viernes, 31 de mayo de 2013

Me asaltan dudas

Concluye mayo y navego aún en el mar de la confusión. Solo tengo claro que mañana tendremos la comida de la promoción. Y ágiles ‘puretas’, casi todos jubilados y chupando del bote, nos daremos cita en Casa Yeye (voy a hacer publicidad porque una conejera de San Bartolomé se lo merece), allá por Las Mercedes. Y por unas horas olvidaremos regímenes, dietas y le daremos a la lengua como en nuestros mejores tiempos de la docencia en activo. Me imagino que tendremos que arropar al alicaído Rafa Yanes tras el batacazo güimarero. En fin, si los ‘compis’ me hacen llegar algunas fotos, puede que el lunes te cuente un fisco más. Y vamos con el asunto que da pie al titular de este último día del mes de las flores.
El fin justifica los medios (Maquiavelo). El fin no justifica los medios (doctrina cristiana). Y entre ambas sentencias, un infinito campo para las disquisiciones de rigor. Porque el espectro de matices entre las enunciativas afirmativa y negativa es de tal calibre que ayer los medios de comunicación y las redes sociales (que para un servidor todavía hay diferencia) realizaron un despliegue increíble, del blanco al negro, con respecto al telemaratón de Manuel Artiles.
Convendrán conmigo en que el fin pretendido era pertinente. Pero el ego del conductor de la ‘montada’ (sí, por qué no) desbarata los esquemas de la sensatez, la cordura y el bienfacer. Este último vocablo en el sentido del objetivo mismo de la cita santacrucera. Que ha quedado diluido por el protagonismo ‘baboso’ del que se arroga la representatividad del noble pueblo canario. Orgullosos debemos sentirnos, se podía leer en los comentarios que suscitaban las fotografías del ‘evento’. Y centenares de ‘me gusta’ me dejaban en la duda de si hacían referencia a la noble causa de satisfacer las necesidades más perentorias de los que lo están pasando mal o a exaltar al ‘musculitos’, tan necesitado de los arrumacos que le permitan olvidar otras deudas contraídas.
Ya que mencioné arriba al exalcalde de Güímar, y habiendo leído demasiadas declaraciones tras la moción de censura próxima pasada, me gustaría que cualquier alma (persona, individuo, habitante) sensata me diese una explicación lógica acerca de los nuevos sueldos. Ya saben ustedes que el principal cometido en la primera sesión plenaria que se celebra tras la toma de posesión es la asignación de prebendas. Y mientras los unos (los desalojados) argumentan que ha habido un significativo incremento en el montante económico que supone el nuevo reparto de las áreas de gobierno, los otros (los que acceden; bueno, algunos estaban pero pretenden mejorar sus condiciones laborales) esgrimen que va a haber un ahorro de bastantes millares de euros. Y la concejal de Sí se puede, quien había manifestado en la propia sesión plenaria que todo iba a seguir igual (más de lo mismo), ha reculado y ahora sostiene que se equivocó en su apreciación. Si los que somos meros espectadores, hacemos cruces (a pesar de significados agnosticismos) ante semejantes dislates, cómo tendrán el cuerpo en estos momentos de esperpento los habitantes de Balandra-Los Picos, Chacaica, Chacona, Chimaje, Chogo, El Escobonal, El Socorro, El Tablado, Guaza, San Pedro Arriba, San Pedro Abajo, San Francisco Javier, La Caleta, La Hoya, La Medida, La Puente, Lomo de Mena, Los Barrancos, Pájara, Puertito de Güímar, Punta Prieta, San Juan y el barrio de Fátima. Esto me lo copié, no te vayas a creer. Si en algo erré, mañana me tirarán de las orejas.
Y las últimas, cómo no, con más de política. Debe ser mi debilidad. Ese ente abstracto llamado Europa, que, como muy bien saben ustedes, suple a Mariano en sus ratos de ausencia (a saber, siempre), ha recomendado (en español debe traducirse por ordenado) que hay que volver a subir los impuestos y bajar las pensiones. Si ya lo escribí hace un par de días: no puede ser el contemplar esas reuniones de mayores, que no viejos, sentados en cualquier esquina o jugando a las cartas un día sí y el otro también, mientras el país se va pa´l carajo. A mover ese esqueleto que se les anquilosa sin remisión, a coger papas o a sembrar caña dulce (para que los políticos sigan chupando). Y cobrando el día 25. Qué ejemplo para esa juventud sobradamente preparada. Muévanse, coño.
Salvo tímidas protestas de grupos minoritarios que nada temen perder en procesos electorales, los políticos españoles (incluyan los canarios), a la hora de establecer impuestos e imponer restricciones, no se cortan lo más mínimo. Les basta con la disculpa consabida de que no es posible hacer otra cosa. Pero hay dos temas pendientes (Reforma de la Administración y Ley de Transparencia) con las que practican muy a menudo lo de “aleja de mí esta cruz”. Una cosa es que te toquen tu bolsillo y otra bien distinta es que le desmonten los chiringuitos. Su bolsillo, que no es de cristal como propusiera Tierno Galván, tiene un mecanismo tan especial que es permeable para las entradas, pero impenetrable a cualquier guante que pretenda echarle mano. Transparente, sí; pero confeccionado con vidrio a prueba de balas. Lo mío es mío, pero lo del pueblo es capital del bien común. ¿Reformar la Administración? Fuegos de artificio. Eso no se toca. Y gin tonic gratis.

jueves, 30 de mayo de 2013

El polvorete

Amenazaba en el post anterior en alongarme hoy al Pepillo y Juanillo, a pesar de tan magna festividad en Canarias. Y como ya los que saben de la pertinaz socarronería de un servidor, aderezada con ligeros matices de fina ironía, seguro estarán buscando relación entre el titular arriba indicado y el posible lema para el acontecimiento que nos concita, no pierdan el tiempo. ¡Ah!, no vayan a pensar que se debe tan sugerente título a la búsqueda de nuevas fórmulas para la celebración, en lugar de tanto baile de taifas (y candil) con arpegios nacionalistas del timple de Benito Cabrera (excelente músico), quien se ha quejado de la crisis sabandeña. Lo que hay que leer.
Ayer por la mañana subí a La Guancha. Y al pasar por el Lomo Juan de la Guardia, ahí por donde se enfila uno hacia El Andén y Los Chavocos (todavía en Icod el Alto, Los Realejos), observé por enésima vez un lindo chorrito de agua que circulaba tan campante por la carretera. Escribo lo de enésima porque lo mismo soy el único afortunado al que le riegan el asfalto cada vez que transito por aquellos lares. Pero en una tierra donde no podemos presumir demasiado de la abundancia del líquido elemento, no parece muy normal que este desperdicio no se haya solventado más antes que después. Me recuerda, salvando las distancias, aquellos despilfarros en la costa realejera, ahí por Gordejuela, cuando en determinadas épocas del año, el agua que no se elevaba con la maquinaria allí existente era arrojada a la mar océana, mientras se le secaban los pinos replantados a Wladimiro en las cumbres sureñas, con lamentos y artículos dominicales incluidos.
Pero a lo que íbamos. Y nos trasladábamos al paseo romero que organiza el CEIP Plus Ultra cada año por estas fechas. Allí me sumergí en el río festero e hice el recorrido estipulado. Abuelos, como el menda, varias decenas. Y bien largas, si no centenas. Porque en estas actividades cada chaval debe tener un acompañante. Y como la naturaleza me sirvió en bandeja la manía de observar, capté que en cada grupo, tanto de infantil como de primaria, no debía estar todo el alumnado. Pues me dio la impresión de que había más adultos que colegiales. Puede ser que abultamos más. Claro, la condición sine qua non del adjunto obligatorio (progenitor, tía, abuela…), ha supuesto un inconveniente añadido. Si padre y madre tienen la inmensa fortuna de estar trabajando, y no disponen de otros familiares cercanos que los puedan suplir en estas actividades extraescolares, se topan con el dilema de que su hijo no puede acudir ese día al centro. ¿Y dónde los dejan? De ahí las ausencias que se notaban. Que para eso estuvo uno metido en esos fregados hasta el otro día. Y viene la pregunta de rigor: ¿En base a qué normativa puede un equipo directivo privar a un alumno de participar en estos ‘eventos’, y no darle, como mínimo, la posibilidad de que esté en el centro, como cuando se ‘castiga’ al que se portó mal? No, eso no está bien y el AMPA o los representantes de padres y alumnos –también ayuntamiento, por qué no– deberían indicar al profesorado que busque la fórmula para subsanar tales anomalías. Quiero dejarlo ahí, en un desliz, porque si me apuran… Insisto, hasta ha bien poco yo era un número más de ese sistema. Por lo tanto, algún conocimiento de causa existe.
En el trayecto, otro abuelo me sopló que cuando finalizara la romería, los congregarían en el pabellón porque habría una sorpresa. De testigo lo tengo que le contesté: ¡Oh!, vendrá Pepe Benavente. Y hete aquí que ya reunidos todos en el recinto deportivo, allí estaba, efectivamente, nuestro peculiar, dicharachero y televisivo (autonómico) personaje. Qué contentas se pusieron madres y abuelas. Por qué demonios no tendré yo esa intuición para cuando juego la Primitiva. Lo dejo así porque no sé si ponerle signos de admiración o de interrogación.
Tras solventar unos pequeños problemas con la megafonía, arrancó el espectáculo. La compostura y orden iniciales quedaron rotas cuando el artista, en su afán de sentir más de cerca el arrope del público enardecido, quiso ‘chocar sus cinco’ con la tropa y… casi lo ahogan. Al concluir, con los sofocos del rodeo, el primer tema, la presentadora (ignoro si se trataba de la señora directora) tuvo que llamar al orden para que cesara la desbandada. Una vez reorganizada la multitud (que sí, aquello estaba que daba gusto verlo), la segunda canción. ¿Cuál si no? La del gallo, ese portento del polvorete. Lo de menos, la hora y la edad de los participantes. Cómo movían el esqueleto las maestras. Cómo se pasaba el micro a los menudos para que pusieran en práctica sus conocimientos musicales, cómo repetía entusiasmado el auditorio los estribillos de tan egregia melodía: El gallo subeee, echa su polvorete, rakatapun chinchín y se sacudeee.
Dado que suele confundirse con pasmosa facilidad el puritanismo con la religiosidad, debo manifestar abiertamente y sin tapujos que no son mis fuertes ni la una ni el otro. Pero salí –tras probar exquisitos gofios amasados, rosquetes, papas…–, con cierto regusto amargo. Qué necesidad de complicarse la vida en una profesión que es modelo y espejo, en la que se mira la sociedad entera y que se convierte en diana en menos que canta un gallo. Y no el de Pepe, precisamente. Ni siquiera es menester tanto ‘empuje’.
Como también participaron significados miembros del Consistorio, extremen las precauciones –las de seguridad, por la masiva concurrencia, asimismo– y no ‘sorprendan’ a los chicos con semejantes boutades. Y lo declaro desde la óptica del mayor de los respetos. No conviertan un acto académico de estas características en una verbena de pueblo, por muy tío de una maestra que sea Pepe Benavente. Puede que esta sea la peculiar forma de entender la canariedad de algunos, incluido el presidente Rivero (por boca de su álter ego Willy García), pero discrepo con rotundidad y no comulgo con tales procederes.
No obstante, el próximo año, si la salud me lo permite, acudiré a la cita. Será muestra inequívoca de que mi nieta sigue navegando en su peculiar singladura y el abuelo puede permitirse aún acompañarla en tan pedagógicos momentos. Lo mismo se hallará ya en condiciones de leer esta mi opinión del acto de 2013. Y deberé aceptar, gustosamente, sus críticas. Que las habrá, no me cabe la menor duda.
Y mañana acabamos el mes florido, pero no olvides que hasta el cuarenta de mayo… Que sí, ponte el abrigo hasta mediados de junio y no presumas de vigor. Deja eso para el gallo.

