jueves, 24 de diciembre de 2009

Feliz Navidad, maestro

No los tengo olvidados. Y cuando digo maestro, incluyo a todos los docentes. Va mi saludo con tres citas. La primera, unas reflexiones de Quintiliano:
Ante todo, el maestro debe asumir ante sus alumnos una actitud paternal y ha de estar persuadido de que ocupa el lugar de quienes le han confiado a sus hijos. No debe tener vicios, ni debe tolerarlos en los demás. Ha de ser austero, pero no rígido; afable, pero sin otorgar confianzas excesivas, para evitar el ser odiado o despreciado. Debe hablar con frecuencia a los alumnos de la honradez y de la bondad, porque cuanto más les amoneste, menos se verá obligado a castigarlos... No deberá emplear la aspereza al corregir los defectos, y mucho menos ofender, porque el hecho de reprender con resentimiento, casi con odio, aleja a muchos del propósito de estudiar.
La segunda, un fragmento de una información de Las Noticias (Santa Cruz de Tenerife, 1-octubre-1884, año XIV, número 974, página 1)
El maestro de instrucción primaria, ese modesto funcionario que desde el recinto de su escuela prepara el porvenir de las generaciones que han de sucedernos, necesita que le rodee el prestigio y las consideraciones de sus conciudadanos; necesita que su voz y sus saludables consejos sean escuchados en el seno de las familias; necesita inspirar, en una palabra, la más absoluta confianza para que las semillas que siembre en el tierno corazón de la niñez germinen y fructifiquen. ¿Y podrá alcanzarse esto sin darle la conveniente independencia, sin prodigarle las muestras de estimación a que su trascendental destino le hace acreedor?
Y, por último, José Galán Hernández (uno de los tantos presos en la cárcel de Fyffes, 1936, que fue actor protagonista de aquellos viajes sin retorno en una ignominiosa ‘guerra (in)civil’), siendo maestro en Realejo-alto, publica un precioso artículo, titulado “Clarinazos” en Voz del Magisterio Canario (La Orotava, 1-abril-1923, número 24, página 5), del que entresacamos:
¡A ti, Maestro! ¡Noble compañero que en pos de un santo ideal, afrontas los combates que te presentan los ingratos ciudadanos! ¡Valeroso paladín del más sublime torneo! ¡Apóstol infatigable que siembras el pan espiritual en los cerebros de los niños! ¡Sigue siempre adelante! Arrolla con dignidad y valentía, los obstáculos que pongan en tu camino. Y enarbola entusiasta la enseña de nuestro ministerio, llega a la cumbre... Allí te espera una apoteosis de gloria. ¡Ama a los niños! ¡Ama a tus compañeros! ¡Y compadece a tus calumniadores!
Tres épocas, tres momentos, tres pinceladas. Porque la esperanza nos mantiene. Tengan unas muy felices navidades y disfruten de un bien merecido descanso. Deseo que se hace extensivo al resto de ojeadores, entre los que habrá alguno no relacionado, al menos directamente, con el gremio docente.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

No me gusta el viento

Me imagino que como a todos. Sobre todo por la noche estás con el alma en vilo pensando en si se cae esto o aquello. Cualquier ruido en la azotea te deja la oreja cual radar al uso. Además, cada ráfaga parece que suena… ¿para qué contarte? Y en estos días pasados hemos estado harto entretenidos. La rampa que da acceso al garaje de casa debe tener algún encanto especial para hojas y otros restos de plantas. ¿Te pasa lo mismo? Allí, en la esquina de siempre, está el elegante montón. Y la calle, limpia.
Pero con ser molesto el viento meteorológico, me fastidia el viento de Lanzarote. No el que tan bien expresara en verso Fernando Garcíarramos y que nos silba noche y día cuando acudimos a la isla de los volcanes. Más bien el que se ha instalado en prácticamente todas las instituciones públicas de las bellas tierras conejeras. Un viento que hace volar (desaparecer) mucho dinero y que, misteriosamente, aparece en el bolsillo de alguien. Que los mismo está en la cárcel cumpliendo condena, pero qué importa una raya más en la cebra (¿o en el tigre?).
Me molesta el viento que hace en cualquier consistorio de estas islas, porque el murmullo continuado no deja escuchar a los concejales. Tanto que se vuelven incapaces para responder a un simple escrito que tú le hayas podido dirigir en demanda de cualquier recurso. Están sordos como tapias. Y los de Coalición Canaria en Los Realejos, no solamente no oyen, sino que cuando abren la boca meten la extremidad inferior. Peor, cuando lo pasan por escrito a los medios de comunicación, los periodistas se preguntan cómo ha sido posible un cambio tan radical. ¡Ah!, se lo escriben. Vale. Pues que vayan pensando que tienen ahora mismo doce concejales en la oposición. Y con un alcalde que casi nunca está, sólo quedan ocho para alzar la mano y poco más.
Me resulta bastante incómodo el viento. Porque ni siquiera es capaz de levantarse un fisco y barrer el panorama. Creo que es al revés, revuelve aún más el cotarro. Lo que no me llevó la brisa fue el décimo que jugaba con Pancho, Ángel y Lali. ¿Tú crees que así puedo hacerme rico? Tenía otro que jugaba con mi hijo. Te juro que ninguno más. La primitiva semanal, eso sí. Y los dos terminaban en cuatro. No me puedo quejar. Sean felices.

martes, 22 de diciembre de 2009

La rotonda de El Castillo

Tras el paso del temporal de noviembre la rotonda de El Castillo quedó de pena. Y en los momentos de lucidez, a saber, cuando sus abundantes bajas médicas se lo permiten (cada vez está más generalizado el particular por los mentideros políticos), el alcalde de Los Realejos alega que como la competencia es del Cabildo, la suciedad, la mala imagen y la porquería quedarán allí hasta que vengan de la capital a solucionar el problema. Mientras, realejeros y visitantes contemplan una auténtica mugre a la entrada del pueblo. Porque a don Ricardo parece importársele un pimiento lo que acontece en este extremo occidental del Valle de La Orotava. Y don Oswaldo no sabe, o no quiere, o no lo dejan, poner sobre la mesa sus cartas boca arriba. Incluso, si preciso fuere, meterle mano al desaguisado con personal del propio ayuntamiento. Y luego que me multen o me metan a la cárcel por haber hecho algo de fundamento por el bienestar de mis vecinos. Pero debe ser que no está muy acostumbrado.
La entrada de un municipio debe ser el espejo en el que nos miremos con orgullo. En la que no sólo hace falta quitar toda la tierra acumulada, sino adecuar la zona y que muestre un perfil digno de admiración. La villa de Viera (bien lo quieren para otras cosas) tiene en ese lugar espacio suficiente como para hacer algo con mucha más prestancia. Vayan a Gran Canaria y observen cómo están las rotondas. No digamos nada de Lanzarote con las obras de Manrique. Pero aquí en la isla picuda, cuatro palmeras y a escapar. Que me crucifique don Pepito, el pregonero con un concejal de fiestas socialista (me imagino que en 2010 corresponderá el turno a Paulino, único hombre válido para culminar el proceso de independencia. Y me pregunto qué será de Canaria cuando seamos, por fin, un estado africano).
Como las fotos me han estado dando problemas en entradas o comentarios anteriores, los remito a dieciocho mil archivos que pululan por la Red con imágenes bien ilustrativas del 16N. Y también al blog del amigo Pancho Palmero (Tercera Opinión), en el que se da pormenorizada cuenta de las carencias (deficiencias) que presenta el Plan de Defensa contra Avenidas (PDA). Cuidado, no la acepción primera del vocablo (vía ancha y generalmente con árboles a los lados), sino, según mi diccionario, en la segunda (crecida violenta y súbita de un río o de un arroyo; añadan barrancos para Canarias).
Por hoy, ¡que nos toque! Si es gordo, mejor.

