicar, de seguir ejerciendo el oficio, de estar en contacto con la gente– , que nos escribió el prólogo de la publicación, presentará en sociedad una nueva criatura que viene al mundo con el único ánimo de entretener, de hacernos olvidar de los muchos sinsabores con que nos encontramos en nuestro diario quehacer. Salvador es periodista, escritor y político. Técnico de radiotelevisión y miembro de número de la Federación de Asociaciones de la Prensa de España. Con una acentuada vocación por las letras, por la comunicación. Una vida a galope entre el periodismo y la política. Actualmente, es director del gabinete de la alcaldía del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. En su blog nos indica que pretende contarnos “sus vivencias, sus experiencias, sus impresiones, sus reflexiones, sus análisis. Su crónica... La crónica de un obrero de la comunicación”.
Salvador escribe en el citado prólogo:
Potajito de cuentos tiene todos los ingredientes del bucolismo más cercano. Estas narraciones breves de sucesos imaginarios, en las que aparece un reducido número de personajes que participan en una sola acción, logran –ya lo comprobarán– la respuesta emocional del lector. El autor demuestra que, en el cuento, lo psicológico es fundamental. Pero, además, emplea términos y expresiones que, por desuso y por la propia crisis de lo rural, se han ido perdiendo u olvidando. Aquí van a leer, entre otros vocablos y locuciones, sachar, jociquiar, guataca, ajumando, enchumbar, más que sea, escafidiendo, p'a la puerta, esgorrifan, rebencazo, firringallo, malimpriadas, esmagado, trafullo, patiñero… Se agradece la repesca de voces y canarismos que dormían la noche de los tiempos o que no se conocían, de modo que, al favorecer la siempre saludable utilización del diccionario, enriquecen el vocabulario e ilustran tareas o situaciones que se van concatenando con donaire argumental.
La ilustración que acompaña el texto de la presente entrada es una de las tantas con las que Marianella Aguirre salpica los ocho cuentos que componen el “Potajito”. Ella, que realizó la portada de “Pepillo y Juanillo” y que tanto han visto ustedes en este blog como en el perfil de facebook, se sumó de nuevo a la aventura. Y a fe que ha sabido captar en sus ilustraciones los momentos mágicos que cada cuento encierra. Ya lo comprobarán. Seguro que quedarán gratamente sorprendidos.
Cuatro empresas estimaron conveniente patrocinar la edición. Y a las mismas –lo reiteraré esta noche– expreso mi más sincero reconocimiento, al tiempo que admiro su compromiso por la cultura, algo que no siempre los organismos públicos entienden. Mayauto (Los Realejos), Fedes Ascensores (La Guancha), Grupo Promotor Isla del Valle (La Victoria) y Almacenes Siverio (Los Realejos) hicieron posible que “Potajito de cuentos” no naciera desvalido, desamparado; llegó al mundo con al menos un pan bajo el brazo. A sus responsables, mi más profundo agradecimiento.
Parece oportuno no desvelar nada más. Esta noche, si no tienes nada mejor que hacer, te espero en La Perdoma, núcleo poblacional de La Villa que arranca asimismo con sus fiestas patronales. Y esta presentación se engloba en el amplio elenco de actividades que conforma su espectacular programa. El amigo Luis Melo, junto a un magnífico equipo de colaboradores, se puede dar por satisfecho. Estas fiestas de 2010 marcarán impronta. Seguro.
Procuraremos que el acto, incluyendo la actuación de la Escuela de la Agrupación Folclórica de Higa, sea breve. De tal suerte podrán luego ir a echarse un vaso de buen vino en cualquiera de los muchos establecimientos de la zona. Es un excelente remedio, recomendado incluso por los galenos: un plato de potaje, con o sin gofio, o uno y uno, acompañado de ¿una cuartita? de tinto… Chacho, parece que lo estoy viendo, sale uno con los caños ardiendo. Hasta después.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Romeros