miércoles, 29 de mayo de 2013

Creemos un comité

Se han puesto de moda los comités de expertos. Que los hay tanto para un roto como para un descosido. Uno, denominado también ‘Comité de Sabios’, lleva unas semanas dilucidando qué hacer o dónde meter a los jubilados, a los pensionistas. Porque gastamos demasiado. Y eso de estar mano sobre mano y cobrar a fin de mes (la de este mes de mayo se está retrasando: ¿primera medida?) se va a acabar. Porque el que no pueda ir a raspar platanera ni a coger papas, se destinará a dirigir el tráfico en las proximidades de los centros docentes en las horas de entrada y salida de los alumnos. Pero las charlas en los bancos (mobiliario urbano, no te vayas a creer), las partidas de cartas y el juego del dominó pasarán a la historia. Que da vergüenza el contemplar a todo ese colectivo de gente desaprovechada y el país manga por hombro.
Aprovecho el introito para responder a los buenos amigos que me han preguntado el porqué no aparezco en esa sección específica (digital) que Diario de Avisos nos brinda a los realejeros (como a La Orotava e Icod de los Vinos). Aclaro que hace bastantes meses el amigo Agustín González, cuando fue nombrado subdirector del citado periódico, se puso e contacto conmigo para ofrecerme una columna semanal en el apartado de Opinión. Y hace unas semanas (tal vez un mes y pico), Gabriela hizo lo mismo para que me asomara a sus páginas de este Norte. En ambos casos decliné la gentil invitación (aunque le parezca de risa, por motivos laborales), pero me dejaron la puerta abierta para cuando creyese conveniente cambiar de parecer o tuviese un fisco más de tiempo. Porque para tal menester es preciso tenerlo. Si estás convencido de pretender algo digno.
Y retomo el asunto del día. Según he leído en mis ratos libres –escasos, pero intento aprovecharlos– este colectivo aludido (el de los expertos, que no el de los mayores) está formado por doce personas, de las que ocho han trabajado, o colaboran, en la Banca o en compañías de seguros. Que sería algo así como pedirle a Pedro Luis Cobiella que emita un informe sobre la conveniencia de dotar de material al Hospital del Norte (o del Sur, que en ambos lugares nos tropezamos con Hospiten). Acabaremos, ya lo verán, todos privados, es decir, dotados de privanza (no sean malpensados).
Como ya uno intuye cómo se las gasta este Gobierno, las posibles soluciones del comité que venimos mentando no me extrañaron lo más mínimo. Los atractivos planes de pensiones se nos seguirán vendiendo para general deleite y beneplácito de los mismos que nos hundieron en la miseria. Ellos se repartieron el botín (con dobles) y demandan que nos conformemos con las migajas del sistema. Eso sí, nos queda la opción de continuar con la visión de los grandes premios de la Fórmula I.
Me llamó poderosamente la atención otro comité: el de expertos en malos tratos. En el que va a ser incluido el jugador bético Rubén Castro, al hacerse ‘digno’ acreedor en una sesión práctica de hace un par de días. Porque ya me dirán ustedes qué es un experto en malos tratos, cómo se alcanza tal honor y cuáles son los requisitos que deberán cumplir sus miembros. Y si me van a contestar que habrá un alto porcentaje de psicólogos, me tendrán que permitir que como mínimo esboce una sonrisa. Pues el recurso de tales profesionales para todas las desgracias humanas habidas y por haber, ya suena a cuento chino. Me recuerda el masaje milagroso de la madre generosa que con solo pasar la mano por la superficie supuestamente afectada del crío es capaz de calmar el dolor más intenso. O aquel otro del que le decía al menudo tras cualquier caída: Ven aquí que yo te levanto. Y acudía, más bien presto, el renacuajo, olvidando lloros y quejas. ¿Expertos en malos tratos? ¿Y a los que nos someten los políticos?
¿Será maltrato la defensa numantina de la policía autonómica por parte del presidente de las ínsulas? ¿Lo será, o podría llegar a serlo, la connivencia socialista? Incluido el flamante día (ayer) de la policía canaria. Ya está. No más. Si alguien sabe del negro que le escribe los artículos del blog de Paulino, que me avise, porque si cobra con la esplendidez que lo hacen los comentaristas deportivos en las retransmisiones de la tele canaria, lo mismo me trago todo lo que he escrito hasta ahora (y llevo unos buenos tochos) y me dedico a alquilar mi pluma. Vaya expresión fea. Ni que estuviera para tamaños sacrificios.
Mañana día 30 celebramos el trigésimo aniversario de no sé qué. Creo que del Parlamento ese de Teobaldo Power. Ahí donde se reúnen unos y unas llamados señorías. Y aparentan que discuten asuntos de grave trascendencia. Como si fueran todos ellos en conjunto un comité de expertos. Y es festivo, pero lo mismo trabajo y me alongo a esta ventana.
Pues eso, hasta mañana o hasta pasado. Ya se verá.

martes, 28 de mayo de 2013

Corrupción generalizada (y 2)