lunes, 21 de diciembre de 2009

La inefable Rita

Iba a escribir infumable, ineluctable, ineludible, inestimable, inexcusable, inexplicable… En fin, puede que sea la universidad de la calle, la de Ravelo o la de Tao, pero las vergüenzas ajenas no te las quita nadie. He escuchado con detenimiento un audio en el que nuestra nunca bien ponderada consejera de Turismo hace gala de toda su sapiencia. Disertaba (lo intentaba) sobre los guías turísticos y vino a decir que “el examen no le da el conocimiento, porque ellos tienen que tener además ese conocimiento exhausto de lo que es la preparación en su día a día”. Si lo entrecomillo es por algo. Si pongo ese vocablo en cursiva es por algo. Y a mí que me registren. Escúchenlo como yo.
¿Nos insultan, nos toman el pelo o se ríen miserablemente de nosotros? Uno sostiene que no todos están capacitados (porque pueden acabar ‘exhaustos’) para ser concejales de su pueblo. Y Paulino se empeña en que cualquiera puede ser consejero. De su Gobierno puede que sí, pero yo, como canario, estoy que me escondo debajo de las piedras de cualquier mollero. Tú, Sebastián Ledesma, realejero como yo, y director general de noséqué, ¿no sientes ni un fisquito de pavor al escuchar a tu jefa suprema?
“Yo es que no veo a una persona irresponsable que se ponga delante de un servicio que además tenga que explicar una situación y no lo haga”. Sí, es cierto, lo dijo ella. Y a lo peor por un casual estaba pensando en ella misma. Porque cuando después alude a “otros países de la Comunidad Económica Europea”, te dices para qué el Tratado de la Unión Europea (Maastricht), que en noviembre de 1993 finiquitó la andadura de las anteriores comunidades (Wikipedia al canto).
Márchate, Rita, please, o me vas a dejar exánime. Porque exhausto ya lo estoy. Y si puedes llevarte a Paulino –déjalo fijo en Puerto Calero haciendo estiramientos físicos (del resto sí que está bien estirado)–, doble agradecimiento.
Y a ustedes, estimados sufridores, hasta mañana (que es martes y ni te cases ni te embarques, ¿o eso era antes?).

domingo, 20 de diciembre de 2009

Clara Eugenia Yanes (y 2)

(continuamos)
La Comarca (Icod de los Vinos, 26-noviembre-1922, año IV, número 190, página 2), en su habitual sección de ‘Informaciones telefónicas de los pueblos (Buenavista)’, en un suelto titulado ‘Jubilación’, inserta:
Desde el día 16 del corriente mes se halla vacante la escuela nacional de niñas de este pueblo, por jubilación de la propietaria Doña Clara Eugenia Yanes. Dicha escuela se proveerá, por ahora, con maestra interina y el próximo año 1923, por concurso general de traslado.
El mismo periódico, dirigido y administrado por José Delgado Marrero y Julita Méndez, respectivamente, Voz del Magisterio Canario (La Orotava, 12-septiembre-1923, año I, número 46, páginas 1, 5 y 6. En su número anterior, de 6 de septiembre, páginas 9 y 10, había informado: El próximo día 8, a las 2 de la tarde, tendrá lugar, según dijimos ya, en el pueblo de Buenavista, el homenaje que el Magisterio Canario rinde a la Maestra jubilada doña Clara Eugenia Yánez.), inserta una fotografía de Doña Clara E. Yánez (no hubo unanimidad a la hora de transcribir el apellido), prestigiosa maestra jubilada, a quien rindió homenaje el Magisterio Canario el día 8 del actual, en la Escuela Nacional de niñas de Buenavista.
La crónica del acto fue la siguiente:
“El Magisterio Canario, dando una prueba de compañerismo y de verdadero espíritu amante de enaltecer las virtudes de los buenos Maestros, rindió el día 8 un tributo de admiración a la prestigiosa y anciana Maestra jubilada cuyo nombre encabeza estas líneas, por su constancia y laboriosidad durante los cuarenta y cuatro años que sin interrupción desempeñó la Escuela Nacional de niñas de Buenavista.
A la una de la tarde llegó al mencionado pueblo la Comisión, formada por don José Hernández Quintero, Maestro del Realejo alto; don Agustín C. Herrera, Maestro de la Perdoma; don José Mª. Quinteiro Malvar, Maestro de Teror; don Alfredo Mederos Galán, Maestro de La Longuera; don Augusto Méndez Hernández, y nuestro Director, juntamente con la distinguida compañera del Realejo bajo, Señorita Gregoria Felipe Díaz, acompañada por cuarenta señoritas alumnas, que quisieron sumarse al acto y al mismo tiempo obsequiar a su querida Profesora con motivo de su traslado a esta Villa.
Allí fueron recibidos por la Señora Yánez, sus hijos nuestros queridos compañeros don Robustiano Toledo Torres, doña Fidela Díaz Yánez y Señorita Clara Díaz Yánez, la celosa y joven compañera de Las Ledas en Breña Alta doña María Rodríguez Toledo y su señor esposo y otras varias personas.
A las tres de la tarde dio principio el acto, ocupando la presidencia la homenajeada y los Maestros asistentes con las autoridades y Presidente de la Sociedad local.
Nuestro Director hizo el discurso entrega, el cual después de exponer en brillantes párrafos el objeto de aquel sencillo y hermoso homenaje, descubrió la lápida en medio de una estruendosa salva de aplausos, obsequiándola luego con un artístico diploma, obra de la encantadora Señorita Mercedes García Borges.
La Señora Yánez emocionada leyó unas cuartillas de agradecimiento, haciéndole entrega seguidamente dos de sus ex-alumnas de un precioso ramo de flores y un álbum firmado por todas las que ella había educado, siendo este un rasgo digno de alabanza.
Puso punto final el Sr. Quinteiro que con bastante elocuencia engrandeció la figura de aquella valerosa Maestra que supo encanecerse en la enseñanza con dignidad y prestigio.
Finalizado aquel inolvidable acto, primer que se registra en los anales del Magisterio Canario, fueron expléndidamente [sic] obsequiados todos los asistentes con pastas, vinos, licores y cervezas, haciendo los honores la bella Señorita Clara Díaz Yánez, su hermana doña Fidela y el Sr. Toledo Torres.
El cronista no puede menos de manifestar que la impresión recibida en dicho día fue tan halagadora, que la imagen de aquella anciana Maestra la lleva inculcada en su mente por la bondad, la dulzura y la santidad que revelaba aquel rostro surcado por las arrugas de los años”.
A modo de reflexión: Uno, a veces, se lamenta de no poder disponer de más tiempo. Sí, no se lo tomen a broma. Para sacar a la luz mucho material oculto. Pero estamos en crisis, hermosa palabreja que se ha adherido, cual lapa de risco, al pellejo de los políticos. Al menos me queda este blog y algunos lectores (incluyo los que ejercen docencia en Buenavista y que, a buen seguro, darán norte de estas dos últimas entradas).
Aclaración de la ilustración: El Habilitado era la persona encargada de librar los sueldos y demás emolumentos (bastantes escasos, por cierto) que correspondían a los docentes. En la fotocopia, el voto de doña Clara Eugenia. Obsérvese que la escuela de niñas de Buenavista no disponía aún de modelos de oficios, por lo que debe recurrir al ‘préstamo’ de la de niños.
Para mañana les prometo que volveré a escribir algo de Rita Martín, nuestra eximia consejera de Turismo.

sábado, 19 de diciembre de 2009

Clara Eugenia Yanes (1)


A modo de preámbulo

Puede que los ejemplos de 44 años ejerciendo la docencia en un mismo lugar no abunden. Y como del tiempo de encierro voluntario en la Biblioteca de La Orotava quedan pinceladas que no han visto la luz, mi reconocimiento a la labor ejemplar de una maestra adejera (de nacimiento), pero que hundió raíces e irradió pensamientos y saberes en Buenavista del Norte.

Una maestra ejemplar

En un suplemento del periódico profesional Voz del Magisterio Canario (La Orotava, 17-noviembre-1922, año I, número 6) encontramos sentidas líneas de homenaje a Doña Clara Eugenia Yanes. Que son del siguiente tenor literal:
“Ayer, 16 de Noviembre, cumplió 70 años de edad la prestigiosa Maestra Nacional, honra del Magisterio Canario, que encabeza estas líneas, siendo jubilada por mandato de la Ley.
Nosotros, cumpliendo nuestro programa de tributar homenaje a todos los Maestros que después de su noble y altruista misión educativa, los retiran para que descansen de su fructífero y progresivo trabajo, comenzamos hoy, rindiéndoselo a la compañera distinguida, doña Clara Eugenia Yanes.

Su biografía

Nació esta Maestra en la Villa de Adeje (Tenerife) el 16 de Noviembre de 1852; habiendo estudiado libremente la carrera del Magisterio y bajo la dirección del inolvidable Maestro D. Juan de la Puerta Canseco, con notable aprovechamiento.
Obtuvo el Título de Maestra de 1ª. Enseñanza en la Escuela Normal de la Ciudad de La Laguna en 1877, actuando en las oposiciones celebradas en este mismo año, adjudicándosele la escuela de niñas de Buenavista.
Tomó posesión de ella el año 1878, la que desempeñó sin interrupción durante cuarenta y cuatro años, habiendo la particularidad que fue la primera Maestra Nacional que tuvo Buenavista.
En los exámenes verificados en su escuela hasta su supresión, constituyeron verdaderos éxitos, por los que la Junta local hizo constar en el libro de visitas, encomiásticas felicitaciones.
También figura en dicho libro un juicio altamente grato de la impresión que causó en el ánimo del ex-Gobernador Civil de Canarias, don Antonio Eulate, cuando visitó la referida escuela.
Tiene tres votos de gracias concedidos por los Inspectores de 1ª. Enseñanza; así como varias notas laudatorias y oficio de 15 de Febrero de 1887, de la Junta Provincial de Instrucción pública de Canarias, significándole el agrado con que el Inspector había visto el adelanto de las educandas y los notables métodos empleados en su educación.
Figuró en la primera categoría del Escalafón provincial y en la quinta del general del Magisterio.
Durante diez y seis años proporcionó gratuitamente el local-escuela para bien y progreso de la enseñanza en Buenavista.