Una romería es un viaje o peregrinación, especialmente la que se hace por devoción a un santuario. Manifestado lo cual, ignoro la causa que impulsa a Paulino para estar como caja del turrón. No creo que sea el misticismo lo que le conduce a iterar comportamientos romeros. Que, inevitablemente, causan sana envidia en sus socios de gobierno y José Manuel también se suma a la estulticia, pero en plan ganador –incluso alega que camina más–, por lo que ordena a Rita que se enfunde el traje de campesina conejera. En suma, todos para Mancha Blanca. Ni dolores ni artritis en las ofrendas. Generosas, espléndidas, abundantes… Mira, mira, la mía es más grande (la cesta). Con productos típicos de una gran superficie.
Época de grave crisis. Lo dicen ellos, no yo. Avión o helicóptero. Secretarias, jefes de gabinete de no sé qué, reportero gráfico, cámara, entrevistador, el que lleva la maleta, el que carga la mochila. Bajamos y coche oficial, conductor, guardaespaldas, motoristas, policías, un local para vestirse de mago…
He ordenado austeridad al máximo. Al helicóptero que se espere un fisco que me tengo que acercar a saludar a la Virgen de la Peña. Una promesa es una promesa y hay que cumplirla, eso es sagrado. Puede que nos lo tomemos a broma para no amargarnos demasiado, pero me gustaría tener un presidente que ‘gobernara’. Porque mientras está de paseo y dando besos a diestro y siniestro, no está ejerciendo la función para, y por, la que le pagamos. Máxime cuando siempre, ante la pregunta del periodista que casualmente pasaba por allí, responde con la misma cantinela de “exigiremos a Madrid”. Da la impresión de que no sabemos hacer otra cosa. Y ya de Madrid dependíamos antes del glorioso estado de las autonomías, por lo que uno acaba por cuestionarse la validez de las mismas. Al final concluyes que salvo el despilfarro incontrolado merced a la duplicidad de policías, televisiones, funcionarios y resto de la tropa, bien poco avanzamos.
El pertinente inciso es para preguntar a los periodistas que tuvieron el honor de entrevistar a Rita Martín en el programa ‘59 segundos’ si sacaron algo en claro de sus intervenciones. Porque mis escasas entendederas estimaron que ninguna de las respuestas guardaba relación con lo que se le demandaba. Eso, pregunte usted lo que quiera que yo le responderé lo que me dé la gana. Lo único que dejó bien claro es que había trabajado mucho años en ese mundo del turismo, algo de lo que no pueden presumir el propio Paulino o Milagros en los suyos respectivos. Y en base a este último planteamiento propuso el nombramiento cuestionado por todos los profesionales del sector. Pero ese tema ya está cerrado.
Observarás que la fotografía que ilustra este comentario de hoy (Romería de Mancha Blanca del 2009, estaba yo allí presente) es fiel reflejo del cachondeo en que hemos convertido estas fiestas. Que también tuvo su reflejo hace unos días en San José de la Rambla, donde el propio alcalde, al tiempo de lucir una singular ‘pipa’ (acepción coloquial: barriga abultada), se colocó unas hermosas gafas de sol (estilo de las que han usado siempre los magos para sulfatar) y se permitió que cada cual se enfundara las prendas de la vestimenta típica que estimara  oportuno y donde creyera conveniente. En unas imágenes contemplé a una maga con un simple corpiño (imagínate lo que iba enseñando la moza, bien oronda, por cierto), amén de pantalones vaqueros, sombreros de paja en trajes de La Orotava, hombres con prendas femeninas y viceversa. En fin.
Pero Paulino, hay que reconocerlo, va flamante. Y como Los Dolores se ha convertido en un auténtico desmadre, del que los propios conejeros están avergonzados, en vez de tanto lucimiento, sería cuestión de que se pusiera orden y concierto. Si te quieres vestir de mago, hazlo, pero no te disfraces. Y si no, haz como yo, ve con bermudas, camiseta y cholas, pero mantente al margen, en la orilla y chilla para que te tiren una papa o un huevo.
¡Ah!, leo que “Rivero defiende que en su mandato se ha dado un salto…”. ¿Uno, Paulino? Si estás brincando todos los días.
Mañana, si a bien lo tienes, puedes leer un anticipo del “Potajito de cuentos” que presentamos en La Perdoma.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