Manuel Domínguez y Adolfo González saben del tumor pero no quieren extirparlo. Y así me lo han reconocido. En privado. Y este afer guarda semejanza con otros casos en los que se sienten prisioneros y ante el temor de la posible explosión, prefieren seguir cogidos por cierto sitio. Lo malo es que aquellos que gobernaron con anterioridad no se hallan en condiciones de arrojar piedras a no ser que quieran acabar con un buen chichón.
He escuchado, a modo de disculpa, que no es bueno ‘politizar’ la emisora. Propongo al miembro del equipo de gobierno que más tiempo libre tenga –puede usar uno de los asesores o el propio gabinete de prensa–, que escuche las grabaciones desde mayo de 2011. Y que dé a conocer en cuántas intervenciones se ha puesto a la exalcaldesa de San Juan de la Rambla a caer de un burro, con insultos, improperios, risas, fiestas y chirigotas, hechos más propios de medios de comunicación privados, de marcados compromisos católicos (por aquello de la ejemplaridad, los golpes en el pecho, la religión en los colegios y la gilipollez de ese alguien superior que debe tener los oídos taponados con cerumen) que de una sostenida con fondos públicos.
Ahora, estimado alcalde, observarás que por ejercer mi derecho a preguntarte, o cuestionarte una faceta del quehacer en mi pueblo –creo estar legitimado para ello– con el mayor respeto y educación, me supondrá una nueva crucifixión, porque entre tanto católico practicante sigue habiendo algún que otro fariseo. Y si hay que llevar a cabo el sacrificio en la propia emisora que yo también sostengo, se hace y santas pascuas. Tengo a mi favor, señores del equipo de gobierno, el que nadie me lee. Si alcanzara seis o siete lectores, puede que me hubiesen dado ya dos tiros. Y concluyo este apartado con la convicción de que esto también es corrupción, que dudo en calificar de periodística porque quienes la ejercen o practican distan años luz de las responsabilidades contraídas.
En la Revista Latina de Comunicación Social (número 60, 2º semestre de 2005) encontré esta reseña: Dr. Jesús Manuel Hernández García. Tesis: "Prensa y educación en el norte de Tenerife entre la I y la II Repúblicas (1873 – 1931)", dirigida por el Dr. Javier González Antón. Defendida en la Universidad de La Laguna (2004). Amén de obviar la calificación y otras menudencias, me atrevo a sugerir a su director, el doctor De Pablos Coello, que no se le vuelva a ocurrir semejante desliz, cuando él sabe, asimismo, que ese trabajo me lo copié; mejor, me lo saqué en una rifa. Y el título sin encuadernar, qué desastre.
Cuando puedas, Adolfo, seguimos la conversa del pasado sábado. Aparte de la que tengo pendiente con Isa. A estas alturas de la vida, nadie me va a callar por mucho que me califiquen de falangista, entre otras lindezas católicas, apostólicas y romanas. Y con la bendición de la Santísima Trinidad, que para eso fui a la misa previa a la romería. A escuchar a los buenos amigos de Higa. Se merecen más actuaciones en El Realejo. Y si se tercia, traerlos el próximo año al Festival de las Islas. Estuve en la edición XXXIX celebrada este pasado sábado. Y tengo algunas propuestas e ideas para la concejalía del ramo. Los que hemos estado metidos en ese mundo folclórico sabemos que hay aires que no requieren grandes esfuerzos. Ni en la parranda ni en el cuerpo de baile. Y noto grupos demasiado acomodaticios. Algunos ni sudaron los calzoncillos. Demasiada danza cortesana o de salón. Y más, pero queda pendiente para esa plática con la concejala.
Como inicié el recorrido con una cita (perdón, con una vulgar copia, que no sé hacer otra cosa), concluyo con unas líneas de un excelente periodista, Juan Varela (a otros les gusta más Ansón o Pedro Jota):
"Las opiniones son libres, los hechos son sagrados", según el viejo adagio del editor Charles A. Dana, uno de los inventores del periodismo informativo, que también se atribuye a CP Scott, histórico director y luego editor de The Guardian, y uno de los creadores del moderno periodismo de información. 
Toda opinión debe ser argumentada para mejorar su comprensión y apelar a la inteligencia del lector, no a su fe.
Si el periodismo español caminase por la misma senda se evitarían sandeces, enfados y muchas malinterpretaciones. Y sobre todo que una parte del país saliese de su casa o del coche cabreado después de oír a los tertulianos, para quienes los hechos son tan baratos. Quizá entonces los acuerdos serían mayores que las disputas. 
¿Cuánto tiempo le dedicas a cada entrada en el blog?, me preguntó una de mis hermanas hace poco. Bastante, le respondí. Nadie me obliga, obviamente, pero cuando uno se asoma a estas ventanas debe ser serio en sus planteamientos y argumentar sus opiniones. Para chanchullar ya existen suficientes cachanchanes. Es preferible la convicción de que te fisgonean cuatro selectos y escogidos, a…
Y para esos aludidos escribo. Echo en falta comentarios al respecto. Sean valientes, pierdan el miedo a ser diana de los vilipendiadores y a su disposición tres canales: este propio blog y sus dos enlaces correspondientes a Facebook y Twitter. Remítanme, si lo prefieren, un e-mail, y autorícenme a colgarlo. ¿O preferimos seguir combatiendo la corrupción –la periodística (o la advenediza) lo es igualmente– con el más ignominioso de los silencios? Porque si lo hacemos, estaremos jugando con idénticas armas a las de los mandatarios del laissez passer, porque mañana les puede tocar. Eso, hoy por ti, mañana por mí.
Buen arranque hemos tenido en esta última semana de mayo. Disfrútenla.

lunes, 27 de mayo de 2013

Corrupción generalizada (1)

Tras un sábado y domingo festeros por excelencia en mi pueblo (Los Realejos), me temo que hoy lunes no vaya a ser demasiado original en el presente post. Porque los párrafos en cursiva que vendrán luego significa que me he copiado como un bellaco. Y yo que he sostenido hasta la saciedad que la mayoría de los políticos son honrados, comienzo a desengañarme. Y no porque se hubiese suscitado el tema, como casi siempre, en amena conversación en la Feria de Ganado –qué mejor lugar para tratar el particular–, sino porque desde las propias instancias judiciales se elevan voces que señalan que lo que está ocurriendo en España no es normal. Y si ya se afirma abiertamente que vamos hacia atrás, se nos hace muy complicado pensar que tras la caída del gobierno socialista, en la época de Felipe González, por las trapisondas habidas, y cuando ya nos creíamos curados contra el espanto, nos sorprenden los populares con una batería de aconteceres de tal calibre que solo se entiende el que sigan ahí por la lamentable situación política en la que se halla el PSOE.
Vamos con esas declaraciones y luego seguimos:
El teniente fiscal del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, Luis del Río, opinó este sábado que en España “casi podemos hablar de corrupción generalizada”, ya que es un país en el que “existen sospechas fundadísimas” contra “la mayor parte de los miembros del Gobierno” de “estar inmersos en actos de corrupción” además “no puntuales”. Del Río hizo esta reflexión en una mesa redonda sobre la “Posibilidad de actuación del Ministerio Fiscal ante la corrupción”, celebrada en el marco del XVIII Congreso de la Unión Progresista de Fiscales que se clausuró en San Sebastián, y en la que también participó el fiscal anticorrupción de Baleares Juan Carrau.
El fiscal canario ha considerado que la situación de corrupción en España es “aún peor” que en años anteriores, al tiempo que se ha mostrado sorprendido por lo “impactante” que resulta que “frente a esto no haya ninguna respuesta”, cuando se está produciendo “en medio de una crisis brutal” y “de un recorte y desmantelamiento del escaso Estado de bienestar que teníamos”, lo que, a su juicio, “es indicativo de una baja calidad democrática”.
A su juicio, el “panorama” resulta “aún más desmoralizante” cuando se asiste a “la dureza con la que se aplica el Derecho Penal en otros sectores” delictivos y a lo “pusilánimes” que “vemos a veces” que son los tribunales “a la hora de enjuiciar” materias relacionadas con la corrupción. Una situación de la que, en su opinión, “a veces” son “cómplices” los medios de comunicación, ya que “en determinados ámbitos” da la “impresión” de que algunos periodistas “son verdaderos mercenarios de la información, al servicio de determinados intereses, que intentan presentar la realidad de forma radicalmente distinta a como es”.
Como pretendo seguir siendo optimista, no me queda más remedio que demandar de todos aquellos cargos públicos que se sientan libres de todo pecado que sean los primeros en alzar la voz para denunciar los casos –ellos los conocen mejor que nosotros– que enfangan la política. Puestos en la balanza, no sé si el encubrimiento se queda atrás. En consonancia con los argumentos de Luis del Río, en los partidos se impone un buen lavado a presión. Y la exigencia para que la Justicia –ahora sí lo pongo con mayúscula– actúe de manera diligente es añadido imprescindible para que las tornas cambien. Y dado que no hay medio de comunicación (todos no pueden estar equivocados) que no haya sacado a la luz los embrollos en los que se halla envuelto el PP, no vuelvo a mentar la urgentísima cirugía estética del PSOE porque acabarán por llamarme pesado.
Aquí en el pueblo, aparte de las fiestas que ya mencioné al principio, hay raras sensaciones. Y me parece que en nuestro alcalde se esté presentando un significativo desdoble de personalidad. Sin que se alcance, por supuesto los extremos del Doctor Jekyll y Mister Hyde, de la novela de Robert Louis Stevenson, pero su condición de presidente insular del PP está haciendo extrañas migas con el papel de mandatario municipal. Mientras debemos reconocer que en el pueblo se vienen corrigiendo aquellos asuntos pendientes que corporaciones anteriores fueron dejando de lado, coexisten otros aspectos que, como mínimo, dan que pensar. Al asunto de la compra de la nave industrial en el Polígono de La Gañanía, debemos sumar la negativa, para un servidor incomprensible, a que se retransmitan las sesiones plenarias por la emisora municipal y a que se retome la desaparecida tertulia de concejales. Y, entre otros, son estos dos últimos asuntos los que me hacen pensar que prevalece en tales posturas la condición presidencial partidaria de Manolo. Al igual que en lo del cumplimiento del programa electoral que tanto se esgrime. Aquí, porque a otros niveles, ya me dirán.
En el caso de Radio Realejos, el grupo de gobierno se está equivocando de plano. Y deja reproducir esquemas que se han ido enquistando en la emisora. Para cualquier tipo de oyente es más productiva la intervención de representantes de las diversas opciones políticas antes que los monólogos, en la mayoría de los casos tediosos, que se producen diariamente en la denominada sección de los portavoces. A no ser que se persista en la idea de utilización del medio para obtener rédito electoral…
(Concluiremos mañana)