Su carácter y cualidades

Doña Clara Eugenia es de carácter bondadoso; atesorando su corazón sentimientos caritativos, siendo su principal cualidad la paciencia, emblema de toda buena maestra; por lo que sus discípulas la amaban y respetaban, tratándola siempre con cariño de madre amorosa. Juntamente con su esposo, don Nicolás Díaz Dorta, maestro también del referido pueblo, educó e instruyó a sus hijas, figurando una de ellas, doña Fidela Díaz Yánez (el baile ortográfico en el apellido fue más que notorio), en el Magisterio como maestra ilustrada y celosa en su alta misión.

Su labor educativa

Fecundo, laborioso e intenso es el trabajo que realizó la Sra. Yanes en el pueblo de Buenavista, durante los cuarenta y cuatro años que estuvo regentando la Escuela Nacional de niñas, sin ser amonestada ni una sola vez, ni haber disfrutado licencia ni un solo día. Tres generaciones han pasado por su fragua, caldeadas y forjadas artísticamente por su ejecución paciente y cultural. Madres, hijas y nietas ven en ella la cinceladora de su perfecta formación intelectual y moral. La aureola que rodea en la actualidad su cabeza cubierta de guedeja de blancura nítida, está engarzada con legítimos brillantes y flores perfumadas con la satisfacción del deber cumplido.

El magisterio tributario

Este pobre homenaje que hoy rinde Voz del Magisterio Canario a esta anciana y eximia maestra jubilada, es poco, por los grandes méritos que contrajo en su larga vida dedicada a la tarea de la enseñanza. Cuarenta y cuatro años sin variar de escuela; esclava de su obligación; firme en su laborar continuo sin interrumpir un solo día la clase, son laureles más que suficientes para que el Magisterio Canario, admirador de los grandes maestros, rinda también en su día un tributo de simpatía y alabanza a la Sra. Yanes.
Este periódico, interpretando en ese ideal el sentir unánime de todos los compañeros del Archipiélago, abre una suscripción para costear una lápida perpetuadora de la actuación en la Escuela de Buenavista de la mencionada maestra, con el fin de colocarla en el salón-escuela, después de la autorización ministerial debida y con la ostentación necesaria.
Reciba la excelsa maestra nuestro homenaje sincero y nuestra más grande admiración por su obra, por su constancia, por su celo y laboriosidad”.
(continuaremos)

viernes, 18 de diciembre de 2009

11 del 11 del 11 (y 3)

(Continuamos)
“Por esas creencias rechazó hace días dos mociones presentadas en sesión por los Sres. Carrillo y Torrents, aceptadas por todos los ediles de la mayoría, impidiendo la discusión sin permitir siquiera la lectura de las referidas mociones que mandó entregar a los firmantes, privándolos hasta del derecho de petición y defensa […].
Cree que puede llamar á su casa á los propietarios é industriales para mandarles votar determinada candidatura en las elecciones que se avecinan, amenazándoles con repartirles enormes contribuciones é impuestos si no le obedecen.
Cree que es lícita igual imposición á los empleados del Ayuntamiento y á los trabajadores de las obras en construcción, previniéndoles que en caso de no complacerle, dejará cesantes á los primeros y sin trabajo á los segundos; cree que no es más que el uso de un derecho la destitución del cabo de consumos D. Tomás Hernández González, verificada el día veinte y cinco del corriente por haberle dicho que en las próximas elecciones votaría con arreglo á su conciencia, sin admitir imposiciones de ninguna autoridad; cree tiene atribuciones para imponer, como impuso, una multa al artista Sr. Brochado cuando desde el excenario (sic) pidió favor al público al creerse agredido, y para apoderarse en el acto del dinero de la taquilla sin notificación, requerimiento, proceso ni defensa […].
Tales atropellos y coacciones electorales, Excmo. Sr. Gobernador, no se habían presenciado jamás en este Puerto, donde las luchas políticas revestían cierto carácter caballeresco, revelando cultura social y respeto á la Ley y á las personas, sin llegar nunca á la imposición y á la amenaza, mucho menos de parte de las autoridades llamadas á dar ejemplo de moralidad y sensatez. Ha sido preciso el encumbramiento casual de este endiosado Sr. Arroyo para cambiar por completo el modo de ser político y social de esta población, y como dicho Sr. fué nombrado por el artículo 29 de la Ley Maura, que según eminentes jurisconsultos, es la negación del sufragio, y como desempeña el cargo de Alcalde por medio de una votación amañada é ilegal, el pueblo no le guarda ni puede guardarle las consideraciones que merecen los elegidos por el voto popular, clasificándole de intruso como nuestros padres clasificaban por los años 1808 á 1812 á un Rey impuesto por la violencia y la fuerza.
Y lo que más indigna Excelentísimo señor, lo que más subleva el ánimo es que para intimidar á sus adversarios y alentar á los electores indecisos, insinúe el Sr. Arroyo y sus secuaces que cuentan con el decidido apoyo de V.E., asegurando que aprobará todas sus resoluciones y decretos, legales ó extralegales […]”.
Espero no haberles cansado en demasía. Lo del carácter caballeresco que se atribuye a la política en Puerto de la Cruz, sería cuestión de que se retomase ahora mismo. La justicia nos trae también en la actualidad ejemplos que nos dejan ciertas dudas. Y los tribunales dictan sentencias que ponen en solfa el quehacer político. Máxime cuando ni siquiera tenemos claro hasta dónde debemos respetar la presunción de inocencia. Que según doctrina de nuestro bien amado presidente autonómico, debe ser hasta que ya no existan más posibilidades de recurrir a instancias superiores. Así que, merced a la lentitud con la que se resuelven los casos de recursos, al diputado gomero le restan aún unas cuantas legislaturas más. Las mismas, mes arriba, mes abajo, que quedan para el regreso de Juan Fernando tras el periplo europeo, porque la jaula de grillos que es el PSOE canario seguirá haciendo bueno el pacto CC-PP per sécula seculórum. Pero esto es harina de otro costal, y cada cosa en su momento.
Hasta la próxima.

jueves, 17 de diciembre de 2009

11 del 11 del 11 (2)

(Continuamos)
Los señores concejales, en su larguísima comunicación, seguían argumentando:
“Como en los últimos meses se llevase á cabo obras de la mayor importancia, acordadas por la Corporación municipal, en que se invertían miles de duros, sin que se pusiesen al público en el paraje de costumbre (esquina de la calle de San Juan) copia de las cuentas de gastos semanales, con separación del personal y material, según desde tiempo inmemorial lo verificaban otros Alcaldes, ignorando el pueblo con esa ocultación el modo y forma de la inversión del caudal procomunal, acordó el Cabildo en treinta de Septiembre último nombrar Inspector de los trabajadores, con obligación de pasarles lista diaria, al vecino D. Amaro Riverol y Briganty, persona de toda confianza de la Corporación y del vecindario, quien debía poner su conformidad en las cuentas semanales formuladas por los capataces, sin que pudieran pagarse faltando ese requisito; más el Sr. Arroyo á modo de autócrata, como siempre, suspendió también el acuerdo, fundándose en que ese empleado era para él innecesario, dando lugar con tal resolución á que se sospeche por algunos que teme la inspección de las cuentas por el señor Riverol […].
Al tratarse del nombramiento de un cañero, encargado de la vigilancia del acueducto que conduce las aguas del abasto público, usurpó el Sr. Arroyo las facultades del Ayuntamiento, designando para ese cargo a D. José Gallegos, contra la voluntad de los Concejales de la mayoría, que propusieron a D. Isidro Pérez de León, fundando tan arbitraria resolución en que si bien ese funcionario no usaba ni tenía para que usar armas, podría llevarlas cuando a él como Alcalde se le antojara; y que en ese supuesto, desde luego y preventivamente hacía el nombramiento prescindiendo del Ayuntamiento y de la mayoría y minoría de los Concejales. Con tales teorías y supuestos, cualquier día el desbordado Sr. Arroyo decreta armar de sable y revólver al Secretario del Ayuntamiento, al Depositario y demás empleados para nombrarlos luego á su gusto, usurpando ese derecho á los Concejales”.
Lo que viene seguidamente, me recordó lo acontecido en Italia, hace unos días, con la agresión sufrida por su primer ministro. Comprueben:
“Es ya imposible, Excmo. Sr. Gobernador, soportar el despotismo de un Alcalde que viola la Ley, vulnera del derecho de los Regidores, á quienes á veces insulta discutiendo desde la Presidencia imponiendo silencio y despojando de sus atribuciones á la Corporación. Hemos tenido hasta hoy una paciencia digna de Job, no por falta de virilidad y energía, si no por sospechar que se nos provoca intencionalmente para llevarnos á actos de violencia en plena sesión, á fin de conseguir una nueva suspensión y proceso de la mayoría para luego campear como amo y señor del Ayuntamiento con Concejales interinos de su predilección. Hay quien crea que tendría gusto en ser agredido y abofeteado con tal de obtener aquel resultado”.
Aclaran los concejales que el artículo 169 de la Ley municipal faculta al alcalde para suspender acuerdos en tres situaciones: por recaer en asuntos que la propia ley no contempla como de su competencia, por delincuencia, y porque peligre el orden público o se perjudiquen los intereses generales.
“Sin embargo, los acuerdos suspendidos por el Sr. Arroyo no se hallan en ninguno de esos tres casos, pues todos son competencia del Ayuntamiento, no entrañan delincuencia, y en lugar de perjudicar, favorecen los intereses públicos que pueden menoscabarse, y mucho, con las suspensiones decretadas.
En cuanto al orden público puede asegurarse que no se alterará nunca en este pacífico y morigerado vecindario, cuando ha soportado pacientemente un dictador municipal…”.
(continuaremos)