No me cuadra

Nos toman por estúpidos. Nos creen estúpidos. Nos consideran estúpidos. Es más, somos estúpidos. El nuevo partido de los trabajadores en España, el PP, adalid en la defensa de los recortes y congelaciones, modelo de gestión en las Comunidades de Madrid y Valencia, modelo de coherencia en Santa Cruz de Tenerife, propone lo que jamás han cumplido, como dice mi amigo, al menos de aquí para atrás.
Lo de los ochocientos mil puestos de trabajo de aquel PSOE de años idos (tanto el tiempo como el propio partido socialista) es grano de arena ante las propuestas de Mariano, el jefe supremo de la tropa. Puede que no tenga los abdominales de Aznar, que son sana envidia para el economista insular, José Manuel, pero echándole barba al asunto ha espetado que se pueden volver a crear cinco millones de puestos de trabajo. Ya tuvo un adelantado (iluminado) en estas peñas, el ínclito Jorge Rodríguez, quien soltó aquello de que en 2012, mes arriba, mes abajo, todos currando.
Cinco millones en números redondos, con los seis ceros bien puestos a la derecha del cinco. No entiendo el porqué no ha presentado ya la moción de censura. Porque con el voto de los actuales parados y los que las encuestas vaticinan, los doscientos dos escaños de Felipe González en octubre de 1982 pasará a ser una mera anécdota en la Wikipedia. Rondando los trescientos. Y Soria ocupará la cartera de Economía, con lo que podrá apuntarse al mismo gimnasio al que acude Jose Mari. Y nosotros, los jubiletas, ya no tendremos que estresarnos cuando se abra la campaña viajera del Imserso, porque la cuantía de las pensiones será tan oronda que nos iremos directamente de crucero por el Báltico. Y sin la imperiosa necesidad de tener que afiliarnos a Ce Ce O O (Urdaci dixit).
A los dos días de la anterior proclama, Rajoy se fue a Baleares. Y en época de vendimia propuso una singular poda, una gran poda, una espectacular poda. ¿Dónde? En la Administración Pública. Sobran, deduzco funcionarios. Muchos. Muchísimos. Tantos como, estima un servidor, cinco millones. Con lo cual, hagan las cuentas, tendremos diez millones de parados. Por lo que la bolsa creada –¿arte de magia?– por el líder del Partido Popular solo valdrá para la mitad, pues siempre seguirán existiendo cinco millones de parados. A no ser que los funcionarios sobrantes pasen directamente a la cartera de jubilados, con lo que la caja común se irá al garete en apenas seis meses, y luego desaparecerán las clases pasivas con lo que se incrementaría hasta extremos insospechados los sin trabajo (y sin sueldo)… ¿Tú entiendes algo? Pues yo tampoco.
Para reducir el paro hay que crear puestos de trabajo. Y estos no aparecen si a las empresas no se les despeja el horizonte. Que lo seguirán teniendo negro si la economía no comienza a moverse un fisco. Y esta no se menea si la banca continúa especulando… Y el círculo sigue siendo círculo. Y damos vueltas como trompos. Y mareamos la perdiz…
Hay quienes pretenden seguir suprimiendo cargos políticos, enchufados, liberados, asesores, cargos de confianza… ¿Y dónde los metemos? Que se vayan al paro, que ya han chupado bastante, espetamos con alegría. Lo dicho: el círculo.
Yo no tengo la solución, pero no propongo boberías. Y como no me gusta siquiera la sonrisa de Marianín –el que se lo puso que se lo quite– (es feo riéndose, carajo), desconfío de los profetas. Además, detrás de cualquier poda vienen los retoños. Que requieren alimento. Con lo que el tijeretazo puede producir el efecto contrario al deseado.
En esta aldea global hay algo más allá de la Internet. El papel higiénico chino causa escozores en los traseros americanos. Y hasta que a Alemania no se le pase del todo el constipado, en el resto de Europa (sobre todo por el Sur) seguiremos tosiendo bastante convulsionados. No alcanzaré yo, no obstante, la osadía de un eminente articulista que cuantificó el giro de cierto periódico (de falangista a independentista) como de 360º. Y puede que sea ese el que estén intentando vendernos los políticos con esto de la crisis y el número de personas sin trabajo. Porque del resto de humanos es sabido que con un giro de tal calibre te quedas, ni más ni menos, en el mismo sitio, salvo que el ángulo recto ‘hierva’ ahora a los cien grados del agua, con lo que el círculo lograría una ‘ebullición’ a los cuatrocientos. La conclusión: nuestros políticos son todos unos “fórmula uno”, kilómetro más, kilómetro menos. Y yo con estos pelos.