viernes, 24 de mayo de 2013

Tres mil setecientos millones

Se trata de una estrategia para el fomento de un crecimiento “inteligente, sostenible e integrador” como base para la creación de empleo. Y se viene fraguando desde hace un par de años. Estará dotada con 3.700 millones de euros.
Me imagino recordarás que en cierta ocasión tuve la paciencia de hacer un repaso a las declaraciones que nuestro estimado presidente autonómico había realizado acerca de todos los puestos de trabajo que se iban a crear en estas islas con sus brillantes y originales ideas. Como la señalada en el párrafo con que inicio este artículo de hoy viernes.
De todos –salvo los que no me leen– es harto sabido que en cuanto Paulino se alonga a su blog –es un decir, porque él dispone de un selecto equipo de colaboradores para redactarle las líneas–, la tozuda realidad le vira la espalda y le canta, con números, que por cada diez que, según sus cálculos, se incorporan al mercado laboral, varios centenares salen por la puerta de atrás.
Aunque cada vez son más las voces que se elevan para manifestar bien a las claras a todos estos políticos ‘eternos’ que de este profundo pozo no nos va a sacar ninguna administración pública, en nuestro particular caso no solo nada contracorriente el otrora alcalde de El Sauzal, sino que se empeña en querer derribar esa enorme pared que tienen ante sus narices. Para que luego escuches declarar a su correligionaria Oramas que es kafkiano lo del retorno de Aznar
Y cuando los indicadores señalan que más pronto que tarde alcanzaremos esa losa de 400.000 parados, Rivero insiste en la cuadratura del círculo y atisba, incluso, signos de recuperación para el último trimestre de este año. Porque como a España le irá peor, con el consuelo –mal de todos…– queda satisfecho otra temporada más. Cuando alude a España, en lugar de al resto de España, pienso que si está moviendo ficha para congraciarse con cierto editor.
3.700.000.000 (euros) equivalen a 615.628.200.000 (pesetas). Lo mismo si mi amigo Carlos me impone de tarea el leer esas cantidades, nada te aseguro pero temo meter la pata. Yo me pierdo. Y pienso que si reunimos a unos miles de parados para que diluciden qué hacer con esas astronómicas cifras, puede que ofrezcan soluciones más factibles que las que Paulino viene propagando desde el mismo instante en que columbró –antes que nadie, hecho del que siempre ha presumido; y que lo reitera sin que se le caiga el rostro ante tan manifiesta inutilidad– que la crisis avanzaba peligrosamente por los Roques de Anaga.
Me pregunto, no sin cierta ingenuidad pero sin la mala leche en la que ahogan sus incongruencias los que no me leen, si quizás no podríamos repartir directamente los dineros entre los que habitamos estos peñascos. Haz tú la división y convéncete. ¿A cuánto tocamos sin necesidad de tanto convenio?
Uno acaba por sospechar de que algo raro ocurre con el dinero en el camino. Que Portugal está mal no constituye novedad alguna. Pero si vas a Madeira puedes captar que no hay una casa vieja y que tiene una red impresionante de infraestructuras viarias. Con dinero de Europa, como el nuestro. Y si aquel país está mal es que algo no se gestionó adecuadamente y que mucho dinero debió irse por el sumidero. Pero aun así, por lo menos en la isla que te mencioné, están mejor que en Canarias. ¿Significa esa cuestión de que aquí hay más sumideros todavía? Pues a lo peor sí.
Y a pesar de que el panorama está más negro que los sobacos de un grillo, a pesar de que la cosa está jodida (perdóneseme la expresividad), insistimos en las obras faraónicas como medida válida para paliar la sangría del paro. Como hicimos en la época de las vacas gordas, sin que los desaguisados nos hayan servido de lección. No mento los aeropuertos fantasmas para que no entres en mayor depresión. Pero aquí, sin necesidad de ir a Castellón, tenemos el campo de golf de Buenavista o el Muelle de Vueltas (Valle Gran Rey) con un elegante cartel de se vende o se alquila. Menos mal, y me alegro, que los visionarios ‘crucerísticos’ de este Norte tinerfeño han optado por asumir el refrán de más vale pájaro en mano y han ocultado en el fondo del baúl de los recuerdos el faro de Sóstrato de Cnido. Me refiero, obviamente, a los que les restaba un ápice de capacidad de reflexión, porque a los que la naturaleza les suprimió tal facultad seguirán ladrando in sécula seculórum. La condición ¿humana? es así. Cree el bulldog que todos son de su pedigrí.
Termino con una posible primicia. Tengo unos amigos, tanto en CC como en el PSOE, que me van a proponer, después de este inminente verano, para sustituir a Willy García. Si quieres conseguir algo, critica. Ya saben que ese puesto va a ser una propuesta del Parlamento y no a dedo. Como la votación será secreta, estoy casi en condiciones de afirmar que algún diputado popular también me votará (mis relaciones con Manolo siguen siendo cordiales, a pesar de alguna disparidad en ciertos enfoques o matices radiofónicos; pero como sabe de mi imparcialidad, soy mucho menos sospechoso que la inmensa mayoría de los que ya están colocados en gabinetes, asesorías, secretarías, medios de comunicación sostenidos con fondos públicos). ¿Qué, cómo se te quedó el cuerpo? ¿Que por qué lo adelanto? Primero, por estrategias que no se pueden desvelar; y segundo, para que los detractores tengan tiempo de investigar si es cierto lo de los méritos contraídos o no en la tómbola que hace unos días te señalé. Sería, de confirmarse, mi particular universidad de la calle. ¡Qué ilusión! Estoy que no quepo en mí.

jueves, 23 de mayo de 2013

Nuevo parque móvil

Uno, que ya está matriculado en el curso de los mayores, suele tener la manía de pensar en pesetas. Sobre todo cuando la cantidad que le ponen delante de sus narices, en los euros actuales, tiene muchos guarismos (seis o más). Dicho lo cual, o escrito lo antecedente, debo manifestar, de manera clara, inequívoca y rotunda, que hoy no me olvidaré, estimado amigo Carlos, de colocar la etiqueta ‘Matemáticas’.
Primero apareció en Facebook el anuncio del alcalde. Más tarde se hizo eco la web municipal con este titular: ‘El gobierno municipal pondrá fin a la insalubridad motivada por el depósito del parque móvil municipal de Barroso’. Algo que no entendí porque si se trata de una propuesta a elevar al pleno, lo prudente sería esperar a que la reunión tenga lugar, para que, independientemente del resultado (la mayoría absoluta permite su aprobación sí o sí), sea considerada como un acuerdo del Consistorio. Máxime cuando podría alcanzarse, incluso, el necesario consenso con el resto de grupos. A lo peor no interesaba.
Ahora son los diferentes grupos políticos los que van tomando posiciones antes de que se celebre la sesión plenaria (hoy mismo). Este pasado lunes tuve conocimiento de la posición de IUC. Que no difiere, parece ser, de la que va a argumentar el Partido Socialista. De la postura de Coalición Canaria nada sé. Lo mismo ayer, en el apartado que disponen en Radio Realejos lo manifestaron, pero ya saben cuál es el planteamiento actual de quien esto suscribe con respecto a esta emisora en la que poseo mi parte alícuota como uno más de los contribuyentes que la sostenemos. Pero a estas alturas de la vida, los dictados del galeno hay que respetarlos.
Estoy completamente de acuerdo con lo que defienden las dos fuerzas políticas mencionadas: cambio de ubicación, sí; pero no a cualquier precio. Que los vecinos de Barroso necesitan una mejor calidad de vida está fuera de toda duda. Y que son muchos los años que han tenido que soportar molestias, también. Pero estas ‘arrancadas’ porque un particular ofrezca una nave, que no se halla, ni por asomo, en las debidas condiciones como para su uso inmediato, suena, en principio, a raro. 800.000 euros, libres de polvo y paja, en estos tiempos, es negocio más que apetecible. Ciento treinta y tantos millones de pesetas, más lo que deba invertirse para su adecuada puesta a punto, es tanto como para pensarse si no existe otra alternativa.
Si sumamos las dos cantidades arriba aludidas (adquisición y arreglo), puede que ese montante sea suficiente para acometer otro plan más ambicioso. Raro me parecería el que el ayuntamiento no dispusiera de terrenos adecuados para ubicar en ellos ese flamante nuevo parque móvil. Salvo que los quiera para el hipódromo. En el que iría, asimismo, todo aquel material de propiedad municipal (fiestas, policía –incluidos los canes–, servicios…) y para lo que, con proyectos elaborados por los técnicos propios, esa terrible lacra del paro bien podría sentir un alivio bastante notorio.
En este supuesto, me atrevo, incluso, a ser más que generoso y si menester fuera habilitar un par de cientos de miles de euros más (para alcanzar el millón), hágase ya. Si para tapiar la Casona de La Gorvorana (incluyendo la protección de los frescos de Bonnín) nos basta con siete mil euros, muy difícil se me hace creer que no puede el ayuntamiento realejero lanzarse a esta aventura que daría más de una alegría al sector de la construcción, tan en horas bajas en estos momentos. Al tiempo que dinamizaríamos (qué vocablo más bonito) el comercio. Tal vez no mucho, pero grano a grano. Y cualquier mejoría con respecto a lo que tenemos, ya me dirán.
De la otra manera, con la compra directa de la nave deteriorada, solo vislumbro un beneficiario. Y a mí, qué quieren que les diga, esos cambalaches me suenan a devolución de favores o, cuando menos, a componendas o asuntos turbios. Máxime cuando en la elaboración de los presupuestos municipales, que no ha tanto se aprobaron, no existía el menor atisbo de esta posibilidad que ahora se pone sobre la mesa.
Hago míos razonamientos y palabras de los portavoces de los grupos que hasta ahora se han definido (IUC y PSOE) en el sentido de que ha llegado la hora de buscar una solución para la insalubridad que vienen soportando los habitantes de aquel sector de Barroso, pero a través de una fórmula más equitativa.
Si el propietario de la nave (de la discordia) la vende es porque lo que allí había (¿Sociedad Cooperativa Agrícola-Ganadera?) no funciona. Y de golpe y porrazo se va a encontrar con una cantidad de euros que mejor distribuidos podrían sacar del pozo a un número mayor de realejeros. Y el ayuntamiento poseería unas instalaciones realizadas ex profeso. Nuevas, flamantes y adecuadas para los fines previstos. Sin remiendos ni composturas.
Mi opinión ha quedado manifestada, sin embargo la decisión se adoptará esta noche. Me temo, ojalá me equivoque, que todo esté ya apalabrado y no haya vuelta atrás.