miércoles, 16 de diciembre de 2009

11 del 11 del 11 (1)

Pues sí, fue el 11 de noviembre de 1911 cuando el periódico de intereses generales El Teide, editado en Puerto de la Cruz (C/ Iriarte, 40), tal y como indicábamos hace unos días, se hizo eco del malestar existente en el ayuntamiento. En ese número 330 da amplia información de una comunicación al Gobernador Civil por parte de los señores concejales (D. Felipe Machado del Hoyo, D. Melchor Luz Lima, D. Adolfo Pérez Carballo, D. Agustín Estrada Madan, D. Andrés Torrents Solá, D. Marcos Baeza Carrillo, D. Pedro Cruzart Espinosa, D. Vicente Cartaya Cairós y D. Juan Carrillo Carrillo) y de las dos mociones que habían presentado para su debate en el Consistorio. Pero el periódico, a modo de preámbulo, editorializa, entre otras ‘lindezas’, lo siguiente (respetamos redacción y ortografía originales):
“Lo que no podemos disimular es el enojo que se apodera de nuestro ánimo ante atrevimientos inconsebibles. La claque que rodea al señor Arroyo llega en su osadía á proponer apuestas de uno contra ciento, de que sea cual fuese el resultado de la próxima lucha electoral, aquel burgués desempeñará el cargo de Alcalde mientras sea Gobernador de Canarias el General Eulate, dando á entender con sus reticencias, que tienen prisionera la voluntad de aquella Autoridad con los obsequios que le han prodigado en los Hoteles de este Puerto. A pesar de la riqueza de nuestro idioma no encontramos palabras con que expresar la indignación que nos producen semejantes calumnias, y apena nuestro ánimo llenándonos de tristeza, considerar que el respetable nombre del valiente marino, honra de la patria, del héroe que en Santiago de Cuba desde el puente del Vizcaya admiró hasta á sus enemigos, sea traido y llevado sin miramientos por ambiciosos é insignificantes politiqueros, uniéndolo al recuerdo de miserables viandas y de unas cuantas botellas de champagne compradas con el dinero de comerciantes puestos á escote […].
Tales aseveraciones, aunque no sean más que brabatas, indican un plan preconcevido de ilegalidades y amaños. ¿Qué se proponen esos aventureros políticos? ¿Echarán papeletas á granel en las urnas como en Mayo de 1899, ó tratarán de alterar el orden público para cerrar el Colegio culpando luego a sus inofensivos contrarios? Creemos que se equivocan miserablemente si cuentan con el auxilio de la fuerza armada que han pedido para llevar á cabo los planes que meditan […], pues la Benemérita no se prestará jamás á secundar maldades é injusticias. De todos modos, los republicanos y liberales deben estar prevenidos llevando á los Colegios Notarios que den fé de lo que allí pase, porque ya conocemos la audacia de sus adversarios, capaces de preparar y ejecutar alguna maniobra no santa”.
Del comunicado de los ediles al Gobernador destacamos:
“Que las disposiciones arbitrarias de D. José de Arroyo, como Alcalde de este Puerto, nos obligan á recabar el auxilio de la superior autoridad de V.E. para poner coto á demasías y extralimitaciones que, de continuar, harán imposible la Administración municipal y menoscabarán los más rudimentarios principios de nuestra vida colectiva.
[…] Por ahora solamente hace al caso consignar que el Sr. Arroyo desde el puesto que ocupa no se propone otra cosa que rehabilitar á los fracasados de mil ochocientos noventa y nueve, llevando á cabo una política encaminada á sacar odios hereditarios y establecer una soberanía que entregue este pueblo, atado de pies y manos, á una sola familia y á una oligarquía sin ideales políticos.
[…] El primer acto de aquel Sr. al posecionarse del cargo de Alcalde (obtenido por un procedimiento ilegal, pues los Ayuntamientos interinos no pueden designar ese cargo por medio de votación, porque corresponde al Concejal de mayor número de votos en elección popular) fue destituir empleados tan probos como los Fieles de consumos D. Julián Casañas, D. Joaquín Márquez y D. Pedro César Carrillo, sustituyéndolos con otros á quienes querían pagar servicios electorales, alentándolos para que siguieran prestándolos. Repuesto el Ayuntamiento por R.O. de diez y siete de Noviembre de mil novecientos diez, acordó, como era natural, destituir á los Fieles nombrados por los Concejales interinos, sustituyéndolos con los anteriores, honrados padres de familia víctimas del odio del Sr. Arroyo; pero este con inaudita despreocupación suspendió el acuerdo y tuvo la inconcebible audacia de fundar la suspensión en el temor de que se alterase el orden público”.
(continuaremos)