martes, 21 de septiembre de 2010

Escupitinas

Iba a titular “Escupitajos” esta entrada, pero como el diccionario (uno de ellos, voy a seguir los doctos consejos del amigo Humberto Hernández) me indica que también existe “escupitina”, me decanto por este último vocablo porque me parece –simple manía– menos guarro. Serán o no casualidades de la vida, pero ayer estábamos por el final del aparato digestivo y hoy hemos dado tremendo salto hasta sus inicios. En ambos casos se trataba de dar a conocer ciertas expulsiones. Y no es que me haya dado ahora por el estudio profundo de la escatología, sino por el asco que me produce contemplar un partido de fútbol.
Uno tuvo la oportunidad, afortunadamente, de practicar algo de deporte en sus años mozos. En la época estudiantil fue el atletismo el que más me llamó la atención. Y nos llevaban a competir en La Manzanilla lagunera. No era uno malo, no, fundamentalmente en salto de longitud y triple salto. También el denominado en aquel entonces balonvolea (hoy, voleibol) era un deporte colectivo en el que hacía uno sus pinitos. Luego, cuando ya comenzó el curro y las obligaciones familiares, mataba el tiempo con el fútbol aficionado o en el fútbol sala.
Pasaron los abriles, y los diciembres, se fueron cumpliendo años y he alcanzado un periodo existencial en el que no aguanto un partido ni por la tele. Es probable que resista mejor uno de tenis o baloncesto. Y, por supuesto, una etapa de cualquier ‘grande’ del ciclismo. Porque te culturizas de solo observar bellas imágenes, hermosos paisajes. Y valoras el ímprobo esfuerzo de un deportista que ha de valerse, única y exclusivamente, de su propia condición física.
Existirán, no lo niego, las excepciones de rigor, pero no es normal ver a ciclistas, tenistas, atletas, nadadores… escupiendo a diestro y siniestro. No pasa por tu cabeza el que en un partido de baloncesto los jugadores se dediquen a la noble cochinada de escupir cada dos por tres, porque las mopas no descansarían. Pero el fútbol es bien diferente. Los veintidós jugadores disparan que es un disgusto. Si tuviéramos una cámara que encuadrara todo el rectángulo de juego (o, en su defecto, una que ‘espiara’ los movimientos de cada jugador individualmente), debería ser apoteósico el reparar en un diluvio continuado.
Estás delante del televisor y es raro que no se enfoque a cualquier ¿deportista? lanzando saliva en todas las direcciones (incluyo, faltaría más, la cara del contrario). Si pudiéramos medir la cantidad de litros de ese material semisólido, viscoso y hediondo nos llevaríamos tremenda sorpresa. Y todo queda regado por el césped. En el que, de vez en cuando, alguno deposita sus huesos. Al caer, lo habrás visto en más de una ocasión, resbalan, patinan, se deslizan. ¿Normal, no?
Hubo un defensa madridista –omito el nombre para no ahondar en cochinadas mayores– que, a ojo de buen cubero, podía fácilmente depositar en su ‘campo de acción’ unos tres cuartos de litro bien medidos. En el partido del Madrid contra el Ajax holandés, una buena porción del césped estaba amarillo como un gufo. Los comentaristas (ahora siempre hay tres o cuatro) nos ilustraban con lo de que se trataba de un hongo. Y una caca, por ser fino y no decir una mierda. Son esputos tras esputos. Y no le demos más vuelta de hoja. A estos profesionales habría que sancionarlos por atentar reiteradamente contra la salud pública. Luego van los pajarillos a picotear en busca de cualquier insecto y vete a saber tú qué demonios se están llevando a sus delicados estómagos.
Puercos, que son unos puercos. Y tan acostumbrados están al escupitajo de turno, que luego se suben a una guagua y hacen lo mismo. Que se lo pregunten a Piqué cuando La Roja paseaba por la capital de reino. Así le parten la cara cada tres por dos. A esta paso no nos bastan los recogepelotas. Vamos a tener que habilitar los recoge… ¡Fos, cochinos, que no tienen otra cosa en la que entretenerse!

lunes, 20 de septiembre de 2010

Por la retaguardia