miércoles, 22 de mayo de 2013

Esperpentos norteños

Llevo toda mi vida (algo más de 60 años) escuchando la misma canción acerca de la potenciación del Norte tinerfeño y del desarrollo de Puerto de la Cruz como motor de la economía en esta parte de la isla. Y uno de los aspectos más socorridos ha sido, desde siempre, la tan necesaria preparación (en idiomas) que nos abra las puertas en ese sector.
Todo se nos ha ido en discutir, en poner a caldo de gallina a la zona metropolitana y al Sur y en dejar pasar el tiempo observando cómo esos puestos de trabajo, para los que supuestamente nos estábamos formando, eran ocupados por otros más avispados que no perdieron la oportunidad que se les brindaba con disquisiciones de baja estofa. Y a la par, ese Sur antes mentado y otras islas supieron sacar provecho de sus potencialidades y no solo salieron adelante sino que fueron ‘condenando’ a la otrora Ciudad Turística a un progresivo olvido. Se durmieron los hoteleros en los laureles pensando que el maná seguiría cayendo cual don divino y, en consecuencia, hemos llegado a la situación actual, en la que si no fuera Loro Parque y los viejos del Imserso, otros muchos establecimientos hubiesen echado el cierre.
Se ha pretendido vender que el futuro estaba en el puerto. Sí, el puerto del Puerto, la panacea, ese singular El Dorado que volvería a llenar las depauperadas arcas. Pero no queríamos solo una zona que fuera capaz de dinamizar un comercio que languidece a pasos agigantados. No, era necesario una construcción en la que barcos de gran porte pusieran la estampa de esplendor requerida. Y discutimos como cachanchanes, y nos manifestamos en procesión a lo Virgen del Carmen. Pasaban los años y Puerto de la Cruz empeoraba. Los advenedizos se pusieron al frente y lanzaron consignas enardecidas para movilizar a la tropa. Colgamos en Internet y circuló por las redes sociales, junto a fotografías de los barcos de Yeoward, sesudos estudios de todo lo que exportábamos hacia lejanas tierras en años idos. Pero en la vorágine no hubo mente sensata que sembrara unos gramos de cordura para señalar que esta realidad no es aquella realidad. Y se nos fue, como casi siempre, el fuelle por la boca. Quien más gritaba, a ser posible con espumarajos, se creyó en la posesión de la verdad suprema. Y la plebe aplaudía furibunda…
Estamos ahora en otro escenario. Alguien ha querido poner los pies en la tierra y se ha dado cuenta de que no podemos seguir haciendo polígonos industriales sin salidas para los camiones, hospitales sin carreteras de acceso e instalaciones portuarias a las que no pueden llegar, o salir, las guaguas con tanto turista imaginario. Porque esta isla no se puede agrandar. Y no podemos seguir vendiendo chiringuitos, como cuando hace unos años iba cada pueblo a Fitur a ofertar su playa, su monumento o su volador; su ombligo, en definitiva.
Creo que Carlos Alonso, vicepresidente del Cabildo de Tenerife, ha venido a poner sensatez en esta locura desatada. Y ha puesto el dedo en la llaga de lo que el Puerto necesita ya. Pero los mismos que alegan no tener un duro para sostener la antena por la que transmiten sus soflamas (es un símil), siguen erre que erre en el vano intento de vestir a San Telmo con ropajes ajenos. Y mientras, hombro por hombro, y la casa sin barrer… Seguiremos en corto espacio de tiempo. La pescadilla seguirá mordiéndose la cola. Y la cola (o el rabo) será bastante larga. Rondaremos 2020 (bien poco falta) y no habremos alcanzado la punta del muelle.
Si tú o yo, ciudadanos de a pie, sostuviéramos que el solape de competencias entre las diferentes administraciones públicas no solo causa sonrojo sino despilfarro, tendría al menos la justificación de que no hemos sido capaces de concienciar a quienes disponen de poder decisorio para que pongan freno a tales desatinos. Pero si lo escuchas de la boca de otro vicepresidente cabildero, Aurelio Abreu, te dan ganas de espetarle aquello de qué vas tú. Y fue en una tertulia de las pocas teles locales que van quedando. Como Jesús, es decir, un servidor, siempre le achacó estas salidas a Wladimiro (hay que hacer, pero yo no estoy), debe señalarle a quien fuera alcalde de Buenavista, y para más inri, actual senador, que si no se le cae la cara de vergüenza ante tales manifestaciones. Dices que no tiene razón de ser una Dirección General de Deportes en la Comunidad Autónoma, porque ese particular está transferido a Cabildos y ayuntamientos. Y algo parecido aludiste a los Servicios Sociales. ¿Y no cogobierna tu partido con Paulino? ¿A qué jugamos, Yeyo? Lo del PSOE no tiene remedio. Entre todos lo mataron y él solito se murió.
Y en el Norte acabamos. Con lo que aludí al final de mi comentario de ayer. Que algunos, erróneamente, adjudicaron a otra emisora de radio. Que no es conmutativa, salvo un apéndice. En fin… Los partidos políticos tendrían que hacer ver a sus militantes que no todos valen para todo. Y que no todos pueden ser alcaldes. Hay buenísimos presidentes de asociaciones vecinales, que luego han pasado a ser pésimos concejales. Tampoco eres periodista porque te regalen una alcachofa, o porque te saques una foto con una bolígrafo y un cacho de papel en la mano. Claro, como cualquier botija verde es tertuli-ano, todos nos sentimos capacitados para meter la pata. Y cuanto más konda (que sí, que está bien) la meta, mejor que mejor. Yo también lo escuché, estimado Manolo (alcalde de mi pueblo y presidente insular del PP), y con estos mimbres no se puede dignificar la política. Y no me meto en la falta de preparación, que también (para que no me tachen de clasista), sino en la falta de educación. Jamás había escuchado a un alcalde poner a caer de un burro a su propia población. Ni atreverse a clasificar a las mujeres de San Juan en dos grupos: señoras y no señoras. Explícalo mejor, Tomás, porque ahí estarán también familiares de miembros de tu propio grupo de gobierno. Y cuida tu vocabulario, de no ser tarde ya. Cuando estaba haciendo el periodo de prácticas (de la milicia universitaria), un teniente coronel sostenía que el silbar era de gente ruin, soez y plebeya. Si te llega a oír ayer (nada diferente a lo que se estila en otros foros) no sé qué hubiera añadido. Lo mismo se atreve con algunos ripios, estilo de estas cuartetas de la ignominia:
Un alcalde en Radio Konda
pone a caldo un pueblo entero;
no es debate, es trapisonda,
una desgracia, ramblero.

‘Señoras’ y ‘no señoras’
son los grupos que Tomás
ve en San Juan a todas horas,
¿y qué piensan los demás?

Le pregunto a Marco Antonio
si en su familia hay mujeres,
a ver en dónde demonio
engloba a queridos seres.

Jamás he visto un edil
con tan baja catadura;
y al periodista al pil pil:
¿Profesional? Ni la hechura.