martes, 15 de diciembre de 2009

Clara Marrero

Clara Marrero, portuense, maestra, directora de la Escuela Normal, da nombre a un centro educativo sito en La Vera. Y en este husmear en la prensa de años idos uno se encuentra:
Diario del Norte (Puerto de la Cruz, 6-enero-1908, año I, número 1, página 2), el mismo día en que hace su presentación, nos ofrece una sentida necrológica. Ésta es su transcripción literal:
“El 31 de Diciembre (1907) dejó de existir esta afable y querida señorita. En la plenitud de la vida, cuando todo le sonreía, cuando un horizonte refulgente guiaba sus pasos, la muerte, implacable, destruyó para siempre el noble ideal que acariciaba su fecunda inteligencia; la infausta noticia cundió rápidamente en este Puerto, y el sentimiento general se manifestó con ostensibles caracteres.
Su biografía honra su memoria. Nació la señorita Clara Marrero el nueve de Mayo de 1880; contaba, pues, 27 años de edad.
Desde la infancia demostró talento claro y amor al estudio; siguió la carrera del Magisterio; en 20 de Mayo de 1898, tomó el título de Maestra superior con la calificación de sobresaliente en los ejercicios de reválida; seguidamente se puso al frente de la escuela gratuita establecida en esta población y obtuvo durante cuatro años que la regentó brillantes resultados en los exámenes; al instalarse la Escuela Normal elemental de Maestras en la ciudad de La Laguna, fue nombrada Profesora provisional, de cuyo cargo se posesionó en 20 de Octubre de 1902, y desempeñó en ella la secretaría además de su cátedra; posteriormente, un año después, en 17 de Octubre de 1903, se le confirió la Dirección del establecimiento, que ejerció con tacto exquisito, haciendo observar la más escrupulosa disciplina, y valiéndole su gestión el aplauso de todos los amantes de la enseñanza.
Elevado aquel Centro docente a la categoría de superior, sus relevantes condiciones y aptitudes le conquistaron el honor de que el Gobierno la designara de nuevo para Directora, alto cargo del que se posesionó en 30 de Septiembre último y que desempeñó bien y fielmente. En la organización material de la Escuela demostró continuamente atildada exquisitez, hasta el punto de sacrificar un peculio particular para su mayor ilustre.
Sus discípulas la veneraban porque el método de enseñanza que tenía dotado era fructífero y porque el bondadoso carácter que la distinguía la hacía simpática á cuantos compartían con ella. Era modelo de virtud, cariñosa hija, amante hermana, y, en una palabra, digno ejemplar de mujer fiel cumplidora del deber, que, aparentemente, supo imponer su bondad á los sufrimientos morales que la venalidad de la intriga venía minando su existencia. Hasta el último momento conservó su inteligencia, dando pruebas de extraordinaria resignación.
Hondo pesar ha producido su muerte; sirva esto de lenitivo á su atribulada familia en tan acerbo dolor, y aunque hay heridas que laceran el corazón y no se cicatrizan fácilmente, reciban sus deudos, su afligido padre, don Agustín Marrero, y su tío, D. Pablo Marrero, conocido profesor de instrucción primaria de este Puerto, la expresión sincera de nuestra condolencia.
La conducción del cadáver al Cementerio de la malograda señorita, se verificó el día primero del actual mes á las once de la mañana; fue una imponente manifestación de duelo de todas las clases sociales; sobre el féretro, llevado á hombros por incontables jóvenes y viejos, lucían infinidad de lujosas coronas, entre las que recordamos, una de sus padres, otra de sus tíos, una de la señora doña Luisa Wildpret y la del Claustro de la Escuela Normal, que si bien no tuvo representación oficial en el fúnebre acto, envió aquella ofrenda á la memoria de su Directora; las cintas las llevaban amigos íntimos de la familia; el cortejo iba presidido por el Sr. Alcalde, don Melchor Luz, el padre, tío y parientes de la finada, concejales del Ayuntamiento, presidentes de las sociedades y otras personas con carácter oficial”.
De ella escribió “Alfredo Fuentes” (seudónimo de Francisco Dorta y Jacinto del Castillo) en su libro “Mujeres del Valle” (Orotava. Imprenta Herreros. 1922):
De espíritu liberal y amplio, de inteligencia sin prejuicios, cultivada con esmero, de sólida y brillante ilustración, tiende la vista hacia lo futuro y cree que la mujer, en vez de humillarse y aceptar eternamente el papel secundario y ornamental que se le ha conferido en la sociedad gastada, pueril y frívola de nuestros días, debe romper el círculo de hielo y hierro que la rodea, lanzándose a nuevas orientaciones que la hagan sobresalir entre la ignorancia con barniz y ser respetada y elevada por la cultura ganada con noble anhelo y en trabajo verdadero y positivo, que no es el ligero mariposear de las señoritas sin apego al estudio.
(...) Clara Marrero pagó en edad temprana su tributo a la muerte, precisamente cuando el porvenir se le presentaba sonriente y lisonjero; cuando iba en camino de escalar los más altos puestos del Magisterio español por su trabajo y por su ilustración.
El ya citado periódico (Diario del Norte, Puerto de la Cruz, 7-febrero-1908, año I, número 29, página 2), copia de El Magisterio Canario la información de la celebración en la Parroquia de la Concepción lagunera de una solemne función religiosa. Que había sido anunciada el día anterior a la celebración (Diario del Norte, Puerto de la Cruz, 29-enero-1908, año I, número 21, página 2). Y que, antes de copiar la reseña precitada, informa de que los funerales celebrados en aquella parroquia, en sufragio de la que fue digna Directora de la Escuela Normal Superior de Maestras, Srta. Clara Marrero, hija de este Puerto, estuvieron muy concurridos (Diario del Norte, Puerto de la Cruz, 31-enero-1908, año I, número 23, página 2).
En el centro de la nave mayor se había levantado severo catafalco, y la misa de requiem, con vestuario, fue cantada con toda solemnidad. Durante el acto, en otros altares celebrábanse misas rezadas en sufragio del alma de la infortunada profesora de la Normal.
Entre la concurrencia, bastante numerosa, prueba inequívoca de las generales simpatías con que contaba la Srta. Clara Marrero, el Director del Instituto provincial y técnico (Adolfo Cabrera Pinto) y el Claustro de la Escuela Normal, al frente del cual se hallaba su Directora, Doña Laura Guillén de la Puerta, y las profesoras Dª. Amalia y Dª. Cecilia Rivas y Dª. Dolores Martín.
Descanse en paz la finada y reiteramos á su apreciable familia nuestro sentido pésame.
Se le tributa sentido recuerdo en el acto de apertura del curso 1908-1909 en la Escuela Normal superior de maestras de La Laguna, según se contiene en la información del periódico santacrucero La Opinión (Santa Cruz de Tenerife, 5-octubre-1908, número 4.835, página 2), copiada del lagunero Noticiero Canario.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Periodismo de hace un siglo

Esta entrada de hoy quiero ‘dedicársela’ a mi amigo Salvador García Llanos. Porque de Puerto de la Cruz (del Puerto) él sabe mucho más que yo. Y seguro que los lugares que se mentan le son harto conocidos. Asimismo, un consejo a los ‘profes’ en activo: no se agobien, hace cien años también había chicos atravesados. La cabecera que aparece en la ilustración (1911) no se corresponde al año que se alude en el comentario (1908), pero nos vale de referencia. Por cierto, en este ejemplar de la fotocopia, los concejales D. Felipe Machado del Hoyo, D. Melchor Luz Lima, D. Adolfo Pérez Carballo, D. Agustín Estrada Madan, D. Andrés Torrents Solá, D. Marcos Baeza Carrillo, D. Pedro Cruzart Espinosa, D. Vicente Cartaya Cairós y D. Juan Carrillo Carrillo, elevan escrito al Gobernador Civil de la provincia (General Eulate), reclamando su intervención y adjuntando el contenido de dos mociones que elevan al pleno del ayuntamiento, ante las disposiciones arbitrarias que adopta D. José de Arroyo, “alcalde de este Puerto” (si les parece, ampliaremos en otra ocasión. Se dicen –se escriben– cosas interesantes).
Lo normal era que los periódicos de aquel entonces requiriesen la intervención de la guardia municipal para frenar los desmanes de chiquillos y jóvenes que provocaban destrozos en plazas y jardines u originaban escándalos en horas intempestivas. Aunque no siempre el resultado era positivo. Comprobémoslo en este suelto de “Información”, del portuense El Teide (Puerto de la Cruz, 9-septiembre-1908, año I, número 2, página 3):
Persona que nos merece buen concepto nos dice que el lunes á la noche en la plaza de Pérez Galdós, un joven de corta edad desafiaba á pelear á otro mayor, y que un policía que se hallaba por aquellas inmediaciones para evitar que la cosa tomara importancia, y al ordenar al joven que se marchara, éste se negó á ello, y entonces el guardia quiso conducirlo á la prevención.
El joven le siguió, pero una multitud de muchachos de su edad, sin el guardia darse cuenta de ello, intentó agredir al policía. Cuando éste lo creyó oportuno dio libertad al joven, y esto le valió para no verse en un conflicto con la pollería irreflexiva.
Señor Alcalde, si la guardia municipal no ha de tener fuerza moral bastante para imponerse en casos semejantes, más vale que no exista.
Esta otra solicitud o demanda de intervención policial no es para un aspecto muy agradable: Llamamos la atención de la policía para que vigile secretamente la fuente de Martiánez, á ver si puede pescar al cochino que tiene el atrevimiento de ir á hacer sus necesidades en aquel sitio (El Teide, Puerto de la Cruz, 31-octubre-1908, año I, número 17, página 2)
Y del mismo periódico, otros ejemplos:
Tenemos entendido que todas las noches se promueven fuertes alborotos por los chicuelos en la plaza de Mequinez, por lo cual llamamos la atención de la policía. (El Teide, Puerto de la Cruz, 7-noviembre-1908, año I, número 19, página 3)
Varios vecinos de la calle Pérez Zamora, personas que nos merecen el más elevado concepto, se han acercado á nuestra redacción para rogarnos llamemos la atención del señor Alcalde y del jefe de la policía sobre los grandes escándalos que allí arman los niños de ambos sexos, profiriendo palabras deshonestas é insultando á cuantos por allí transitan. Algo semejante, si no peor, acontece en la calle de Mequinez y otras de aquel barrio, á todo lo cual es preciso poner término prontamente en bien de la cultura de este Puerto. (El Teide, Puerto de la Cruz, 14-noviembre-1908, año I, número 21, página 3)
¿No se podría evitar que los niños anden jugando en nuestras calles en las horas de escuela? Creemos que sí y que los padres de familia y las autoridades deben ponerlo por obra. (El Teide, Puerto de la Cruz, 14-noviembre-1908, año I, número 21, página 3)
Es conveniente que por quien corresponda se ordene que por el muelle ó sus inmediaciones se encuentre siempre un guardia municipal, á fin de evitar que penetren allí los niños, pues el día menos pensado puede ocurrir alguna desgracia. (El Teide, Puerto de la Cruz, 14-noviembre-1908, año I, número 21, página 3)
Dícennos que en el barrio de San Felipe, allá por la calle de Mazaroco y otras suelen producirse frecuentes escandaleras, por lo cual llamamos la atención de la policía. (El Teide, Puerto de la Cruz, 2-diciembre-1908, año I, número 26, página 3)