Nos comemos una lechuga y pensamos si fue tratada convenientemente mientras estuvo sembrada en el campo. Lavamos dieciocho veces la fruta por si le quedan restos de algún líquido raro. Nos zampamos un pollo y se nos mete el miedo en el cuerpo, pues lo mismo nos volvemos mariquitas (pregúntenle a Evo Morales). Cada dos por tres, y desde fuentes interesadas, surgen informaciones de los peligros de tal o cual producto. Y a ti se te pone una cara de bobo de no te menees. Porque si no comes, te mueres (de hambre) y si comes, también corres el peligro de estirar la pata por ingerir cualquier bicho que burló los supuestos controles sanitarios.
Hace cuatro o cinco décadas ibas por las noches en busca de cualquier higuera extraviada. Y una vez en el lugar tenías dos opciones: recoger los higos en cualquier recipiente improvisado (que luego eran degustados en la tranquilidad de un sitio menos comprometido) o depositarlos directamente en la vasija estomacal. En ambas situaciones existía un peligro evidente: la existencia de los denominados ‘bichos’ en el interior de la fruta en cuestión. Y te los zampabas, tú. Por una simple razón: los bichos estaban allí porque la fruta no había sido ‘lavada’. Y cuando se lavaba sí que había peligro. Porque los líquidos (insecticidas) de aquel entonces sí que tenían su enjundia. Sin dudar, el mentado como fosferno (ignoro si se escribe así) era el no va más. Cuántos no escaparon por un simple buche, consentido o no. Pero sabías de qué te morías.
Han cambiado los tiempos. Mucho. Ahora no te mueres, te matan. Mejor, te van matando poco a poco y ni te enteras. Y lo mismo te atacan por el inicio del aparato digestivo que por el final. Sí, por el tubo del escape. Con algo tan simple como un trozo de papel. Es decir, que tú vas al baño y haces aquello. Luego, porque uno debe adaptarse a los tiempos que corren, de manera casi instintiva agarras el fragmento del rollo que consideres idóneo para las dimensiones del acto precedente (léase, cantidad, características físicas, explosión…) y limpias cuidadosamente tus partes traseras. Si estás en casa, vas al bidé y concluyes con un buen baldeo. Si el retortijón te trincó lejos del hogar dulce hogar y no llevabas toallitas refrescantes, a fastidiarte y aguantar el resquemor hasta que regreses a casa. Pero si estabas, mero ejemplo, con irritaciones y tuviste la desgracia de haber adquirido un papel inadecuado, lo mismo te comienza una flojedad culera que te ‘emborca’ sin darte cuenta.
Pues sí, la Administración General de Supervisión de Calidad, Inspección y Cuarentena tomó muestras de 600 fabricantes de papel higiénico en todas las provincias chinas y halló que un 10 por ciento de los productos no cumplían con los estándares de calidad. En concreto, en 18 casos se detectaron bacterias nocivas. Se estima que el 90% de los productos de papel reciclado contienen gérmenes. ¿Cómo se te queda el cu…erpo? Y existen tres tipos de bacterias letales que pueden hallarse en el papel de limpiarte aquello: E. Coli, que causa diarreas sanguinolentas; estafilococos, que pueden ser letales; y una cadena de microorganismos llamados estreptococos hemolíticos, que destruye las células blancas. Aunque posteriores análisis han detectado, además, cantidades suficientes de otras bacterias que descalifican el papel para consumo humano. Bueno, lo de consumo sitúalo en el contexto preciso; no seas animal y te limpies la boca con eso después de comer.
Para consolarnos de asco leemos asimismo que “los productos de China, uno de los principales exportadores del planeta, han causado en los últimos años numerosas intoxicaciones masivas dentro y fuera de sus fronteras debido a la falta de aplicación de medidas de seguridad alimentaria e higiénicas”.
Los ingenuos, como yo, creíamos que nos bastaba con tapar los orificios superiores (boca, nariz, oídos). Pero estábamos completamente equivocados, sumidos en un profundo error. Tengo la impresión de que a partir de ahora debemos ir a todas partes haciendo fuerzas (como cuando te da un repentino deseo de salir corriendo para el cuarto de baño) y llevando el agujero que nos permite defecar en posición bastante estreñida, so pena de adquirir cualquier enfermedad infecto-contagiosa.
Hasta mañana. Y cuídense. A pesar de estas informaciones, hay asuntos a los que es preciso seguir atendiendo a la usanza tradicional. Qué quieres que te diga, lo del dedo me parece un remedio más… más… más… Ño, no me sale; ¿estaré astringido?