Yo opino, tú vociferas, él bufa, nosotros… Hasta mañana.

martes, 21 de mayo de 2013

Desconchados y exageraciones

Ayer fui a caminar por la mañana. Y me sentí raro. Debo decir que no estoy acostumbrado a transitar a horas tan tempraneras. Tengo miedo de que algún militante del PP me columbre y llegue a la conclusión de que un cuerpo tan serrano como el mío todavía está en perfectas condiciones de currar unos cuantos abriles más. Y como el próximo hachazo será a las pensiones, me hallo en un dilema. Si estoy trabajando tanto o más que antes…
Me puse el pequeño receptor en el bolsillo de la camisa –le tengo dicho a mi mujer que las compre con tal artilugio; pues sí, las compra ella y siempre acierta, ¿qué pasa?–, y lo primero que escuché fue al señor director de seguridad y emergencias –lo del nombre tan largo es para cobrar más– de mi pueblo que respondía a unas preguntas del amigo Pedro Rodríguez en la Cadena Ser. Y entre las respuestas, el que acudieron al baile de magos del pasado fin de semana algo más de veintidós mil personas.
Con qué alegría se cuenta al alza cuando interesa y con qué desfachatez a la baja cuando de una huelga o manifestación se trata, por ejemplo. Siento no tener a mano el estudio que realizó en cierta ocasión el amigo Evaristo, aparejador de profesión. Porque estos medidores de nuevo cuño son capaces de meter en un metro cuadrado a tres parejas de baile de un grupo folclórico y les sobra espacio para trazar las figuras de la malagueña. Como el chiste de los cincuenta mil chinos que juegan al fútbol en una cabina telefónica. Y muy mucho debería cuidarse el señor Marrón en este tipo de afirmaciones cuando aún no ha tenido tiempo para elaborar el famoso plan para el que fue contratado. Hasta ahora solo se le ha visto llevarse las medallas en cuanto ‘evento’ se haya organizado en el pueblo, sin que se reconozca el mérito de los que verdaderamente dan el callo. Y si quieren vuelvo a escribir que con lo que le pagan bien podría haber un par de policías más. Que no acudirían a teles y radios, pero pondrían orden, mero ejemplo, en la Avenida de Canarias, y evitar aquel ‘marrón’ permanente con que nos encontramos al bajar por la susodicha.
Y a continuación, los desconchados. Primero, La Gorvorana, lugar y casona del que todos hablamos y escribimos en esta rabiosa actualidad. Y el que más conoce del tema, el amigo Germán, permanece en prudente silencio. Siete mil son los euros destinados a frenar el incontenible avance de la acción de los desaprensivos (humanos) y desaprensivas (palomas). Poco me parece. Yo viví allí unos veinte años. Y, por favor, no sigan martillando (o martilleando, que tanto monta) nuestros oídos con los frescos de Bonnín, porque si Consuelo (quien también habitara en la zona donde se halla el corredor y que contemplara al joven pintor enfrascado en la faena de poner unos gramos de alegría en los dinteles de las puertas que daban acceso a otras dependencias) levantara la cabeza, se mandaría tremenda carcajada con lo de cubrirlos para protegerlos. Un poco tarde, ¿no? Y perdón, tanto los que ya no están como los que aún respiramos, por atribuirme el sentir de todos los que nos cobijamos entre aquellas gruesas paredes.
Algunas tardes, pocas, me echo a andar por el sendero de la carretera de Icod el Alto. Es precioso y las vistas, de ensueño. Pero los desniveles me matan. Como lo puede hacer cualquier día de estos las planchas metálicas que están sueltas y que requieren, urgentemente, unos puntos de soldadura. A los que por allí pasean les debe importar bien poco qué organismo es el competente para el remiendo. Pero la acción a acometer no aguanta mayor demora. Y como observo a muchas personas mayores (yo casi estoy en ello) que lo utilizan, tome las medidas correctoras el ayuntamiento antes de que aparezca uno en las casas consistoriales con una extremidad inferior (qué fino) afectada por algún desperfecto.
En la caminata que te señalé en el primer párrafo, la de ayer, crucé el punte de  La Higuerita, ese paso peatonal por el que salvas la autopista del Norte a la altura del barrio que vive a caballo entre Puerto de la Cruz y Los Realejos. No te lo recomiendo. Y si tienes unas milésimas apenas de vértigo, te lo prohíbo. Ya lo he comentado en ocasiones anteriores, pero es que también se ha perdido la pintura que te señala el extremo de los escalones, esa negra o roja que se pone en el borde para que calcules el salto de cada paso. Es inconveniente añadido al ‘fondo transparente’. Para qué contarte más. Cuestión sería de que el ayuntamiento invitara al presidente del Parlamento –creo que en aquella época en que se construyó la pasarela era consejero de Obras Públicas– y lo tuviera cruzando durante al menos una hora. Si lo resiste, que lo dejen como está. De lo contrario… me temo que, asimismo, se quede como está. Total, si se cae un rebenque como yo, ya estoy amortizado y una carga menos para la caja (de las pensiones). [La foto es algo antigua, pero me vale].
Cuando regresé y me volví a enganchar en FB, me entero de que el alcalde de SJR había hecho otras jugosas y entretenidas declaraciones en las que puso a caldo de gallina a todos aquellos que no lo votaron, es decir, al 90% de los rambleros. Y aunque todos sabemos cómo son –tan poco explícitos– los comentarios en dicha red social, deduje que solo podía haber ocurrido en cierto medio de comunicación, a este paso, estimados mandatarios, cada vez menos social. El interés informativo que suscita el pueblo aludido raya el “descándalo”, término acuñado por un ex en la correspondiente versión televisiva. Cincuenta visitas más. Hasta dentro de un ratito.

lunes, 20 de mayo de 2013

LOMCE

El último Consejo de ministros dio luz verde al anteproyecto de la LOMCE (Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa). Visto lo que tardó el Partido Popular (una semana) en corregir los defectos que presentaba (eso dijo la vicepresidenta) y sabida la mayoría absoluta de la que disfruta en el Congreso, me imagino que el trámite parlamentario será un nuevo paripé. En consecuencia, al inicio del próximo curso tendremos, para general deleite, otra ley en el sector de la educación.
A pesar de que la Constitución consagra en su artículo 16 que España es un estado aconfesional, la asignatura de Religión (la católica, por supuesto) contará para obtener la denominada nota media, se tendrá en cuenta para la solicitud de becas y habrá una materia alternativa, cuyo nombre omito porque excedería al formato de mis entradas, que también puede ser cursada por los que hayan optado por aquella. Nada se especifica si esta otra cuenta a los efectos académicos aludidos.
Como uno estuvo hasta el otro día metido en esos berenjenales y ha formado parte de diferentes equipos directivos, me imagino a los jefes de estudios, cuando estén el periodo de confección de horarios, estrujándose los sesos, máxime con los recortes y escasez de profesorado, para encajar a los alumnos que cursen religión, por un lado, a los que se decanten por la alternativa, por otro, y el entronque supremo, dónde meter a los que opten por ambas. Por cierto, ¿estos últimos tendrán una asignatura más que el resto?
El galimatías del párrafo anterior, con ser de órdago, solo se produciría, y no es poco, si contamos, como por lo visto estiman Wert y la Conferencia Episcopal, con que se matriculen en Religión católica. Pero, y a la Carta Magna vuelvo, como las otras confesiones religiosas se hallan amparadas para demandar que también se impartan en los colegios sostenidos con fondos públicos, imagínense la cantidad de combinaciones que podrían darse. Estoy ahora mismo pensando en esos colegios e institutos radicados en zonas en que múltiples nacionalidades se dan cita.
En mi época de docencia activa solo recuerdo un caso de un padre que acudió al centro para demandar que la opción religiosa de sus hijos se tuviera en cuenta. Fue desviado a la Consejería donde lo despacharon con el argumento de que nos se complicara la vida y que si denunciaba el hecho, en lo que resolvía la Justicia, los críos habrían salido ya de la Universidad. Y es de lo que se agarran los políticos para emprender estas carreras suicidas en un ámbito social en el que los consensos deberían ser de obligado cumplimiento.
La cantinela de acabar con el fracaso escolar con estos cambios que se producen cada vez que un nuevo partido político alcanza el tan ansiado poder, es tan ficticia como engañosa. Es tanto como esgrimir que por haber asfalto nuevo en una autopista ya no se van a producir accidentes. El fracaso es una consecuencia del sistema, de la desfachatez de una sociedad catapultada a situaciones de comodidad y mínimos esfuerzos –los políticos son el espejo más nítido y el ejemplo más significativo–, por lo que el intento de adoctrinar (sería como llevar las ovejas descarriadas al redil equivocado: de la iglesia a la escuela) flaco favor hará. Solo me falta por ver el renacer de la Formación del Espíritu Nacional, aunque por el andar de la perrita puede que no ande muy descaminado.
La cultura del esfuerzo no se alcanza con imposiciones. Tampoco con dejadeces y políticas permisivas. De ahí la imperiosa necesidad de alcanzar acuerdos, que se impliquen los más amplios espectros sociales. Porque uno ha tenido la oportunidad (o desgracia) de vivir (y sufrir) demasiados cambios legislativos. Y aunque ha salido vivo de las batallas, entiende, y reclama, altura de miras. Y lo que pretende al PP es una involución en toda regla, una vuelta al pasado más retrógrado en el que, digámoslo alto y claro, el que tenía perras salía pa´lante, y el que no, a trabajar a la platanera y a ser esclavo de los dictados del señorito.
Al ministro Wert le han salido ‘enemigos’ hasta en la familia más cercana. Porque su venganza, que fraguó cuando su época de tertuliano, no le va a deparar mayores alegrías por mucho respaldo que sienta entre sus compañeros del hemiciclo, donde las posibles discrepancias –que las hay en más de una comunidad autónoma regida por su propio partido– se ahogan en el agua del vaso de la compensación y la compra de voluntades. La imposición de más controles en el sistema va a conducir a un incremento notorio del paro (¿hasta cuándo?) porque no habrá –y pasará mucho tiempo– posibilidad de absorber toda esa mano de obra a la que usted cercenará la posibilidad de estudiar, y no de manera exclusiva por falta de rendimiento, sino asimismo, y eso sí que es preocupante, por falta de medios económicos. Porque su educación clasista va a condenar a un porcentaje tan elevado, que la fractura social puede ser de dimensiones incalculables.
Mientras, el PSOE sigue intentando encontrar sus señas de identidad (dónde demonios las habrá metido), busca fórmulas para acercarse a los que se fueron alejando (casi todos menos los que aún tienen un cargo); Cañete persiste en soltar lindezas (ahora come insectos, se nota que le sientan bien en su oronda anatomía); Maduro debe recurrir a un expediente de modificación de créditos para limpiarle el culo a los venezolanos (con perdón), o si no explíquenme lo de los cincuenta millones de rollos de papel higiénico; la moción de censura en Güímar sigue su curso mientras los socialistas canarios sostienen que se fundamenta en intereses partidistas (chiquito descubrimiento)…
Y aquí sigo yo, con mis opiniones que nadie lee, pero que cubren una necesidad vital, y esto último compensa con creces lo otro. Puede que esta convicción no sea comprendida por los que no me leen pero se alongan al blog para fisgonear. Me lo expliquen.
Concluyo. Hoy lunes se dan a conocer las novedades en torno al puerto del Puerto. Como se siga reduciendo el presupuesto (a partir de 2020 ya veremos) vamos a tener que conformarnos con un muelle de Famobil; en ese sí cabrían grandes cruceros y yates de lujo. Es menester revulsivos ya. Ahora vislumbramos a Ledesma y Brito que caminan hacia El Penitente, y a Cerrillos que transita hacia El Peñón, muestra inequívoca de una ciudad sin rumbo. Hasta mañana.