domingo, 13 de diciembre de 2009

Paisaje conejero

Lo de Lanzarote no tiene nombre. Ni apellidos. Creo que tampoco solución. La clase política –lo de clase va a posta– parece regirse por unos derroteros tan extraños que de un pueblo a otro pueden significar la noche y el día, el haz y el envés, la cara y la cruz (pile ou face). El espectáculo que nos vienen ofreciendo los diferentes grupos, es digno de enmarcar. Merecen sus actores ser conducidos a las Montañas del Fuego, al Islote de Hilario, más concretamente, y ser depositados con sumo cuidado en los recovecos para que se vayan ‘dorando’ poco a poco. No, ensartarlos no, que no llega a tanto mi crueldad. Aunque, a decir verdad, medio pollos sí que son.
Hace bien poco podías verlos a todos juntos en Mancha Blanca rogando a la Virgen de los Dolores que se produjeran hechos milagrosos, a saber, más que dolores, partos de esta guisa. Porque mira tú que hay que ser retorcido para llegar a estos extremos. Está haciendo buena falta otra erupción volcánica. Que no expulse, sino que barra tanta escoria. Que los vaya dejando en cada cruce, cual escultura manriqueña, y, a ser posible, que el abundante viento los menee un fisco. Lo malo es que no van a producir energías limpias.
El Cabildo es fruta apetecible. ¿Por qué será? Los ayuntamientos de Arrecife, Tías, San Bartolomé, Teguise, Yaiza (¿se salvan de la quema Tinajo y Haría o, a lo peor, no?) fluctúan que es un disgusto contemplarlos. Se mueven cual palmeras datileras. No hay zoco que los proteja. Imputados y pringados, a punta pala. Tenemos la impresión de que en Tahíche no hay centro penitenciario. Más bien, una escuela de ciencias políticas de altos vuelos.
La isla de los volcanes. Lava y salitre, jable y natero. De un lado. Corrupción y navajeo. Blanqueos (que no de blancos caseríos) y chamusquinas (que no de paisajes quemados). Del otro. Se espera con impaciencia la primera tesis doctoral que trate en profundidad tan peculiar temática. De vergüenza. Menudos cangrejos, que no jameítos.
Lo mismo mañana lunes comenzamos la semana con mayor alegría.

sábado, 12 de diciembre de 2009

Deportistas de elite

Nos sentamos ante el televisor y disfrutamos encantados con nuestros bien hallados y mejor ponderados deportistas de elite. Aclaración al canto: dice mi diccionario –bien trabaja el pobre– que esta es la pronunciación correcta, aunque reconoce estar muy extendida la esdrújula élite. Y alegan ellos –los deportistas mentados– que representan a España –qué bien quedan– en la competición tal o cual. Lo que ignoramos los contribuyentes de turno es que más de uno –y más de dos– han fijado su residencia en cualquier país (paraíso fiscal) para eludir el pago de los siempre odiosos y molestos impuestos. Mientras tú y yo acudimos cada año, allá por mayo cuando hace la calor, a dejarle a Hacienda el famoso canon del IRPF.
El Tribunal Supremo acaba de desestimar el recurso presentado por Arantxa Sánchez Vicario contra la sentencia de la Audiencia Nacional que la condenaba al abono de 3.487.216,50 euros por las declaraciones de la renta desde 1989 a 1993. Y basa su dictamen en que la supuesta residencia alegada por la extenista (Andorra) no era tal, pues no basta con la intención (sentimental), sino que hay que concretarla (material). Y lo más que la susodicha hacía era lucir su palmito en un hermoso coche matriculado en el minúsculo país pirenaico.
Te asalta la duda permanente y te preguntas cuántos más estarán metidos en el cotarro. Cómo será ese sórdido mundo que deberá hallarse tras eso denominado fútbol profesional (pon tú los nombres). Donde se pone el grito en el cielo cuando se pretende modificar la escala de retenciones en función del dinero ingresado. Si a mí me estaban descontando hasta el otro día más del veinte por ciento por un sueldo de maestrito de toda la vida, entre los jugadores del Madrid y del Barça tendríamos para hacer cientos de campos de fútbol por toda la geografía española y sacar jugadores a porrillo.
Cuando en julio contemplo las duras etapas del Tour de Francia, en las que los ciclistas realizan hazañas increíbles, cierro los ojos, me acuerdo de las payasadas y niñerías (por no escribir golferías) de Guti –mero ejemplo–, y me entran tremendas ganas de llorar. Para consolarme a mí mismo mismamente, dígome para mis interiores íntimos de adentro: Jesús, te estás poniendo viejo, te saltan las lágrimas por un quítame allá esas pajas.
Queden ustedes Inmensamente Regocijados, Por Favor. No se depriman, porque todavía queda medio año para la cita mayera. A disfrutar mientras tanto.

viernes, 11 de diciembre de 2009

Absentismo laboral

Tras la última reunión del Consejo de Gobierno (pasado martes), el portavoz de tan selecto grupo de canarios ilustres vino a manifestar que el “absentismo laboral sin justificar de los funcionarios en la administración pública se cifra en un 15%”. Quiero imaginarme que Paulino Rivero, José Manuel Soria, José Miguel Ruano… se hallan en situación de ‘servicios especiales’, porque, eso me han dicho, también son funcionarios. Bueno, Paulino lo fue un fisquito arriba en Ravelo, luego bajó al pueblo (al ayuntamiento) y comenzó una meteórica ascensión (no a la escuela) cuya meta está aún por descubrir.
Hago cuentas: si en Canarias hay, por ejemplo, 25.000 funcionarios, significa que 3.750 de ellos no acuden a trabajar, y nadie, absolutamente nadie, les pide explicaciones. Porque faltar al curro exigirá al susodicho alegar algo. Vamos, digo yo. El Reglamento Orgánico de Centros (ROC), del que algo conozco por razones obvias hasta hace escasos meses, contempla un régimen disciplinario en el que se tipifican faltas leves, graves y muy graves. Y los directores de los centros docentes deben remitir cada mes la relación de profesores, con indicación expresa de cómo transcurrió su asistencia. Exactamente igual que se hace con el alumnado, ni más ni menos.
Si ayer comenté que a este paso sobran los políticos y que pueden ser perfectamente sustituidos por empresas con buenos gerentes al frente, hoy ya no sé qué pensar. La torpeza de quienes nos dirigen ha llegado a tal extremo, que toda explicación que pretenda darse o buscarse va más allá de lo que en cualquier otra faceta pueda considerarse lógica. Entre indemnizaciones millonarias (en euros), las campañas de Rita, las componendas conejeras, las demandas judiciales sorianas, la descatalogación de especies… ¡Idea! ¿No es una especie o casta eso denominado clase política? Me temo que no. Sería algo así como pretender que lo ilógico se rija por criterios normales. Y no podemos olvidar que estamos jugando con palabras mayores, con sujetos anormales, no guiados por los cánones que pautan los comportamientos de los mortales comunes y corrientes. Ellos son, llana y simplemente, inmortales: dioses.
Como compruebo que el Consejo Escolar de Canarias es el órgano con más cambios en esta todavía comunidad dependiente de la metrópoli (ver cualquier BOC al uso), propongo miembros con experiencia y con tiempo para la dedicación casi exclusiva. ¿Lo cogiste, Milagros, o te lo explico con una metáfora, símil o comparación? Háganle, please, llegar mi ‘localizador uniforme de recursos’. Va a ser que no.
Saludos cordiales.