domingo, 19 de septiembre de 2010

Exámenes (5)

Emotiva crónica de exámenes reglamentarios del mes de julio (día 15) en el palmero La Defensa (Santa Cruz de la Palma, 27-julio-1901, año II, número 212, página 3). Más amplia en la reseña de la escuela de niños que en la de féminas. Con unas alabanzas tales a la labor del maestro, que rayan en la admiración. Lo que puede dar lugar a diversas interpretaciones en unos tiempos en los que la escasez de material, la falta de pago de los haberes y la reducida asistencia eran moneda de cambio corriente.
Cuando el maestro arrastra vida azarosa debido a la parcimonia [sic] con que se satisfacen sus haberes y cierran las puertas de sus escuelas á fin de procurarse los recursos necesarios para subsistir, alegra el saber que en un rinconcito de las Afortunadas, un maestro, tan mártir como los otros, asiste puntualmente á su escuela, rivaliza en celo por la enseñanza, presenta alumnos aventajados y cierra el curso con unos exámenes brillantísimos.
De una matrícula de 112 alumnos se presentaron 60, cifra elevada, dice el periódico, si se atiende a que en esta época del año las gentes se dedican con mayor interés a las faenas del campo.  Este 50%, aproximadamente, contrasta con la generalización siguiente: Era de ver como aquellos niños resolvían problemas complicados, analizaban oraciones, contestaban á las preguntas que en lo demás les hacían, y todo con la sencillez del que sabe lo que sabe.
Material de la escuela: nuevo, abundante y excelente, como era de esperar, teniendo en cuenta su importancia y el buen nombre de su Profesor. Muchos más parabienes, por supuesto, al Sr. Suárez, que a su distinguida Sra., que regentaba la escuela de niñas.
Sin descender al detalle, Heraldo de la Laguna (La Laguna, 21-julio-1903, año I, número 9, página 3) publica en “Los últimos exámenes” una somera crónica de lo acontecido en aquella localidad, casco y barrios periféricos. Elaborando una escala que se inicia con la escuela de niñas de la Villa de Abajo y concluye en la de niñas de Geneto, sin haberse celebrado en Guamasa. Diferentes grados de instrucción que conduce al periódico a realizarse algunas preguntas: ¿Es que el niño no aprende o el maestro no enseña? ¿Será, acaso, que cuando el maestro asiste a la escuela, el niño falta, o viceversa? En las conclusiones, culpas a todos. Por aquello de que hay padres y padres, maestros y maestros. Y ánimos al Gobernador y Juntas provincial y local para continuar por el camino emprendido sin desmayar en los buenos propósitos.
La lectura del artículo, mejor, crónica (Lanzarote, Arrecife, 28-julio-1903, año II, número 63, página 1), “Exámenes de primera enseñanza” nos hace recordar lo de “en los pueblos nos conocemos todos”. Porque, y sin querer menoscabar la labor profesional, tanto docente como periodística, de unas islas respecto a otras, fundamentalmente, las denominadas menores en relación con las centrales, mayores, hegemónicas o como se las quiera denominar, las alabanzas y felicidades eran mucho más acentuadas. Pero los éxitos del acto examinador, como es el caso que ahora comentamos, no se acompañan con el número de alumnos matriculados, los que componen el censo escolar y, lo que es más grave, los que asistieron a las pruebas.
Y es que la realización de tales censos, al igual que la vigilancia de tanta norma escrita, no ofrecía mayores garantías. Arautápala (Puerto de la Cruz, 20-julio-1909, año I, número 35, página 2) copia el siguiente suelto de Diario de Tenerife: Muy en breve se repartirán á domicilio unas hojas impresas para la formación del nuevo censo escolar, en las cuales se inscribirán los niños de ambos sexos que se hallen recibiendo instrucción en todas las escuelas públicas y privadas, con expresión de sus nombres, edad y colegio donde asisten, cuidando sus padres ó tutores de dar cuenta exacta de las circunstancias que en las mismas se indican, como también manifestar los niños ó niñas que dejan de asistir á la escuela por excesiva pobreza ó por otra causa que redunde en perjuicio de la infancia.
Las colaboraciones periodísticas de los maestros, la sospechosa redacción de determinados periódicos no profesionales por parte de gentes del Magisterio, nos hacen desconfiar sobremanera:
La escuela ostentaba los adornos de los días de gran gala; los niños, el trage [sic] de los días de fiesta, cruzando algunos sus pechos con bandas de distintos colores, lucían medallas ganadas en honrosa lid en anteriores certámenes. En sus semblantes reflejaban esa infantil alegría, regocijada y juguetona, tan propia de su edad, sin rebasar los límites de la corrección y la prudencia.
El cronista se declara gratamente sorprendido, máxime cuando este acto es sólo un número más de los que por esta época suelen tener lugar en las escuelas del reino, sin más finalidad que la de cumplir un precepto legal. Pero no en el presente caso, que desvaneció el error. El prejuicio, aclararíamos. Analicemos estos fragmentos:
Todas las materias científico-literarias, que se estudian en estos centros docentes, fueron explicadas con notoria competencia por aquellos niños, que hablaban cual si fueran hombres, poniendo de relieve sus conocimientos de aritmética y geometría; de gramática y preceptiva literaria; de geografía e historia de España; de agricultura o de ciencias físicas y naturales.
La importancia y necesidad de los conocimientos aritméticos, desde la cuenta sencilla, por los dedos, hasta el problema más complicado y abstruso; la no menor de los históricos y geográficos; el papel tan principal que desempeña la higiene  en los ejercicios corporales, que vivifican el espíritu y dan salud y vigor al cuerpo; el deber de trabajar, que todos tenemos como condición ineludible de la vida; la misión benéfica y educadora del estado, la provincia y el municipio...
Más elogios, charla del ilustrado cura párroco, palabras del alcalde y anuncio de las vacaciones. Reparto de premios...
Felicitamos, sin reserva de ninguna clase, al distinguido profesor, laborioso é infatigable pedagogo señor Batllori, por el brillante éxito obtenido (...), que con decidida vocación, trabajo constante é ilimitado afán, inspirándose en los principios que informan la moderna ciencia pedagógica, se logra conseguir frutos provechosos; se ha demostrado que la labor educadora de formar el corazón de los niños, se ha cimentado en las más puras máximas de moral, preparando á los futuros hombres de mañana para que, siendo útiles á sí mismo, puedan ser dignos ciudadanos y amantes hijos de su patria.
(continuaremos)