viernes, 17 de mayo de 2013

1111

Las estadísticas que te ofrece Blogger, por lo que le entendí al tocayo Jesús hace un tiempo en su blog http://creaconlaura.blogspot.com (visítalo, y si eres docente se trata de una obligación), son fiables si tú accedes a tu propio blog y eres uno de los primeros diez visitantes del post correspondiente. De no ser así, no solo corrígeme, estimado amigo, sino que me puedes tirar de las orejas, por torpe, por meterme en esto después de viejo y así, con razón, me critican los entendidos diciéndome que no me lee ni Dios. Bueno, Dios no, pero ellos sí. Cambio angelitos buenos por diablillos del tres al cuarto.
Como uno deja programados sus comentarios en la noche anterior (porque mi hermano me lee temprano), no se levanta a la hora señalada para estar seguro que forma parte de esa primera decena de mirones. Máxime cuando el estado jubiloso te permite echar la sábana hacia atrás cuando te dé la realísima gana. Eso se lo dejo a quienes acechan por si me meto con ellos, entendiendo por tal remitir preguntas de contribuyente respetuoso a las autoridades de las diferentes instituciones. Por lo que la disparidad en las cantidades es bastante notoria y no muy fiable. No obstante, como esto no posee el carácter científico que sí tienen las encuestas de ciertas emisoras locales de radio y televisión (le preguntan a cinco paisanos y multiplican por varias decenas de millar, y sin margen de error), me apetece contarles unas cuantas curiosidades.
Este viernes (17 de mayo de 2013) hacemos la bonita cantidad de 1111 entradas, 1111 artículos de opinión sujetos a las consideraciones de mis incondicionales, y cada vez más numerosos, fisgoneadores (chínchense y rásquense los que se sientan escocidos). Y ni pensar quisiera qué sambenito me colgarían si se enterasen de los ofrecimientos que he tenido últimamente para colaborar en diferentes medios de comunicación (casi todos impresos), sobre todo cuando ciertas redacciones tuvieron conocimiento de mis titulaciones académicas, obtenidas, como harto es sabido, en la compra de unos boletos que adquirí en la tómbola de la fiesta de mi barrio allá por el año de maricastaña (yo lo he oído, ¿tú no?). Los que nacemos con suerte, ya se sabe; y el que nace barrigón, ni aunque lo fajen chiquito. Y ahora que me acuerdo, nadie me ha llamado, aunque solo fuera el mismísimo Paulino, para felicitarme por haber ganado el XIX Concurso de Coplas Canarias Guanapay 2013, que organiza el ayuntamiento de la Villa de Teguise (Lanzarote) por un poema que titulé ‘La mujer del marinero’. Por si no me crees, que de todo hay, pincha en el siguiente enlace: http://www.teguise.es/tema.asp?sec=Noticias&idCont=5310&idTema=17. Chacho, lo mismo me llama José Miguel Pérez a su despacho, nos sacamos una foto y me entrega un presente. Háganle llegar esta misiva porque yo no me atrevo a enviarle un correo electrónico no sea que aquellos se molesten y lo mismo se ponen celosos y les vuelve la perreta.
Desde el 17 de mayo de 2012 (artículo titulado: Hoy nos distendemos) hasta este viernes 17 de mayo de 2013, aparte de haber pasado un año (no me negarán que soy listo), son bastantes (algo más de cincuenta) los artículos de opinión que en Pepillo y Juanillo (I) han recibido más del centenar de visitas. Para no cansarte, y a modo de simple curiosidad, te cito aquellos seis a los que en este lapso más gente se ha alongado, señalándote, además, unas líneas de resumen del contenido de los mismos:
¡Vaya revuelo!, publicado el 14 de marzo de este año, con 447 visitas, en el que se alude al guirigay que se montó en La Caixa (antiguas oficinas de Caja Canarias) con las colas kilométricas para obtener el dinero que ‘regalaban’ los cajeros.
El fiasco de Binter, que vio la luz el 5 de junio de 2012, 394 veces visto, en el que cuento las peripecias de un viaje de regreso desde Fuerteventura, cuando nos hicieron subir hasta en tres aparatos diferentes para poder salir de la isla (casi cierra Los Rodeos).
Fin del mundo, 12 de diciembre de 2012, 339 visitas, donde aparte de la profecía maya de que nos íbamos todos a tomar viento fresco, comento ciertos avatares de los sinuosos caminos por los que transitaba, y transita, el PSOE.
Los Roques años ha, 12 de julio de 2012, 290, una visión retrospectiva de aquellos parajes de la costa realejera, en el barrio de Toscal-Longuera, por los que transcurrieron gran parte de las aventuras ‘marineras’ de la juventud de la época.
Sinvergonzonería en Arona, 29 de diciembre de 2012, 269, la promesa, mediante acuerdo plenario, de destinar la extra navideña de los políticos al Banco de Alimentos, es incumplida tras el cese del anterior alcalde por el nuevo equipo de gobierno en una acción que solo los políticos saben, y se atreven, hacer.
Algo más de la crisis, 14 de septiembre de 2012, 244, análisis de la disparidad de precios en las diferentes gasolineras y el ahorro que te supone llenar el depósito cuando la diferencia de precio puede oscilar en bastantes céntimos en litro.
Insisto, me he limitado a este último año, porque uno lleva en esto desde 2009. Bueno, me jubilé y pegué a escribir boberías. Y sigo.
Se me escapan algunos. Y otros datos, reitero, no son demasiado fiables. No obstante, creo que se llevan la palma los de ‘Clases de religión’ (21-febrero-2012), 1094 visitas, y uno de los dedicados a la figura de Florencio Sosa Acevedo (3-marzo-2012) con 1029. Hasta yo estoy asustado. Menos mal que a estos datos no tienen acceso los de ‘los cuatro gatos’, si no, como al otro Jesús, me vuelven a maltratar.
Sean comedidos este fin de semana, diviértanse pero con moderación porque restan muchos actos en las fiestas del pueblo. Y cuando se vistan de magos, por favor, no hagan el ídem. Cuiden la ropa que vale mucho dinero y no estamos para dispendios.