jueves, 10 de diciembre de 2009

Presupuestos 2010

Estaba descansando unos días en La Gomera (el pájaro de la fotografía, un pinzón vulgar, puede dar fe), cuando un amigo me indica que en el ayuntamiento de mi pueblo se habían puesto de acuerdo los tres grupos políticos para la aprobación de los presupuestos de 2010. Y de vuelta a casa, tras echar una visual a la prensa atrasada y leer un correo que gentilmente me remite una de las tres fuerzas (políticas) del consistorio, compruebo que es verdad. A Coalición Canaria no le ha quedado más remedio que aceptar las sugerencias de PSOE y PP para sacar adelante el principal acto en la gestión municipal.
No sólo me alegro que ello sea así, sino que acaban de darnos la razón a todos los que apostamos en 2007 porque existiese un gobierno en minoría que buscase los apoyos necesarios para sacar adelante su trabajo. Lo malo es que echamos en falta otros detalles que indiquen al contribuyente que los políticos también están por la labor de superar esta crisis en la que aún estamos sumergidos. Somos varios millares los que hubiésemos estado dispuestos a congelarnos nuestro sueldo durante cuatro años (como ellos). Pero como no tuvimos la oportunidad de asignarnos suculentos emolumentos cuando accedimos a nuestro puesto de trabajo (como ellos), jamás tendremos la oportunidad de disfrutar de tremendo privilegio. Así que seguiremos con nuestro pobre incremento, en la firme convicción de que jamás alcanzaremos las cotas de quienes nos representan.
Pero hay algo bastante simple y fácil de realizar, pero no se atisban movimientos. Más bien, al contrario. No hay manera de reducir los puestos o cargos de confianza. El alcalde santacrucero, por ejemplo, los incrementa. Y eso me lleva a pensar que los políticos de ahora no son como los de hace más bien poco. Uno recuerda aquellos duros primeros años de la democracia, sin gabinetes de nada, sin asesores, sin secretarios particulares, en los que las corporaciones sacaron adelante unas naves semihundidas, sin un duro en las arcas, pero como una ilusión digna del mayor encomio.
Dicen que la política se ha profesionalizado. Pues yo sostengo que se ha idiotizado. Porque para que un alcalde tenga varias decenas de personas a su alrededor que le indiquen y señalen qué y qué no debe hacer, mejor crear otra empresa municipal. Si a mí me dicen hoy que para ser regidor de la cosa pública debo tener treinta asesores (algunos tienen muchísimos más), es que soy un inepto de mucho cuidado. Además, si siempre se están quejando de que no tienen tiempo ni para responder al vecino que presentó un escrito, ¿de dónde lo van a sacar para poder departir con tanta gente? ¿Cómo se coordina un grupo tan grande? ¿No será, amigos míos, que el enchufismo ha llegado a extremos insospechados y hay que pagar favores y prebendas?
Mientras ordenaba papeles en días pasados, releí algunos saludas de programas de fiestas en la década de los ochenta y observé que eran distintos, con temáticas adecuadas a cada lugar y con tintes de originalidad. Los de ahora son todos iguales (todos venden los mismo, decía un conocido mensaje publicitario). Y se dispone de… Déjalo estar, no te amargues y disfruta del buen tiempo.
Hasta mañana.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Por La Gomera

El 21 de agosto de 1962 recalé por vez primera en La Gomera. Me llevaron en el correíllo ‘La Palma’. El mismo que rescató Pepe Segura, gorra en ristre –¿no te acuerdas de la foto que dio la vuelta al mundo, y no en 80 días?–, y saludando desde el puente de mando. Digo bien, me llevaron al viejo campamento de El Cedro en un viaje que se iniciaba en Santa Cruz a medianoche y finalizaba en La Villa a las ocho o nueve de la mañana. En el intervalo, un mareo por esos mares que mejor dejarlo quieto.
A pesar de pasarlo mal para allá (cada vez que arrancaban el motor para la luz de por la noche, recordaba el ruido del dichoso barco y… ¡me estuvo bailando la cabeza más de una semana!), ahí debió surgir mi enamoramiento por esa isla. A la que voy al menos una vez cada año. Sencillamente porque lo necesito. Puede que no lo entiendas, pero yo sí. ¡Ah!, para acá nos trajo el León y Castillo, de la misma echadura que el que nos llevó, pero con una diferencia abismal: el retorno fue de día. Y venir en cubierta recibiendo la suave caricia de la brisa y contemplando la costa del Sur tinerfeño… ¡Amigo, eso son palabras distintas!
En aquel campamento, con piscina incluida en un recodo del riachuelo, aprendimos muchas cosas. Tu imagínate mi caso. Metido esos primeros años de mi vida en medio de una finca de platanera –cual un Pepillo o Juanillo cualquiera– y que, de repente, te sacan y te sumergen en otro entorno con un enjambre de chicos de más o menos tu edad. ¿Lo entiendes, no?
Y como habrán observado que los abandoné durante cinco días, manifiesto solemnemente que ni portátil, ni pedirle un favor a cualquier amigo, ni nada de nada. Relajo total. Naturaleza, comer y dormir, que para eso está uno muy estresado con el alejamiento de las aulas y requiere terapias silbadas. Ni leí la prensa. Laurisilva por el monte, patos en La Encantadora y un pescadito en Gran Rey. Alguna caminata y paseos nocturnos por el muelle. Si no fuera por la foto que incluyo, concluiría con aquello de ‘y al carajo Diego’. Pero Diego es ese otro viejo que me acompaña junto a la piedra que en febrero de 2007, 44 años y medio después, nos recordó lo de ‘cómo ha pasado el tiempo’. Tanto que ahora caminamos por otros senderos más livianos y sin los agobios de Milagros, los insultos de Soria y los ninguneos de Paulino, que Dios guarde a los tres (y que les eche un candado, a ser posible y si no es mucho pedir).
Sí, ya sé que suelo ir a partir el año allá, pero hubo otros planes y me adelanté. Ahora no tengo las premuras de horarios y de volver al tajo. Sí, ya sé –otra vez– que te doy envidia, no sana sino cochina, pero te puedo asegurar una cosa: eso se pasa con el tiempo. ¿Qué apostamos?
Un cariñoso y afectuoso silbido.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Más de lo mismo

Si creían ustedes que con las disculpas iba a quedar el asunto zanjado, cuán equivocados estáis. Los medios, ante todo, deben vender. Ante todo y sobre todo. Es la consigna del patrón. Hemos pedido perdón todos –ha quedado bonito y con una enorme carga de sentimientos–, incluso alguno parecía sincero, pero corresponde volver a la acción. Y en ello estamos. Contamos, por supuesto, con la inestimable colaboración del abogado, quien, presuntamente, ha encontrado monumental veta en el filón. Le sugiero la participación directa en destacados programas que proliferan en estas ínsulas baratarias.
“El Mundo, en boca del abogado…”. Ya metimos la pata una vez y ahora no nos trincan. Pues sí, el susodicho, en la autonómica, faltaría más, la de más audiencia en Canarias, tanto versión vídeo como versión audio, quiere pagar con la misma moneda. Desde que inventamos aquello de ‘pondré al asunto en manos de mi abogado’ –cuando no de mis abogados–, estamos meando por fuera de la bacinilla con más frecuencia de la que sería deseable. Si la guardia civil llamó al detenido ‘cabrón’, qué menos que devolver la moneda calificando al médico de ‘hijo de puta’. Es lo que denomino favor por favor.
Algún periódico ya colgó la pertinente encuesta para demostrar científicamente que el culpable del desaguisado es fulanito de tal. Y hace dos días comentábamos que nos olvidamos de la presunción de inocencia. La radio de Willy montó guardia en El Mojón y, en opinión de los consultados (no especifica cuántos), la falta de medios es la causa de tantos errores. Porque yo me hice una vez un morado y casi no me creen que se produjo por una caída. Ahora, en el supuesto de esta pobre criatura, hacemos crítica por todo lo contrario. Isabel de Luis, otrora maestra en el Tomás de Iriarte portuense, soltó lo que pudo y más. Y no pasa nada, oiga, no pasa nada.
No vamos a hacer leña del árbol caído. Que te crees tú eso. Si podemos lo desmenuzamos y lo dejamos más chiquito que el compost. Me pongo la chaqueta, me quito la chaqueta, saludo a un policía nacional, abro el maletero del coche, miro hacia la cámara que está en lo alto, arranco, aparco un fisquito más adelante. Si se cree Garzón que él solo sabe hacerlo, va arreglado.
Y muchísimos tertuli…anos. Expeliendo y excretando, como su propia terminación indica. Inculpando y condenando. ¿Mañana? Mañana será otro día.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Provocar

No creo que una concejala delegada de Economía y Hacienda pueda indicar que “hemos tenido que buscar recursos dentro de la operación de tesorería para abonar los certificados de las obras contempladas en (pon tú el pueblo que te apetezca), al no aparecer las cantidades ingresadas por el Estado, y que debían ser dedicadas, exclusivamente, al pago de las mismas. Algo, sinceramente, inexplicable”.
No, no y no. Alegrías verbales de ese tipo, no. Porque si lo que manifiestas es verdad, alguien tiene que ir a la cárcel por desvío de partidas finalistas. Y quedar inhabilitado y no poder ocupar cargo público para siempre jamás. Hasta el más ignorante de los españolitos de a pie, a saber, yo mismo, ha escuchado el mecanismo de las obras del Plan E, el plan Zapatero. Y tú estás diciendo que no se sabe dónde está el dinero que remitieron de Madrid. ¿Qué significa eso? ¿Se lo gastaron en otro cometido? ¿Se metieron los euros en el bolsillo para ir a la peluquería? ¿Lo despilfarraron en un botellón o en sellos de Correos?
“Aún a día de hoy estamos recibiendo a proveedores a los que se les adeudan cantidades de dinero que no tramitó el anterior gobierno. Lo hemos tenido que provocar nosotros para conocer cuál es el estado real de las arcas municipales”, declaró la concejala. Muchacha, explícame lo de ‘provocar’, porque mi corta sesera no da para tanto. Tal y como está el patio, parece conveniente no mentar la palabreja ‘provocar’. Y si me dices que es ‘convocar’, en manera alguna puede achacarse a los medios de comunicación, porque al menos en dos de ellos venía eso escrito. ¿Podría ser: “Los hemos tenido que convocar nosotros”?
Para que adviertan que no todo es negativo, no vean cuánto me alegra que en dos meses se haya podido hacer tanto. Conozco otros casos que ni siquiera esos dos meses es periodo de tiempo suficiente para contestar un mísero escrito. ¿De qué? Da lo mismo, se les presupone que sepan al menos leer.
Y con respecto –o como continuación– al comentario de ayer, decirles que se busca a un filtrador y que el abogado ha pasado a formar parte del gremio de los que les encanta chupar cámara. Por supuesto, todos pedimos perdón.
Hasta mañana.

martes, 1 de diciembre de 2009

¿Y ahora, qué?