sábado, 18 de septiembre de 2010

Pensaba


Escribir de la uniformidad funcionarial, pero el adelanto de plumas de mucho más prestigio me han hecho desistir. No obstante, ¿se acuerdan de “El niño con el pijama de rayas”? Creo que la obra de John Boyne, tras ser leída por nuestro no muy estimado Diputado del Común, y no por ello un común diputado, sirvió de base para que en el informe dado a conocer hace unos días en Teobaldo Power se hiciera constar la imperiosa necesidad de uniformar a los funcionarios. Y siquiera sea por el conveniente contrapunto, creo que nos hemos excedido en nuestras críticas. De una parte. Y de otra, los funcionarios no caímos en las ventajas que conlleva el ir vestidos todos iguales. Veamos: importantísimo ahorro en el capítulo del vestido, porque las prendas correrían a cargo de la empresa. ¿Tú no vas, por ejemplo, a los hospitales? Con dos o tres mudas tendríamos para uno o dos cursos. Salvo que nos crezca la tripa. Otra faceta que se nos pasó por alto es la altísima posibilidad de escaqueo, a saber lo contrario que pretendía el señor Alcaide. ¿Te acuerdas de la mili? En aquel enjambre caqui, ¿quién demonios te va a descubrir? Puedes ir a tomarte dieciocho cortados en el día con la única condición de que jamás vayas solo. Además, el uniforme da prestancia, solvencia, rigor. En los centros docentes, amén de la similitud del alumnado, habría un modelo para el equipo directivo (propongo el color blanco porque no creo lo ensucien ni suden demasiado), otro para los docentes de a pie (ya debe ser otro color en el que, a ser posible, destaquen las manchas de tizas, para los clásicos; o las marcas de rotuladores Veleda y los rotos por los marcadores de pizarra digital, para los innovadores), haciendo hincapié (es muy importante) en un distintivo bien visible para coordinadores, jefes de departamento, orientador… Por último, habría el uniforme del personal no docente, de tela más corriente, con amplios bolsillos y el añadido de una buena caja de herramientas. No sé, yo que ustedes me lo pensaría. Ya lo estoy imaginando. Ahora mismo me acordé de las cafeterías del HUC.
Escribir de las declaraciones de Milagros, quien vino a manifestar que el servicio público educativo no estaba garantizado si Soria metía la tijera con demasiadas ganas. Y no lo hago porque al día siguiente ya lo aclaró y se quedó tan ancha cuando afirmó todo lo contrario. Seguramente pensó que en un país de locos por qué debía ser ella la cuerda. Los componentes de este pacto gubernamental son los que alegan contradicciones en el discurso de Zapatero. Pues no creo que vayamos mejor aquí con nuestro particular dúo sacapuntas (uno, sastre; y el otro, desastre). No te entienden, Milagros. Aparte de que tienes mi total e incondicional apoyo en tu flamante plan de sustituciones (te olvidaste, por cierto, de incluir a los jubilados), suprime el transporte escolar para acabar con la obesidad infantil, no permitas cuatro cargos directivos en un equipo (con dos, va que chuta), suprime liberados sindicales, elimina los consejos escolares, cárgate los CEPs… Y en el amplísimo etcétera restante, al no haber dinero, aniquila varias direcciones generales y haz un “regalo” a varios centros en formato profesor.
Escribir de las Ampas que van por libre en sus reivindicaciones ante un inicio de curso bastante movido. Los medios de comunicación han insistido en determinados casos, madres y padres han puesto el grito en el cielo y las federaciones (hay unas cuantas en diferentes niveles) parecen no existir. La del colegio Toscal-Longuera, que fue paradigma durantes muchísimos años, ha sido enterrada en este final de verano. Unos alegan que la culpable fue la crisis, otros estiman que ha sido la comodidad. Cuando mi nieta entre en “tres años”, pienso fundar (¿o refundar?) la triple A: Asociación de Abuelos de Alumnos, y me autoproclamaré presidente. Luego crearemos una Federación, y me autoproclamaré presidente. Luego vendrá la Confederación Canaria, y… ¿Lo vas cogiendo?
Escribir del “Logos Hope”, pero cuando observé a Melchior con una planta independentista muy marinera, con bandera que ondea al viento sin que se le salte una estrella, pensé que había material suficiente, pero como es sábado no comentaré nada de nada; cerraré los ojos, me agandularé por un día y sentiré enormemente que hoy se hayan quedado sin echar una visual a “Pepillo y Juanillo”. Es la primera vez que me pasa. Mañana domingo colgaré otra interesante entrada de mi capítulo de “Exámenes”, con una excelentes crónicas periodísticas, y espero y deseo que para el lunes se haya normalizado la situación. En la próxima semana estaremos a “potajito”.

viernes, 17 de septiembre de 2010

Exámenes (4)