jueves, 16 de mayo de 2013

Más que nunca

Otro lucimiento de nuestro gobierno autonómico y nuevo derroche de los dineros públicos en un controvertido lema (para el Día de Canarias) que ha vuelto a dejar en ridículo a quienes dicen representarnos. Tras el anuncio, a bombo y platillo, del “más que nunca”, que a mí se me sigue pareciendo a la versión más cutre del leitmotiv de Jaime Marrero (más nunca), se ha montado la enésima carajera esperpéntica, de esas que solo ocurren en estos paraísos atlánticos. Aunque, dijo el gran Willy García, como nos gusta la verbena, la parranda y el tenderete, que viva San Isidro. Oye, ¿será familia el Marrero de la foto del que mencioné antes y por eso…? Se lo preguntaré al tocayo Jesús Farráis, porque lo mismo cuando yo sea portavoz del gobierno le encargo el lema a él, aparte de la dirección de otra ‘gala’ más chachi. Eso, con humor.
Tras sesudos estudios de la empresa a la que se le encargó la búsqueda y captura de la frasecita de marras, hete aquí que han venido a calcar, y ya es casualidad, la que el mismísimo Paulino lució en el último congreso de su propia formación política. Nacional, como la radio. Y arráyate dos millos. Pégaselo, compañero. Echa pa´cá unas perras de chochos. A comer carajacas y a beber vino. No chuches como un javardo, cacho simplón. Ni chiquito fogaje cogió el vinagre. Si un atillo tuviera, te sujetaba, que aburrión desgorrado no vuela nada. Viva Canarias. Que viva.
Como se ha podido comprobar de que a los canarios no les gusta, no nos vamos a estar enfadando: se cambia y ya está. Y el chiquito de El Sauzal (¿dónde estás metido Juan Manuel?) se queda tan pancho. Lo que se había desembolsado por el contrato publicitario, se mete en el cajón o baúl de los recuerdos y tararí que te vi. Con echar las culpas a Madrid, pelillos a la mar. ¿Listas de espera, comedores escolares, señales informativas…?
Pero a continuación de salir (hacia la mitad del informativo –no te rías– de Daswani, que primero van los incendios, accidentes y robos, amén de violaciones y degüellos) Rivero a ponerse farruquito con el aquí no ha pasado nada, aparece el señor Cruz, socialista gomero él, para señalarme que no hay que darle más vueltas. Nos los merecemos, por imbéciles. Nosotros. Ellos también, pero cobran más que tú y yo juntos. A los que hay que darles vueltas, en todo caso, sería a ustedes, como si fueran corchos de botellas de vino (Tempranillo no). ¿A qué punto de indecencia hemos llegado?
Lo del PSOE canario no hay por donde cogerlo. En un contexto político nacional (aquí el calificativo está usado como debe ser, y no con la interpretación coalicionera de nuevo cuño y sálvese quien pueda) como el que se está viviendo, el partido tendría que estar en un nivel tal que las encuestas deberían estarle asignando la mayoría más absoluta que jamás se hubiesen podido imaginar. Pero es tal la ineptitud reinante que el fracaso, o batacazo, es aún mayor que el del PP que nos (des)gobierna en jornadas de los viernes. No sabían nada, iban a pedir explicaciones. Es como si Adolfo fuera a Radio Realejos a reprocharle a Manolo que no le hubiese dicho nada del Himno a Viera. O al revés. ¡Ah!, el inciso: ¿Hay movida en torno al mismo? A un servidor –¿puedo opinar?– no le gustó ese tótum revolútum, no me dijo nada, no me satisfizo.
Los socialistas desconocían que el lema había sido utilizado por CC de manera partidista. ¿Y no habían invitado al evento (ahora todo es evento) a José Miguel? Qué pandilla de inútiles. Y con asesores hasta debajo de las sillas. Claro, están tan entretenidos con frases y fotos del bien quedar en las redes sociales que marginan los quehaceres importantes. Llevan una racha que mejor cierren el chiringuito, dejen pasar un tiempo y vuelta a empezar. ¿Dónde está esa juventud, ese relevo que dé los moquetes en la mesa? Y en Tacoronte ya se cargaron a Carlos Medina. Con un despliegue en los medios (aquello de los trapos sucios pasó a mejor vida) digno de cualquier programa de Telecinco. Qué esperpento. Me permito aconsejar a Miguel Cabrera Pérez-Camacho (a lo que he llegado, a coincidir con sus planteamientos) que amplíe sus referencias al presidente del ejecutivo canario (de cada cinco cosas que dice, cuatro son boberías) a sus socios gubernamentales porque, y a los hechos me remito, juegan idéntico papel o compran los boletos en la misma tómbola.
¿Fueron a la Romería Chica? Yo no, estoy retirado a mis cuarteles de primavera escribiendo boberías para que mis nietos se entretengan cuando vengan tiempos mejores. Les estoy inculcando el que se preparen porque en el futuro los políticos –espero que ellos lo sean– estarán infinitamente mejor cultivados que los de ahora. La crisis actual no es solo económica. O mejor dicho, esta es una consecuencia de la otra.
Bueno, mañana es viernes y concluiremos otra semana. Este jueves hace un año que ‘denuncié’ ciertas actitudes que se siguen reproduciendo, como mentan los lumbreras, al día de hoy. Y a pesar de los correos electrónicos de los políticos, que aún continúan en sus puestos, de que tomarían cartas en el asunto, el particular sigue zanganeando (sinónimo: deambulando) por el éter. Esperaremos pacientemente a 2014 por si compran una baraja nueva. Y también se cumple el primer aniversario de que el urólogo me dijo (palabras textuales): “esto quedó de puta madre”. Él, artífice de la rajada, se alegró, pero yo mucho más. Sean felices.

miércoles, 15 de mayo de 2013

Chanchullos de mi tierra

Ayer fue otro día en el que la agenda venía bien apretada. Y claro, comienzan los dilemas para decantarte por algo. Porque en mi tierra (la canaria, por supuesto) hay demasiado chanchullo. Entendiéndose por tal –diccionario al canto– el manejo ilícito para conseguir un fin, y especialmente para lucrarse. Es lenguaje coloquial y deriva de chancha (no puerca ni cerda). También leí que puede ser lo que se hace de manera ilegal o poco limpia para conseguir un fin o para sacar provecho (Del italiano cianciullare: hacer naderías).
El título lo cogí prestado de cierto digital que nos comentaba los chanchullos de Zerolo, quien fuera alcalde santacrucero y ahora senador de los que van, se sientan, se levantan de cuando en vez para ir al cuarto de baño, disponen de algo denominado privilegios y tras tres días agotadores de aguantar insoportables discursos, retornan a sus hogares (primeras viviendas) a saludar a los parientes más cercanos. Parece que el hombre, amén del afer de Las Teresitas, debe visitar los palacios de justicia para otro asunto bautizado como García Cabrera. Qué apellidos más ilustres para verse involucrados en tan turbios menesteres.
Puede que Pedro Pacheco, aquel alcalde andaluz que tildó de cachondeo a la mismísima que aparece en la portada última de El Jueves (ver ilustración, y a mí que me registren), ha sido condenado por haber enchufado a unos amigos de partido. Pues muy torpe debió ser la actuación porque ejemplos de tal calado existen regados por la geografía patria en todos y cada uno de los ayuntamientos, de cualquier signo político y con independencia del número de habitantes, del presupuesto municipal y de la madre del cordero. Aquí el que menos corre deja en un feo al mismísimo Usain Bolt.
Tremendo susto me llevé en mi sesión informativa diaria esta tarde pasada. Vi escrito “El Zausal”. Son de esas cosas que te tumban pa´tras. Me desestabilicé bastante rato. Parecía un pacto a punto de romperse. ¡Ay, pactos!, para qué los mentaría. Unos los desean en cascada. Otros defienden las particularidades de cada pueblo. Uno, que intenta ser lo más neutral posible, cree que en el fondo es un mero intercambio de los votos de quienes fuimos con toda la ilusión posible a depositarlo en la urna. Juegan con ellos de forma tan alegre que escandaliza.
Lo ocurrido en Güímar es solo un botón más de esta astracanada permanente en la que se ha convertido la política. Ni encuestas, ni sondeos de opinión, ni descenso alarmante del número de militantes, nada de nada. Poco se les importa mientras las componendas permitan acomodos. Tú te quedas con esto y déjame a mí aquello. Y en la próxima cambiamos.
El amigo Rafa Yanes hizo unas declaraciones en rueda de prensa convocada al efecto. Se lamentó porque los populares –socios durante seis años– no le avisaron. Lo cogieron de sopetón (en vulgar, con el culo al aire). Y él entiende que el pacto, firmado en su día con Tita Díaz, ha funcionado. Reprocha el que lo hayan utilizado como moneda de cambio: Si ustedes rompen en Santa Cruz… El Partido (PSOE) lo ha respaldado: todos me han llamado. Me temo, estimado compañero de gremio y de fatigas en la vieja Escuela Normal, que no. Que tu formación política no ha movido un dedo para salvar los muebles. Tu empeño en ir de la mano con los populares, contrariando las directrices regionales, ha servido de excusa para dejarte más solo que la una. Aunque el disenso esgrimido por la que va a ser alcaldesa provoque carcajada, más que risa.
Tu defensa numantina –y nadie soy para discutir aciertos o errores– de una gestión que ha llevado al ayuntamiento a un saneamiento ejemplar, entiendo que contradice tu llamamiento a las otras fuerzas de izquierda (el problema es averiguar dónde está la linde) para hacer un frente común que siga llevando al municipio por la senda de la eficacia. Lo mismo te contestan con un solo vocablo: ¿Ahora?
No esperes milagros. Y ojalá me equivoque. Y de tus compañeros, salvo algunas líneas prefabricadas en Facebook, nada de ilusiones. El País ocultó en la última encuesta que en intención de voto ya fue adelantado por IU. En Canarias, tierra tan dada a chanchullos, salvo los estandartes que restan en contados pueblos, va a acabar en fuerza (qué incongruencia de palabreja) marginal, testimonial. Y llegado ese punto, a pactar con el diablo con tal de tocar… un sueldo a fin de mes.
Son –fueron– los chanchullos de mi tierra. ¿O esperaban otra cosa? La edad me ha enseñado a medir los tiempos. Hasta mañana, que es jueves; si la justicia me deja.