Los medios, y no tan medios, de comunicación se dieron ‘gusto’ la pasada semana con el padrastro de la niña de tres años “violada, quemada y golpeada”. Las cadenas de televisión emitieron imágenes a porrillo. Se dio todo lujo de detalles y el estigma marcó huella indeleble. Cada cual dictó sentencia por vía sumarísima. No hizo falta la foto con el ‘se busca’ debajo, porque de ello se encargaron los advenedizos. Cuando la niña, desgraciadamente, murió, volvimos a asestar certera puñalada al vil maltratador. Porque la pena de muerte más tradicional se antojaba escaso castigo para tan execrable crimen. En corrillos de taberna, leña al mono que es de goma. Las asociaciones de cualquier cosa salieron a la palestra a voz en grito. Incluso una llegó a manifestar, una vez aclarado el entuerto, que fue un alivio que la muerte de la niña no haya sido causa de los malos tratos. Sin comentarios.

Cierto es que el informe médico inicial debe ser la vergüenza de toda la clase sanitaria, pero ni un plumilla recordó lo de la presunción de inocencia. Ya se secaron las fuentes y las azucenas están marchitas. Y aquellos que tuvieron ante sí un micrófono dispararon a mansalva. Tertulias, peñas y círculos acapararon audiencias. El pobre infeliz fue cortado en rodajas. Y no una vez. Que ojalá, como mal menor.

¿Y ahora, qué? Pues nada. La falta de escrúpulos hará que todo vuelva a la normalidad y donde dije digo, ahora digo diego. ¿Deontología? ¿Ética? Eso no se mama en facultad universitaria. Pero tampoco estando de pingoneo en el tresillo de la sala (algunos lo llaman plató). Voy al baño. Tengo la imperiosa necesidad de vomitar ante tanta náusea. Ni siquiera el conocer que un tal Guillermo García (¿lo llamarán Willy en casa?) era el más guapo de España (ver Canarias 7, edición de ayer), me sacó del abatimiento. Periodistas. Bazofia. Espingarda. Hidrocéfalo. Merluzo. Pelagato… Eso, vocablos sueltos, sin hilo conductor.

Lo malo es que el abogado defensor está adquiriendo tanto protagonismo mediático, haciendo tantas y tantas apariciones, que me da por pensar más cosas raras. Si pretende aprovecharse y sacar tajada le recomiendo mesura; que no me parece correcto el que ahora se meta en estos fregados, en estos chanchullos. Si su premisa es dejar trabajar a la justicia, predica con el ejemplo.

Espero que mañana me halle más recompuesto.

lunes, 30 de noviembre de 2009

MT

Cada vez que voy al supermercado (yo conduzco el carrito) tengo encomendados varios cometidos, aparte del que está entre paréntesis: azúcar, hacer cola en la carnicería (jamón y queso) y el aceite. Casi siempre MT, salvo cuando haya otra más barata en oferta. Estamos jubilados y en crisis, no se olviden.
Creo que hay otros productos alimenticios bajo esas siglas (MT). Indagaré el significado (me parece que es Mar Tierra), porque te juro que abandoné el ordenador y fui a mirar debajo del poyo, pero no había (ya te lo dije: agarramos de otra en oferta, la lata es verde aceituna, qué raro). Y mientras regresaba, subiendo por la escalera pensé que MT podría servirme para ‘Modelo de Telediario’ (dejé pasar la oportunidad unos días atrás). Y me fui a Google a curiosear:
MT es una marca de cascos (de las motos y otros vehículos que lo requieran). MT es una empresa de Educación y Formación. MT es una canción de Gloria Estefan. MT ofrece soluciones para la industria. MT (Sport Tenerife), te lo puedes imaginar. MT es ‘Media Temple’ (anda ya). MT se dedica a la perfumería y cosmética. MT es mensajería instantánea. MT está relacionada con las bolsas y finanzas. MT tiene que ver con el mundo del motor. MT, ídem de ídem con la informática. MT es una inmobiliaria. MT es una sociedad encargada de elaborar materiales biodegradables. MT es un blog que nos sumerge en El Bierzo (León). MT es tequila. MT es otro blog de alguien que se identifica como ideógrafo (yo también debo serlo, porque me entran unas ideas del carajo p´arriba). MT es un directorio interactivo de bienes-productos y servicios de El Salvador. MT es una empresa mejicana cuya función es la prestación de ‘Holidays & Cruises’ (qué bonito). MT es una granja integral ecológica. MT es una productora. MT es un restaurante. MT es una emisora de radio (FM) en Arrecife, Lanzarote.
Y MTV distribuye señal de televisión por cable y satélite por todo el mundo mundial. Y MTV es una cadena de televisión (Mi Tierra Televisión) colombiana (eso está allá por Sudamérica).
Hay cosas que todavía nos sorprenden. ¿Cómo? No te puedo contestar porque Servando me dijo que virara la antena para Izaña.
¡Ah!, me iré unos días a La Gomera el fin de semana. En un año, más o menos, saldremos de Garachico o del Puerto (¿o estos son sólo para La Palma?) Y el del Guindaste, ¿cuándo, Oswaldo?

domingo, 29 de noviembre de 2009

Vámonos de Tenderete

Abandonó Yeray la presentación del programa televisivo ‘Tenderete’ y me acordé de unas coplas y otras boberías –como siempre– escritas a lo largo del tiempo. Y como hoy es domingo, dejaremos al margen comentarios de mayor enjundia (política) y diremos que la primera quintilla fue interpretada por Macu Oliva (A.F. de Higa) en el citado programa. Al presentador en aquel entonces, Antonio Betancor, pareció no gustarle el vocablo “respete”. Debió pensar que era más adecuado “recuerde”. Pero como yo entiendo que el recuerdo es algo más íntimo y personal, así la dejé. Creo que el tiempo, desgraciadamente, me ha dado la razón. ‘Entre todos lo matamos y él solito se murió’. Las tres décimas del final ya fueron publicadas en “Bienmesabe”, pero el amigo Manolo Abrante me concede ciertas dispensas.
Al programa Tenderete
quiso traerme el destino;
alzo mi copa de vino
y brindo que se respete
la memoria de Nanino.

Pongo mi grano a tostar,
y al calor de la tafeña
elevo al Cielo el cantar
en copla de malagueña.

Atento allá en las alturas,
Nanino ve con agrado,
cómo su obra perdura,
cómo el tiempo no ha pasado.

Si recordar es vivir,
hoy pudo ser un gran día;
lo que mi alma sentía,
al Tenderete venir,
lo plasmé en esta folía.



Del programa Tenderete
se nos apea Yeray,
al jefe dijo ‘bye-bye’,
y se largó p´Agaete
en busca de algún tolete
con que dar un jaquimazo
a tanto tío pelmazo,
que no sabe que el folclor
merece nuestro loor
desde Janubio hasta Mazo.

Sólo quieren dinerito
p´a la ‘cabeza caliente’,
sin importarle la gente
que forjan buen trabajito.
Por eso, Yeray, te invito
a seguir apechugando,
que Nanino está mirando
cómo le crecen enanos,
pues se les va de las manos
y siguen p´alante ufanos.



Dejémoslo estar por hoy,
que nueva ocasión habrá,
pero coraje me da
y aquí en Bienmesabe estoy.
Si nadie sabe quién soy,
anónimo seguiré,
y ‘lo nuestro’ sentiré
sin alharacas ni ruidos:
fueron mis versos silbidos
que desde Agando expresé.



Creo que he perdido el anonimato al que se alude. Total, uno pierde tantas cosas. Que se lo pregunten a las llaves. Hasta la próxima.