Del año 1894, unos apuntes del resultado de los exámenes celebrados en el mes de julio, consignados en el acta de la sesión de la Junta local de 1ª. enseñanza de La Orotava celebrada el 6 de agosto (A.M.O., Libro de actas de la Junta local de primera enseñanza, Instrucción pública, 1894):
Escuela de niños del barrio de la Concepción
Cierto mejoramiento respecto a los anteriores exámenes, hallándose en muy buen estado la Sección 6ª. Concurrieron 33 de los 48 matriculados (diez menos que los inscritos en el año anterior). Merecieron 6 notas de sobresalientes, 5 de notables y 23 de buenos.
Escuela nocturna de la Concepción
Sigue dejando que desear. Escasa asistencia a la escuela. Sólo se presentaron 15 de los 53 matriculados (cuatro más de los inscritos en el año anterior), obteniendo 8 notas de buenos.
Escuela de niñas del barrio de la Concepción
Buen estado general en la enseñanza y disciplina. Se presentan 38 de las 46 matriculadas (ocho y trece menos, respectivamente, que el año anterior), alcanzando 10 sobresalientes, 15 notables y 44 buenos.
Escuela de niños del barrio de San Juan
La enseñanza se halla en regular estado, con una ligera mejoría comparativamente al año anterior, algún tanto en aprovechamiento y bastante en matriculados y asistentes al examen. Concurrieron 60 de los 79 matriculados (diecisiete y veintitrés más, respectivamente, que el año último), obteniendo 6 sobresalientes, 7 notables y 20 buenos.
Escuela de niñas del barrio de San Juan
Descenso en el número de alumnas y en el estado de la enseñanza. La Junta achaca este retroceso, especialmente en la sección superior, a la clausura de la misma, tras las vacaciones, durante cinco meses por causas disculpables. Asistieron 27 de las 45 matriculadas (once y ocho menos que el año anterior, respectivamente), dándoseles 12 sobresalientes, 14 notables y 28 buenos.
Escuela nocturna de San Juan
Esta escuela dejó que desear á la Junta por no notarse adelanto en la enseñanza. Concurrieron al examen 72 de los 120 matriculados (dos más de los inscritos en el año anterior; igual número de asistentes), alcanzando 5 buenos.
Escuela incompleta del Pago de la Perdoma
Se encuentra en tan mal estado esta escuela que en concepto de la Junta debiera continuarse el expediente incoado para remediarlo. Se presentaron sólo 7 niños, porque la mayor parte de los matriculados ya no son alumnos de la escuela. Concurrieron vecinos, entre ellos, D. José María y D. Bruno Díaz Luis, D. Juan Díaz Fernández y D. Pedro Fernández de Fuentes, denunciando las faltas de asistencia del maestro y haciendo presente ser preferible la supresión de esta escuela á que continúe así.
La Junta local orotavense fija los exámenes generales del curso 1896-1897 de la siguiente manera (Semanario de Orotava, 10-julio-1897, año I, número 3, página 6): día 14 de julio, escuela de niños del barrio de la Concepción; día 15, para la de niñas del mismo barrio; día 16, para la de niños del barrio de San Juan; día 17, para la de niñas del mismo lugar; y los días 16 y 17, por las noches, para las dos escuelas de adultos.
El número siguiente del semanario (Semanario de Orotava, 17-julio-1897, año I, número 4, página 6), en su clásica sección de “Ecos generales”, se nos informa que han dado, en general, resultados satisfactorios. Pero señala también: ¿Cuándo se abre al público la de la Perdoma con cuya prolongada clausura se irrogan tantos perjuicios á la niñez de aquel importante Pago? Después de la reseña anterior, el periódico agradece al señor alcalde, D. Eugenio Machado y Benítez, la atenta invitación para asistir a los exámenes de las escuelas públicas.
De solemne importancia es catalogado el hecho de los exámenes en artículo publicado en Iriarte (Puerto de la Cruz, 25-julio-1897, año I, número 51, página 2), que insiste en la llamada a la participación de toda persona con algún tipo de desvelo cultural. Y lo hace aprovechando los celebrados recientemente en la escuela de niños de D. Benjamín J. Miranda, de quien se destaca su inteligencia, su celo y excelentes dotes en el noble y difícil arte de la enseñanza.
Nuevo artículo, que bajo el título de “Exámenes”, inserta el mismo semanario portuense (Iriarte, Puerto de la Cruz, 8-agosto-1897, año II, número 53, página 2) para mostrar su alegría y complacencia por los que tuvieron lugar en la escuela de niñas de Puerto de la Cruz. Haciendo especial énfasis en las labores y excelente educación moral. Pone de relieve el esmero de la respetable y distinguida maestra, Srta. Herminia Martín y Armas, quien de seguir la huella que se ha trazado, abrigamos la esperanza de que puede contar, desde luego, con la eterna gratitud de sus discípulas, lo mismo que con la de aquellas personas que, como nosotros, aman y estiman la instrucción cual se merece. Entre las alumnas dignas de especial mención, Etelvina Padrón, autora de un hermoso cojín bordado al realce, a la que el ayuntamiento subvenciona la carrera de Magisterio, recompensando su amor al estudio, y que ejercerá, años más tarde, entre otras, en la escuela de Las Dehesas, del propio municipio.
Los exámenes generales de 1898 eran reseñados por Hespérides (La Orotava, 8-julio-1898, año I, número 16, página 4), en su sección “Ecos y comentarios”, con el siguiente calendario:
Día 12, en la de niños de la Concepción; día 13, en la de niñas del mismo barrio; día 14, en la de niños de San Juan; día 15, en la de niñas de la propia feligresía y el 16, en las de niños del Pago de La Perdoma; comenzando todos a las diez de la mañana. En las de adultos de la Concepción y San Juan, tendrían lugar los días 12 y 14, a las 8 de la noche. El semanario orotavense agradece al Sr. alcalde la atenta invitación que se ha servido dirigirnos, para asistir á dichos importantes actos.
El lagunero La Región Canaria (La Laguna, 15-julio-1899, año I, número 7, página 3) informa asimismo de la celebración de los exámenes del curso 1898-1899. Con carácter más localista, La Voz Icodense (Icod de los Vinos, 22-julio-1899, número 88, página 2) nos informa de esa celebración en la villa icodense, demostrando el aprovechamiento de los niños el celo de los señores Maestros que merecen el aplauso de este vecindario. Se extraña, sin embargo, la escasa concurrencia de niños y niñas al certamen, lo que demuestra la indiferencia de los padres de familia. Y la siguiente recomendación, de cara a futuras ediciones:
Opinamos que debe señalarse con anticipación el día de los exámenes y no esperar á las cinco de la tarde del día anterior, pues es conveniente darles importancia y que sean invitados caballeros y señoras que formen juicio del estado de las escuelas.
(continuaremos)